18.Presentacion Inesperada✾

4.1K 431 31
                                    

Pov Yamato☚

Han pasado ya algunos meses desde que tuve un enlace con Misaki aunque fue un poco difícil al principio ya que este tenía que heredar la empresa de su padre y mudarse a otro lado.

Y no. No me convenía tener a el castaño tan lejos de mí.

Podría atacarlo un alfa y no estaría ahí para defenderlo. No me quería arriesgar así que tuve reunirme con sus padres además que sería una buena oportunidad de presentarme ante ellos.

Claro, todo salió bien y que sus padres me entendieron como su hijo y me aceptaron en su familia ahora solo faltaba presentarlo a mis padres.

Y creó que ya es hora .Odio ocultar las cosas así que ya tome la decisión y espero que se lo tomen con tranquilidad y si por A o por B no aceptan mi relación pues. Escaparía con él a algún lugar donde no nos encuentren. Sería lo más conveniente aunque este se negara.

«Ahora que te tengo, no te dejare ir»

— ¿En qué piensas?—le dice un castaño frunciendo su ceño mientras le da algunos informes en su escritorio.

—Pienso en alguien que hace unos días cabalgo encima mío —sonrió haciendo que el castaño se sonroja y mirase a otro lado.

— ¡Ponte a trabajar!—me giro y lo abrazo por la cintura atrayéndolo a mi pecho.

—Misaki— lo llame —creó que ya es momento de presentarte ante mis padres ¿no crees?

Se queda pensando unos minutos.

—Si me sueltas te respondo—lo suelto y apoyo mis codos sobre la mesa y espero su respuesta. El solo suspira y responde —Esta bien, pero... no me toques mientras trabajamos ¿Bien?

—Está bien entonces...—saco mi celular y marco un número.

— ¿Qué haces?—se acerca y trata de escuchar — ¿A quién llamas?

—A tu futuro suegro...

Termino la hora de trabajar y salimos. Realmente me estresa que los empleados nos miren. Ya saben que estamos junto pero siguen con aquellas miradas para nada discretas.

A veces me pregunto si hice bien el estar con él o pienso ¿Hice algo para tener la felicidad que tengo ahora? ¿Realmente está bien ser feliz? Son preguntas que no le encuentro una respuesta. Y el hecho de despertar cada día y tenerlo a mi lado respirando suavemente sobre mi cuello, que me abrace cada vez que tengo frio y mágicamente entro a aquel mundo al que le llaman fantasía.

«¿Qué más puedo pedir?»

• Somos pareja

• Vivimos en el mismo techo

• Hacemos cosillas juntos

• Me prepara la comida

No puedo pedir cosas mejores que estas. Recuerdo que cuando era pequeño me daban juguetes para acallar mis sollozos cuando no sabían que solo necesitaba un abrazo para silenciarlos.

CASITA«

— ¿Me pongo este? ¿O este? — preguntaba mi castaño con dos camisas, uno de color negro y otro de color blanco

—Pues... Ponte los dos—dije mientras trataba de atar mi corbata pero al no poder comencé a gruñir — ¿Por qué no me sale?

— Porque lo tienes al revés, tontito—dijo mientras se acercaba para quitármelo de las manos y ponérmela—Se pone así. Observa.

— ¿Cómo quieres que observe si estás muy cerca de mi cara?—y presione mis labios contra los suyos y poco a poco comencé a desabotonar su camisa ¿Blanca? Hasta sentir un pequeño y doloroso peñizcon en mí estomago que hizo que gritara de dolor.

— ¡Se nos hace tarde!

Salimos y nos dirigimos al auto que estaba estacionado en el garaje.

Mientras conducía pude notar que Misaki temblaba y chasqueaba sus uñas.

Me reí ¿Tan nervioso es? así que tome su mano para entrelazar nuestros dedos. Me miró confundido y cuando entendió, sonrió.

«Yo también estoy nervioso»

Llegamos a un restaurante muy famoso. Bajamos tomados de la mano y una persona nos guió hacia donde estaban mis padres. Y cuando estábamos justo enfrente de la puerta. Me gire y lo abracé.

— Digan lo que digan, hagan lo que hagan, reaccionen como reaccionen, permanecerás a mi lado ¿Esta bien? —pregunté a lo que el otro sonríe.

— Esa es mi linea,ladrón—ríe y suavemente pasa sus manos sobre mi espalda—Yamato... Haga lo que haga yo... te pertenezco. No creas que no me di cuenta que me marcaste.

— Pensé que no te darías cuenta maldición — sonrió y me separó de el para ver aquellos ojos claros que posee— ¿Es una promesa? ¿Nunca me dejaras, verdad?

—Te lo prometo —sonríe dándome un tierno beso en mejilla—Vamos, tenemos una reunión que atender.

Entramos y las sonrisas desaparecen y el tiempo se me para ¿Que hace el aquí?

— ¿Misaki...?

— ¿Klaus?

«¿Qué haces aquí?»

[Omegaverse] Déjame estar contigoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora