EL CASTIGO

Capítulo 13

A las 10:45 pm Fred ya esperaba ansioso en una butaca frente al fuego, estaba feliz y a la vez aterrorizado por lo que le pudiese decir Hermione. El reloj dio las 11 y Hermione bajó por las escaleras rezando para que Fred se encontrase allí. Al verlo sentado en el sofá se relajó, había venido, seguía llevando su pulsera a pesar de la pelea y supo que la seguía queriendo.

- Fred .- dijo acercándose a él.

- Herms .- dijo Fred al percatarse de su presencia y se levantó del sofá.

Hermione no se pudo aguantar más al escuchar como la llamaba y se lanzó a sus brazos y le dio un gran beso en los labios, que Fred siguió con gusto.

- Lo siento .- murmuro Hermione al separarse -. No podía aguantar ni un minuto más, siento todo lo que dije sobre tu f...- Fred no le dejó continuar poniendo el dedo índice en sus labios.

- No importa, lo que importa es que los dos queremos volver a estar juntos .- Hermione asintió con la cabeza porque aún tenía en dedo de Fred en los labios.

- Quiero que estemos juntos para siempre .- dijo Hermione cuando Fred bajó el brazo.

- Estaremos juntos para siempre, te quiero Herms .- dijo Fred antes de darle de nuevo un beso.

- Yo también te quiero Fred .- dijo Hermione cuando se separaron para coger aire.

- Menos mal, ya eran horas .- dijo una voz detrás de ellos -. Llevamos dos semanas viendoos tristes .- dijo George desde las escaleras al lado de Harry.

- George!! .- gritaron al mismo tiempo Hermione y Fred.

- Dejad de espiarnos! .- dijo Fred.

- Solo queríamos asegurarnos de que hacíais las paces, llevas dos semanas prácticamente tirado por los suelos.- dijo George -. Pero ya que os reconciliasteis nos vamos a la cama , verdad Harry?

- Si George, pero cada uno a la suya! .- se rió Harry.

En cuanto se fueron, Fred y Hermione se acurrucaron en el sofá abrazados.

- Echaba de menos esto .- dijo Fred.

Al día siguiente mientras estaban cenando, oyeron gritos que provenían del vestíbulo, Hermione se levantó y junto con la mitad de los alumnos se dirigieron allí a ver que ocurría.

Los alumnos formaban un corro alrededor de la profesora McGonagall, la profesora Trelawney, Umbridge y dos grandes baúles.

-¡No! .- dijo la profesora Trelawney -. ¡Esto no puede ser!¡Me niego a aceptarlo!

- ¿No se imaginaba que iba a pasar esto? .- preguntó Umbridge -. Pese a que es usted incapaz de predecir ni siquiera el tiempo que hará mañana, debió darse cuenta de que su lamentable actuación durante mis supervisiones, y sus nulos progresos, provocarían su despido.

- ¡N-no puede despedirme! .- bramó la profesora Trelawney, que sostenía una botella vacía de jerez -. ¡No puede despedirme! ¡Llevo d-dieciséis años aquí! ¡H-hogwarts es mi hogar!

La profesora McGonagall le daba pequeñas palmadas en la espalda al mismo tiempo que sacaba un pañuelo de la túnica.

- Toma Sybill, tranquilízate... Suénate con esto... No es tan grave como parece... No tendrás que marcharte de Hogwarts.

- ¿Ah, no, profesora McGonagall?.- dijo la profesora Umbridge con su voz chillona -. ¿ Y se puede saber quién la ha autorizado para hacer esa afirmación?

- Yo .- contestó una voz grave.

Las puertas de roble se habían abierto de par en par y Dumbledore apareció entre los alumnos.

El cotilleo de que la profesora Trelawney había sido despedida y Dumbledore había contratado a un centauro llamado Firenze corrió como la pólvora por todo el castillo, y se habló de ello hasta altas horas en la sala común de Gryffindor, por lo que Fred y Hermione se resignaron a no poder verse esa noche.

Al día siguiente los alumnos de quinto de Gryffindor tendrían su primera clase de Adivinación con Firenze pero como Hermione lo había dejado tenía una hora libre; asique aprovechó para adelantar sus deberes sentada al pie de un árbol en los jardines.

- ¡Aquí estás! .- le dijo una voz muy conocida.

- Fred!! No se supone que deberías estar en clase de Defensa Contra las Artes Oscuras!!.- dijo Hermione.

- Si, pero no importa, no creo que apruebe este año .- dijo Fred sentándose a su lado.

-Pero....- empezó a reñirle Hermione, pero Fred que ya sabía lo que le iba a decir le dio un beso para callarla.

- Estoy mejor aquí .- dijo cuando se separaron.

Hermione tenía la cara tan roja como el pelo de Fred.

- Nos pueden ver...- dijo Hermione mirando a todos lados.

-Aquí no viene nadie a estas horas.- dijo Fred, y la volvió a besar. Se pasaron toda la hora besuqueándose y abrazados recostados contra el árbol.

Entre tanto, los TIMOS y los EXTASIS estaban cada vez mas cerca, algo que los profesores y Hermione seguían recordando a los alumnos. Harry, Ron y Hermione estaban convencidos de que de no haber sido por las reuniones del ED estarían hasta arriba de estrés. Las horas en la Sala de los Menesteres eran lo mejor de cada día, trabajaban duro y se divertían muchísimo. Harry se enorgullecía al contemplar a los otros miembros y comprobar cuánto habían progresado, y se preguntaba como reaccionaría Umbridge cuando los miembros del ED recibieran un <<Extraordinario>> en el examen de Defensa Contra las Artes Oscuras.