El que menos pensé || Christopher Velez #EQMP1

Cap 5 ®

Ana POV

-Ana es que.... - se mordió el labio con nerviosismo.
-Venga, dime, puedes confiar en mi - agarre su mano.
-Voy a dejar a mi novia - confundida, sorprendida y a la vez..bueno muy confundida, ¿que tiene esto que ver conmigo?
-¿Esto...que tiene que ver conmigo? - pregunte totalmente confundida.
-Pues, yo quiero que.... - parecía que estaba pensando bien las palabras que quería decir.
-Tu quieres que... - me estaba poniendo nerviosa a mi también.
-Yo, Ana quiero.. - en ese momento una cabellera negra se asomo por la puerta, enserio que momento tan oportuno.
-Ana, te dije que fueras directamente a casa después de instituto - dijo mi madre con autoridad.
-Lo se mama pero tenía que hacer algo - miro a Christopher y después su mirada volvió a mi.
-Oh, señora, yo soy Christopher Velez - él extendió su mano y mi madre le miró.
-Bueno hija, tu padre y yo queremos hablar contigo - ignoro a Christopher, algo que no era normal en ella, abrí la puerta del todo y le di un beso en la mejilla a Christopher en forma de despedida.

Entre y vi a mi padre sentado en el sofá, estaba serio y eso a veces me asustaba. Me senté en el sillón, mi madre se sentó al lado de padre, ambos se me quedaron mirando.

-Cariño tenemos algo muy importante que comunicarte - empezó a hablar mi madre, tomé asiento al frente de ellos y les mire algo confundida.
-Tu padre y yo hemos estado hablando y hemos decidido que.... - mi madre se callo, parecía estar meditando lo que iba a decir.
-Ay, ya hablen, me estoy poniendo nerviosa - me queje.
-Pensamos que te vendría bien un viaje - entrecerre mis ojos en busca de algo que me dijera que era mentira.
-Será una broma, ¿no? - me levante, a lo mejor si me lo hubieran dicho antes hubiera aceptado pero ahora no me quería ir, no podía irme.
-Tenemos que hacer un viaje si o si - mi padre me miro seriamente, eso significaba que no estaban de broma.
-Pero que pasará con mis amigos...y mis estudios.. - les mire nerviosa e histérica.
-Y ese chico con él que venías, ¿no? - desvíe la mirada, me sentía fatal, y lo peor era que no sabía porque.
-Hija, este viaje nos vendrá bien... - alce mi mano para que no sigueran hablando.
-Será bien para vuestros negocios, no me habéis tenido en cuenta ¿y saben que? Yo me quedaré, aunque tenga que vivir debajo de un puente, me quedaré aquí - subí corriendo a mi habitación y cerré la puerta de golpe.

Me tire en mi cama y ahogue un grito en mi almohada, cuando solte todo me levante y me puse mi pijama.

Estaba claro que no les vas a hacer caso.

Me encanta cuando me lees los pensamientos conciencia, jamás me moverán de esta ciudad.

Escuche unos ruidos en mi ventana, arrastre las cortinas y vi una silueta afuera, abrí la ventana y vi a Christopher, una piedra dio en mi cabeza haciendo que me queje de dolor y frote mi cabeza.

-Lo siento - puse mi dedo en mi boca para decirle que se calle, empezó a escalar por la escalera de incendios.

Reí porque se dio un golpe en la rodilla, no pude contenerme y estalle en carcajadas mientras él me fulminaba con la mirada.

Cuando llego a mi ventana y entro a mi habitación, miro todo con atención mientras yo estaba detrás de él. Se giro y nuestras miradas se encontraron. Desvíe mi mirada y mire cualquier cosa que no sean sus ojos.

-¿Que querías? - pregunté pasando por su lado.
-Que borde - bufo y me senté en mi cama.
-¿Me vas a decir que querías? - volví a preguntar intentado sonar amable.
-Esta bien, que insistente eres - se sentó a mi lado y por alguna razón su cercanía me incomodaba.
-Lo soy y ahora ¿me lo dirás? - hice un puchero mientras me alejaba de él lentamente.
-Ana, yo te quería decir que...tu..- me miro y se acerco más a mi, esta vez no me aparte o me incómodo si no que me sentí a gusto.
-Yo... - se acerco más a mi hasta que nuestros rostros estaban a centímetros.
-Que a lo mejor yo... - me estaba matando la curiosidad.
-Que tu... - junto nuestros labios en un beso lento.

Seguí el beso con todo el gusto del mundo y no sabía por que, puse mis manos en su cuello y él me apego más a él cogiendo me de la cintura.

Me levanto de la cama haciendo que casi caiga, reí en sus labios cuando me hizo enrollar mis piernas en su cintura, se sentó en mi cama y yo sentada encima de él, se separo de mi y junto nuestras frentes, me miro a los ojos y me volvió a besar.

-Se mi novia - esas fueron las palabras que dijo mientras me besaba pero al instante me separe de él y me levante -¿He dicho algo malo? - se acerco a mi pero me aleje como acto reflejo.
-¿Pero tu de que estás hablando? - ¿he sonado borde? No lo se.
-Ana yo quiero que seas mi novia - reí sarcásticamente.
-Nunca, hay tienes mi respuesta - me di la vuelta y empecé a caminar por mi habitación.
-Pero por que no, se que te gustó y tu a mi y además nos la pasamos bien los dos juntos - me pare en seco.
-Primero muerta antes de tener un novio como tu - me miro a los ojos pero volví a desviar mi mirada.
-¿Como que como yo? - respire ondo y le volví a mirar.
-Fuera de aquí - lo lleve a la ventana de nuevo.
-Pero yo... - le interrumpí medio alterada.
-Entre tu y yo no habrá nada más que una simple amistad - salió de mi habitación, me senté en el suelo y solté un suspiro enorme.

Me acosté en mi cama e intente dormir, no pude, sentía que estaba cansada pero no podía dormir.

Fui a la cocina, a lo mejor no podía dormir porque tenia hambre, y así era, comí algo y después me fui a mi habitación con más ganas de dormir.

Me acosté y para mi suerte pude dormir.

Sentía frío, mucho frío, frote mis delgados brazos con mis manos. Mire al frente, era una ciudad hermosa pero no se cual era, intente buscar a alguien pero estaba sola, sola en una cuidad, ¿raro no?

Volví mi vista a una tienda que resaltaba por algo, era una tienda de coches, el mismo coche que tenia Steven, me acerque a el y lo mire con atención, un millón de recuerdos vinieron a mi mente, suspire, algunos recuerdos eran buenos y otros malos pero lo que no entendía era que hacía el mismo coche de Steven aquí.

Me sente en el asiento del copiloto y cerré mis ojos, sentí una mano en mi hombro, levante la vista encontrandome con los ojos de Steven, intente gritar pero no pude.

Puso la llave y empezó a conducir sin decir una palabra.

Paro en lo que parecía ser un hotel, entró sin mirarme, mis piernas actuaron antes que mi cerebro y empecé a seguirlo. Se paro en el vestíbulo donde no había ni un alma. Se abrió una puerta y dejó ver a alguien más.

Christopher.

Me asombro verlo aquí, conmigo y Steven, se acerco a mi, se quedo en frente de mi, al lado de Steven.

Los mire extrañada, parecía que eran mudos, ninguno de los dos hablaba, abrí la boca pero Christopher se me adelanto.

-Tenemos que hablar - su cara reflejaba seriedad y eso no era muy usual en él.
-¿De que? - pregunte sin ningún rodeo.

Se acercaron los dos a mi hasta quedarse a centímetros de mi.

-De algo muy importante - respire ondo y los mire repetidas veces.

...

¡¡¡Volví!!! Gracias por leer

Capitulo editado.

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