Capítulo 26

1.7K 52 0
                                    

Capitulo 26.
Continuamos hablando de cosas sin sentido. Me preguntaba si alguna vez alguien había logrado estar con Zayn de esta manera ¿sería yo la única que logro lo que miles de chicas en el instituto deseaban? No debería importarme, yo estaba haciendo lo que a mi me hacía bien y al parecer eso significaba estar con el... obviamente estar con él en el sentido de ser amigos.
A eso de las siete me llevo a casa, sus padres ya se habían ido ya que no habían autos estacionados en la calle. Me despedí como siempre y entre a casa. Mi madre se encontraba en el sillón cruzada de brazos. Sí, estaba en problemas.
- No saludaste, me dijiste que volvías en dos horas y te fuiste cinco, no me pediste permiso para salir- enumero cada cosa que hice y se levanto del sillón-. ¿Alguna explicación?
- Creo que ya sabes la razón. ¿Cuántas veces te he dicho que ese hombre no me cae bien? ¿Cuántas?- repetí al ver que no me contestaba-. Puedes pedirme de todo, de todo menos ser amable con ese tipo.
- Es mi jefe- repuso.
- No me importa que sea tu jefe, eso no lo hace una persona más importante para mi. Sigue siendo la misma basura- contesté-, y no me importa cuantas razones para tratarlo bien me des, no cambiaré.
Mi madre asintió frustrada, cuando me ponía algo en la cabeza no me lo sacaba y era completamente insoportable. Ahora me cambiaría de tema, ya no había más que hablar sobre esto. 
- Vee llamó- me avisó con tranquilidad mientras se volvía a sentar-, le conté que estabas con Louis. ¿Quién es ese chico?
- Un amigo, simplemente tenía que devolverle su chaqueta.
- ¿Están en algo? ¿Se gustan?- pregunto-. Sabes que puedes contarme si quieres.
- No estamos en nada más que en una buena amistad y no, no me gusta- contesté-, además teníamos que terminar un trabajo.
- La misma excusa que le dije a mi madre la primera vez que me encontré con tu padre- me echo en cara riendo. Suspiró angustiada al acordarse de eso-, me gustaría conocerlo algún día podrías traerlo a casa.
- No creo que sea posible, somos amigos nada más- repetí. Antes de que pudiera seguir preguntándome sobre Louis subí a mi cuarto. Intenté abrir la puerta pero luego recordé que estaba cerrada. Busqué la llave en el bolsillo de mi pantalón y la abrí. El corazón se me acelero al ver que mi armario se encontraba abierto por lo que yo recordaba lo había cerrado antes de salir. Alguien había entrado. Debajo de mi cama había un papel bastante grande, me temblaban las manos. Sabía de que se trataba pero no podía creer que alguien haya podido entrar a mi cuarto cuando la habitación estuvo cerrada con llave.
Estaba en mis sospechas, no pudo haber sido Jack. El estaba en el pasillo cuando yo salí de mi habitación. El vio como cerré la puerta y como me quedaba con la llave, estuvo todo el tiempo con mi madre y su esposa almorzando. Mi madre hubiera sospechado y de la nada se salía de la casa. Suspiré, no quería abrir el papel pero tenía que hacerlo.
- _____, ¿que quieres cenar?- pregunto mi madre haciendo que me sobresalte. Arrugue el papel y lo guarde bajo la almohada-, ¿que tienes ahí?
- Nada- respondí débilmente-, solo... una hoja de mi diario.
- Ya veo... bien ¿quieres que pida una pizza?- asentí, quería que salga de aquí lo más rápido posible.
Cuando mi mamá salió del cuarto volví a sacar el papel de debajo de la almohada. Casi me descubría ¿que pasaría si ella encontrara los papeles en mi cuarto? creo que no estaría en un problema, estaría muerta. A mi mamá no le gusta que le oculte las cosas y tarde o temprano se termina enterando de todo. Solo que si de esto no digo nada, no tendría porque darse cuenta. Abrí el papel y cerré los ojos, quería hacerlo cuando este segura de que ahora no me pasaría nada. Recordé las palabras que Zayn me había dicho hoy por la tarde "Tu madre esta a salvo y tu también por ahora" eso querría decir que nada podría pasarme.
"¿Cuánto piensas que falta para que llegue tu fin? si fuera tu me iría despidiendo de los amigos o... escaparía de nuevo, pero sé que eres muy cobarde para hacerlo tu sola. Disfruta tus últimos días. "
No reconocía la letra, supongo que quien sea que haya sido la distorsiono. No creo que sea tan estúpido como para escribir con su verdadera letra. El miedo había vuelto. Lo que había echo que este día fuera genial esto lo arruino completamente. Doble la carta con cuidado y la guardé con la anterior. Si me seguían llegando cosas así armaría una colección de amenazas. No bajé a cenar, le dije a mi mamá que me dolía mucho el estomago y que había comido con Louis. No pegué un ojo hasta más o menos las doce de la noche. Solo daba vueltas y vueltas pensando quien podría ser el que esta haciendo todo esto, también pensaba si algún día lo vería. ¿Me estaría vigilando? El día ese que me estaban siguiendo... ¿Podría haber sido verdad? Pero después recordaba las palabras de Zayn y me sentía segura, el dijo que nada me pasaría y que estaba a salvo. ¿Estaría el enterado de algo que yo necesitaba saber? seguramente, no había dudas. El me dijo que estaba haciendo bien en querer alejar a mi madre de su padre y eso me decía que algo raro había allí.
Me despertó el molesto rayo de sol de la mañana. Otro día más de clases, por suerte mañana era sábado. Podría quedarme durmiendo hasta la hora que quisiera, excepto por la salida de las siete. Suponía que la pasaría bastante bien con las chicas, no me vendría mal conocer el centro del lugar en el cual estoy viviendo. Vee me estaba esperando con el auto. Otra vez, me senté en la parte trasera. Se estaba haciendo bastante habitual ya que como Jess vivía a dos calles de la casa de Vee pasaba primero por ella.
- ¿Están entusiasmadas por la salida de mañana?- pregunto Vee tratando de comenzar una conversación-, he visto algunas tiendas que están geniales.
- Claro- contestó Jess-. ¿Tu ____?
- Sí- respondí, tenía la cabeza en otro lado-, sí obvio. Quería pasar por una librería, necesito comprar un libro.
- Hay una pequeña en el centro pero seguro te gustará- comentó Vee-, ya quiero que sea mañana. De seguro la pasaremos genial.
- Seguro- afirmé tratando de parecer emocionada, pero en realidad era así como menos me sentía.
Cuando llegamos a la escuela me encamine hacía mi casillero. Faltaban diez minutos para que empiece la clase de Lengua, todavía tenía tiempo. Agarre algunos libros, los necesarios para no tener que volver en el recreo. Los guardé en el bolso y me dirigí al salón. El profesor no había llegado y el salón estaba en descontrol, me dirigí a mi asiento pero estaba ocupado. Tracy estaba hablando con Zayn. Genial, que manera de empezar el día. No quería esperar a que se corriera ni tampoco quería pedirselo. Busqué algún asiento vacío para sentarme y encontré uno justo en el fondo. Apoyé los libros y oculté mi cabeza entre mis brazos usándolos como almohada. Estaba cansada, no había podido dormir y estaba agotada de pensar todo el tiempo en ese estúpido papel. Me estaba comiendo la cabeza todo porque no quería contárselo a nadie.
- ¿No te sentarás conmigo esta clase?- pregunto una voz en mi oído.
- Te sentarás con Tracy, por cierto gracias por avisarme que alguien ha ocupado mi lugar- dije sin levantar mi cabeza.
- No me sentaré con ella- contestó-, se acercó a hablarme.
- De lo que sea que hayan estado hablando parecía bastante entretenido- comenté, no sabía porque me estaba comportando así. Zayn se rió y se sentó a mi lado.
- ¿Estás enojada porque hablé con Tracy?- pregunto, incrédulo.
- No, estoy enojada por un montón de otras cosas que no tienen nada que ver con esa rubia oxigenada.
- ¿Podría saber porque?
- No, es tema mio. Además, creo que es un conflicto conmigo misma.
- ¿Estas enojada contigo?- pregunto riendo-, jamás en mi vida hablé con una persona tan rara como tu.
- Sí, estoy enojada conmigo misma, ¿problema?- murmuré de malhumor, el no me había echo nada pero con alguien tenía que agarrarme.
- No, ninguno. ¿Segura que no quieres contarme de que se trata ese 'problema'?- entono la palabra con sarcasmo.
- Ya Zayn, no estoy para chistes. Ya que eres tan serio a veces podrías serlo ahora, no quiero hablar con nadie.
- Quiero que te sientas mejor- comentó-, al menos eso intento. No soy muy bueno en hacer reír a la gente.
Recogí mis libros y me pasé a nuestro asiento. El profesor había entrado a la clase y lo único que faltaba era que me rete porque no me encontraba en mi lugar. El asqueroso perfume de Tracy había quedado allí, no la dejaría volver a mi lugar nunca más. Si quería hablar con Zayn que no lo hiciera en mi asiento y menos si tenía ese horrible perfume con olor a plástico.
- ¿Te gusta el olor de Tracy?- pregunto al ver mi reacción.
- No- respondí cortante-, nunca me gusto. Creo que a ti si, no es cierto?
- Debo admitir que no es tan feo como tu crees, es bastante... delicioso- inquirió tratando de hacerme enojar aún más. Gruñí y por primera vez en lo que va del año intenté poner atención a la clase.
Las horas pasaron lentas. No tenía ánimos de hacer nada y Vee se había dado cuenta. Todo lo que había pasado ayer me había caído como un balde de agua fría por más que no lo quisiera admitir y eso se notaba en mi estado de ánimo. Lo único que quería era llegar a casa y acostarme, estar en paz.
- Si mañana te sientes mal no hace faltas que vayas- me avisó a la salida de la última clase.
- Iré- afirmé, nada mejor que una salida para despejarme de los problemas-. Hoy no pude dormir bien, estoy demasiado cansada.
- Jess nos está esperando en el patio de entrada, esta con Niall y Harry- dijo, cambiando de tema.
A paso lento nos dirigimos hacía donde estaban los chicos. Era normal quedarse unos minutos más en el colegio a la salida ya que siempre se arreglaban salidas o se hablaban de cosas que los profesores no nos habían dejado terminar de hablar en clases, cosa que pasa bastante seguido. Harry saludo a Vee con un beso, sonreí al recordar que yo ayude a que estén juntos. Esa sonrisa fue la única que salió en todo mi día.
- ¡____!- Harry me dio un beso en la mejilla-, hace mucho que no hablamos. Gracias, ya sabes porque.
- No hay de que- le respondí, sinceramente. Vee no entendía lo que estábamos hablando. También saludé a Niall para no parecer descortés.
- ¿Y bien, han arreglado algo para la salida de miércoles?- pregunto el rubio. Miré a Vee quien estaba esperando mi respuesta. No tenía ganas de pensar y viendo que todos estaban entusiasmados por ir al parque ese miércoles me vi obligada a decir que si. Vee me había prometido no dejarme de lado, tal vez lo cumpliera. Mientas ellos hablaban tenía la mirada clavada en el piso, no veía la hora de irme. Sentí que alguien tocaba mi espalda y me giré.
- ¿Puedo llevármela unos minutos?- le pregunto a Vee y a los chicos. Vee parecía embobada pero logro asentir. ¿Que quería ahora? Lo seguí hasta el árbol más cercano.
- ¿Qué pasa?- pregunte.
- ¿Te sientes bien?- pregunto, preocupado-, entendí tu malhumor de la mañana pero te he estado observando y... no lo sé. ¿Tienes algo?
- Quiero dormir, nada más- respondí, no podía tratarlo mal cuando se estaba preocupando por mi.
- ¿Segura?- insistió mirándome directamente a los ojos-. Puedes contármelo si quieres.
- ¿Es que sabes porque estoy así?- pregunte al ver que el se veía tan seguro en pedirme que le cuente mi problema.
- No- respondió-, pero me gustaría saberlo.
- Tal vez... otro día- propuse-, no sé si ahora es el momento, no todavía.
- Como quieras- inquirió con una sonrisa-, vuelve con tus amigos. Al parecer no les caigo muy bien- rió-, solo a Vee. ¿Es que le has contado algo?- se quedó en silencio y al comprender que le conté comenzó a reír-. Oh, ya veo. Con razón me mira así.
- Tenía que decirselo, ella me ha contado todo lo que le ha pasado con Harry- confesé-, no le he dicho todo exactamente.
- Entiendo, no me molesta- dijo, al parecer lo decía enserio. No me había dado cuenta de que me había sonrojado-, bueno creo que es mejor que vuelvas. Nos vemos ____.
- Adiós- me despedí mientras volvía con los chicos.

No estoy ciego pero todo lo que veo eres tú.|Zayn Malik|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora