CRUSH ✧ kaihun

Diez.

Nota:

Hello, ah. Llevaba tiempito sin actualizar. En realidad esta nota al principio es para advertir que el capítulo tiene contenido un poco subido de tono. Me costó mucho escribirlo y entremezclarlo con la idea principal de lo que quería pero pues, ya están advertidosss.
Cualquier error lo corrijo otro día.

Uno, dos, uno dos.

A ese ritmo iba el corazón de Jongin cuando Sehun le respondió:

—Puedes hacerlo.

En el club de voley ya habían notado la ausencia de Oh. Quedaban Minho, Seungcheol, Baekhyun, Chanyeol y Kyungsoo, este último sentado en las escaleras de la entrada del gimnasio donde practicaban, con el celular en la mano como si esperara algo.

La temperatura estaba intensa aquel día. Afuera del gimnasio —el cual estaba con suerte fresco—, se extendía una molesta onda de calor con el sol brillando. El cielo estaba totalmente despejado y apenas se diferenciaban algunas voces de otros estudiantes, que se iban marchando, a lo lejos.

—Sehun ya se tardó demasiado ¿no creen? —dijo Baekhyun, asomándose en la entrada, colocando los pies al lado de Do—. Le dije que fuera a llevar las cosas hace rato...

El resto volteó a verle. Chanyeol iba poniéndose su mochila a punto de salir.

—Estará haciendo el vago —soltó Kyungsoo apenas notó lo que iba a hacer. Se fijó en Chanyeol cuando ya estaba afuera y este le correspondió la atención.

—Mejor lo voy a buscar.

—Sabes que hoy es viernes —insistió, con sus compañeros mirándolos desde adentro del gimnasio—. Tampoco es como si Sehun te fuera a acompañar, irá a la academia como siempre —musitó, siendo tan directo que los hombros contrarios bajaron. Él volvió a su teléfono, añadiendo—: Yo lo espero, sé que andas apurado así que te puedes ir.

Chanyeol carraspeó sin disimulo, como quien quien quiere llevar contra, mas al final hizo caso. Tomó los brazos de su mochila para caminar dirección hacia la salida del colegio, cabizbajo. A los dos minutos le imitó Baekhyun y a los diez, Seungcheol y Kyungsoo eran los únicos que quedaban allí, con el gimnasio cerrado y ellos en la puerta, esperando mientras el capitán del club buscaba alguna cosa en la sala de profesores. El ambiente nadaba en aburrimiento, por lo que cuando pasaron dos minutos más, el menor se levantó y avisó, que como muy poco hacía, iría a buscar a Sehun.

El de cabello más corto guardó su celular, encogiéndose de hombros, y le respondió "si tanto insistes. Debe estar dando una vuelta por los salones". Aseguró, equivocado, más que equivocado.

En realidad estaba en el almacén de limpieza todavía.

Cuando Jongin besó la mejilla de Sehun, este se quedó quieto, sin decir nada. Cuando fue hasta los labios de Sehun, este tuvo que aguantarse una risa porque primero chocaron sus narices. Jongin era un asco besando, pero él quería que lo besara. Y por eso al encontrarse ambos pares de labios, cerró los ojos y apretó los puños contra el suelo. El moreno por su lado, tomó una de las mejillas ajenas para acariciarla como ya había hecho antes, y se dejó conquistar ante la suavidad del mayor en contraste con su áspera mano. Siguieron los besos, separándose y volviendo a encontrarse atontados, aunque antes el castaño pensó que Jongin no era tan buena persona como pensaba y él mismo era peor de lo que creía. Puesto si se besaban de esa forma aun a sabiendas de que tenía novio, estaban haciendo todo mal.