Capítulo 28

633 61 21
                                    

Después de que ambos cazadores regresaran a hablar con el joven del reloj amuleto, y que Sam le aclarara varias veces que era su novio y que su relación iba en serio, lo distrajeron para que luego Molly pudiera quitarle la reliquia sin que lo notara, al menos por unas horas. Le colocaron la mezcla y procedieron a quemarlo. Del amuleto salió una especie de humo negro, pero eso significaba que se había terminado. Molly volvió a colocarse sus jeans, blusa y chaqueta. Cuando salió de los vestidores, Sam se había ido. Esto le pareció extraño, pero al instante recibió un mensaje de él, en el que le explicaba que Dean lo había llamado con urgencia. Al encontrar el auto de Jody, vio a Claire y a Alex discutiendo, porque Alex había vuelto a ganar el asiento del copiloto con piedra, papel o tijera. La rubia aseguraba que Alex se había demorado en responder y por eso supo cómo ganar. La nephilim intentó tranquilizarlas en el camino a la casa de Jody.

Al llegar, tocaron tres veces la puerta, pero todo estaba silencioso. Demasiado. Luego de unos segundos, la puerta sé abrió, pero no las recibió nadie. Todas las luces estaban apagadas.

Molly frunció el ceño, se suponía que todos estaban aquí.

—Chicas, ustedes quédense aquí, ¿entendido?

—Si hay acción, ¿no crees que también me gustaría participar? —preguntó Claire.

—Entraremos contigo. —dijo Alex.

No iban a ponerse a discutir, debían averiguar qué sucedía. Molly tocó sus bolsillos, no estaba su arma. No importa, no la necesitaba, pensó. Sus ojos se encendieron en fulgores blancos. Dio un paso adentro, y empezó a caminar lentamente. Escuchó pasos.

De pronto las luces de toda la casa se encendieron, y gritaron: "¡Sorpresa!"

Vio a Sam, Dean, Jody, su padre y a Castiel delante de ella, con globos y otro pastel con su nombre. Incluso había un cartel decorado detrás de ellos que decía: "Feliz cumpleaños", y cada letra con distinto color.

A la castaña se le formó una sonrisa en el rostro.

—¿Qué? ¿Lo hicieron otra vez? —preguntó sin dejar de sonreír.

—No podíamos dejar pasar tu cumpleaños por alto, Molly. —respondió Jody acercándose a ella y colocándole un collar de flores celestes, que se usaban en las fiestas. Le dio un abrazo fuerte— Además del delicioso pastel que preparé, tenemos otra sorpresa para ti.

—¿Qué? ¿Más que esta? Imposible.

—Eso es porque no me has visto aún.

Dijeron detrás de ella. Volteó para encontrarse a quien menos esperó.

—Austin... —nombró con los ojos llenándose de lágrimas.

El muchacho le sonrió y la nephilim corrió para abrazarlo.

—Te extrañé tanto.

—Yo también te extrañé, Sara.. es decir, Molly. Lo siento, aún me es extraño.

Se separaron.

—No importa, ¿ya lo superaste?

—No tenía nada que superar, Mol. —respondió Dean. —No quería verte hasta saber controlar sus instintos.

—Pude ayudarte, ¿por qué no me lo dijiste?

—No quería lastimarte. Ni siquiera estaba seguro de estar listo hoy.

—Esta mañana lo convencí de que sí lo estaba. Tuvimos una charla de cazador a hombre lobo. —explicó Dean. Entonces a eso se refería el arcángel cuando dijo "esto y aquello" esa mañana, recordó.

The Little Girl Is Gone⌠Supernatural⌡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora