Un encuentro -no tan- cliché

Día 27

Taehyung se compró una pelotita anti-estres para cuando se encontrara nuevamente en una situación como la de ayer. No volvería a recaer, él no volvería a tocar a SeokJin aunque sus sentidos animales le dijeran todo lo contrario.

Al sentarse, tomó su móvil de su bolsillo y comenzó a jugar Candy Crush, sí demasiado ridículo y empalagoso pero era su pequeña obsesión. Estaba apunto de pasar de nivel cuando unos delgados brazos arropados le rodearon desde el lateral. Él guardo su móvil y sacó su pelotita anti-estres.

—Sé que n-no soy nadie, sólo el chico del bus pero... ¿Porque me dejaste sólo por casi dos meses TaeTae?.

Ah, cómo explicarlo. Su pelotita casi revienta de la presión que el ejercía. ¿¡Porque tenía que ser tan putamente adorable!?.

—E-es complicado... Digamos que estaba sintiendo cosas que no quería sentir...

—Pero si son cosas que te hacen mal sólo alejate. —El abrazo se intensificó sobre su cintura, él no sabía como contenerse.

—Simplemente no se puede, son cosas especiales.

—No quiero que TaeTae se aleje mas de mí.

Las lágrimas comenzaron a mojar su camisa. A la mierda la pelotita anti-estres.

Le acarició los suaves mechones lisos al pelinegro, escuchando sus sollozos disminuir.

—Jamás lo aré Jin.