Los hombres de verdad no lloran.

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Por fin llegaron al apartamento. Pasaron por casa de los padres de SunHee para cargar unas cajas con libros y un par de estanterías desmontadas.

—Será mejor que empezemos a subir cosas, luego ya os haré un unboxing del piso, aún que tampoco es la gran cosa.

YooRa no parecía estar tan triste; claro que las bromas y comentarios de los otros dos también ayudaron a que el viaje no se hiciera incómodo.

Empezaron a sacar cajas del maletero, hasta que vieron a uno de los vecinos bajar por las escaleras al parking comunitario.

—¡SunHee!— Saludó un chico. ChanYeol no pudo creerse quien era. —¿ChanYeol?

—¿KyungSoo?

—¿Hos conoceis?— Preguntó SunHee. YooRa estaba observando la escena disimuladamente  fingiendo que estaba descargando cajas.

—Es un amigo... ¿Vosotros os conoceis?—Preguntó KyungSoo a la chica.

—Es el hermano de mi novia.— Tiró del brazo de YooRa para que se incorporara.

—Un gusto.— Saludó YooRa. —¿Sois... seremos... somos vecinos?— Aún no se acostumbraba a esto de que se estaba mudando.

—Sí. La familia de Kyunggie vive en frente de nuestra puerta.— SunHee sonrió.

—Te he dicho que no me llames Kyunggie.— Dijo en voz baja KyungSoo, pero todos le escucharos y se echaron a reir.

—¿Que haces aquí Kyunggie?

—¡SunHee!— Protestó el chico. Lo que causó la risa de los dos hermanos. —He venido a buscar las llaves del coche de mi padre, se las ha vuelto a dejar puestas.— Rodó los ojos mientras se dirigía al auto y quitaba las llaves del paño. —¿Os ayudo con algo?

—¿Puedes ayudarme con los libros de SunHee?— Preguntó ChanYeol, quien estaba intentando levantar la caja que los contenía. Al parecer SunHee o tenía diez copias de la biblia o realmente le gustaba leer.

—Claro.— Kyung corrió a ayudarle y cojió la caja por el lado contrario al que estaba su amigo.

Entonces ChanYeol lo recordó. Ahora Soo era el novio de JongIn... No habían hablado muhco, pero sabía bastante de el pequeño como para preguntarse como dos personas tan distintas acabaron juntas.

Dicen que los opuestos se atraen.— Pensó. Baek y él tampoco eran parecidos al fin y al cabo.






—¡Ya esta! Creo que no nos hemos dejado nada.— Dijo SunHee con energía. ¿Quién lo lo haría? Han sido ChanYeol y KyungSoo los que han subido todo el peso. Ambos estaban tirados en el suelo.

—Quizá haberme quedado en casa no era tan mala idea.— Dijo ChanYeol entre bufidos.

—Quizá ser buena persona por una vez no ha sido tan buena idea.—Suspiró KyungSoo.

—¡No os quejeis tanto! Voy a preparar limonada.— Dijo SunHee. YooRa se fue a la que la chica le había indicado que sería su habitación. Al principio prefería no compartir cama con su novia y tener su espacio de privacidad.

Los dos chicos se quedaron en el salón.

—ChanYeol...— Empezó KyungSoo incorporandose y quedando sentado con las piernas cruzadas frente al nombrado. —Baek... ¿Te ha contado algo?

Papá, mamá, soy gay (sin corregir)Where stories live. Discover now