Especial San Valentín

30 Días de Matrimonio - Daniela Galvis

La siguiente escena pertenece a "30 días de matrimonio" de danielacgalvis. Si te interesa saber más de esta maravillosa obra, pasá por su perfil.

—Bueno, hemos llegado a casa, dijo John ayudándome con mis cosas y luego a bajar cargada en sus brazos, me subió hasta mi habitación, Peggy estaba en la cama y saltaba de emoción, al verme, —¡Hola pequeñín!, ¿me extrañaste?, ya estoy aquí , dije tomándolo por sus patitas, —Susan.... dijo John con la voz entrecortada, anoche.., anoche fue la peor experiencia que he vivido, el verte así, me destrozo el corazón, no sabes lo desesperado, que estaba por ti, miles de pensamientos pasaban por mi cabeza, no quería perderte, no me puedo imaginar un mundo sin ti, sin que estés en él, — John, está bien, yo ya estoy mejor, no te preocupes, —No, no está bien, yo tengo la culpa, de todo, si no te hubiera dejado sola, esto no hubiera pasado, —Tenías que irte, era tu trabajo, dije sosteniendo su mano, —¡A la mierda el trabajo!, no me interesa..., Cada día, cada instante mientras estaba en Chicago, pensaba en ti, en reunirme de nuevo contigo, te dejo sola dos días y casi te pierdo, no volveré a cometer esa estupidez, de nuevo, —John, era imposible saber lo que iba a suceder, tú no tienes la culpa de esto..., — Solo quiero saber.., ¿porque carajos no me hiciste caso de no intervenir?, te dije que Taylor era peligroso, yo no quería ponerte en riesgo y tu decidiste hacerlo, — En ese momento solo pensé.. en Ana y su hijo, necesitaban ayuda, y yo era la única que estaba cerca para socorrerlos, no te molestes. — Acaso no ¿pensaste en mí?, que sucedería si te perdía, en tus padres o si quiera ¿En Jean? Te arriesgas de esa manera, sin pensar en nada Susan, no sabes la horrible sensación, que es.

John lucía devastado, sin duda había sido una mala noche para él, yo no quiera que él se sintiera mal, ni mucho menos culpable por lo ocurrido con Taylor, era imposible que un nudo en mi garganta no se creara en ese momento, por la tensión de la discusión, no aguante más y termine llorando en su regazo, —Yo..., dije con las palabras entrecortadas, Yo te extrañaba, me hacías mucha falta, me he acostumbrado a tu compañía, John , no quiero volver a quedarme sola. El me tomo entre sus brazos y me dio un fuerte abrazo, frotando su barbilla en mi cabeza, —Jamás te volveré a dejar sola, Susan, estaré siempre a tu lado, sin importar que pase, ¿podía yo amar más a este hombre en el mundo?, lo amaba, realmente lo amaba y el a mí, estar a su lado era mi conforte, mi paz, mi felicidad, todo lo que yo siempre había querido.