9.-Detención

38.2K 2.1K 800
                                    

-¿Qué haces tú aquí?-le digo con el ceño fruncido.

-He pensado venir a hacerte compañia, rubia-dice con su sonrisa arrogante mientras coloca sus pies encima de la mesa y los brazos en su nuca.

-Genial...-murmuro.

-Oye, ¿estás bien?-me mira fíjamente y frunce el ceño.

-Estando a tu lado...-ruedo los ojos y hago una mueca.

-No. Lo digo enserio. Tus ojos están un poco rojos...

Inmediatamente cierro los ojos y volteo la cabeza a la derecha.

-Estoy perfectamente-digo sin mirarle.

-¿Segura? Parece como si hubieras llorado...

-He dicho que estoy perfectamente-le miro fíjamente. Él asiente no muy convencido pero no dice nada, solo me queda mirando fíjamente.

(.../...)

-Oye-me llama haciendo que fije mis ojos en él-¿Me vas a decir por qué llorabas?

Supiro. ¿Este chico no se cansa?

-No he llorado.

-Y yo soy virgen-dice sarcásticamente y yo niego mientras ruedo los ojos-No, en serio. ¿Por qué llorabas?-me pregunta un poco... ¿preocupado?

-No es de tu incumbencia.

-¡Así que sí que has llorado!-me señala con su dedo.

Suspiro y cuando abre la boca para seguir diciendo algo. ¡Habla la voz de la salvación!

-Ya ha pasado una hora, ya podeís iros-nos dice el profesor sin despegar sus ojos del libro.

Rápidamente cogo mi mochilla, me levanto de la silla y corro hasta el campo de fútbol, tengo entrenamiento y llego 10 minutos tarde.

-Hola Sel-me saluda Emily con una sonrisa una vez que estoy en el campo de fútbol con la ropa de deporte.

-Hola Em-le sonrío-¿Aún no ha llegado el entrenador?-digo mirando a todos lados.

-No, tranquila casi siempre llega tarde-hace un ademán para quitarle importancia.

-Menos mal...

Unos 5 minutos más tarde llega el entrenador y empezamos a entrenar. Corremos más de 20 minutos, luego nos estiramos, hacemos unos ejercicios de pases, contraataques, tiros...

Cuando terminamos el entrenamiento Lauren me lleva a casa, aunque no tengo muchas ganas de ir la verdad... He discutido con Chace y sé que tendré que hablar del tema con él y por otro lado, espero que Jason no empiece a preguntarme de por qué he llorado...

-Gracias por traerme, nos vemos mañana-le sonrío y le doy un beso en la mejilla.

-Hasta mañana-me sonríe.

Cojo aire antes de entrar a casa. Nada más abrir la puerta me encuentro con Los 4 Fantásticos tumbados en el sofá viendo la tele, en cuanto me ven Justin y Mark me sonríen y me saludan con la mano, Jason me mira con una expresión que no llego a descifrar y Chace se levanta rápidamente del sofá y se acerca a mí con la mirada triste y de arrepentimiento.

-Sel... tenemos que hablar-dice suavemente pasando su mano por la nuca.

Suspiro.

-Ahora no Chace. Estoy cansada-empiezo a dirigirme a las escaleras para irme a mi habitación.

-¡Sel por favor!-alza un poco la voz para que pueda escucharle, pero no le hago caso y empiezo a subir las escaleras.

Los chicos miran nuestra escena con cara de ¿de qué nos hemos perdido? Yo solo niego y les regalo un pequeña sonrísa para que no se preocupen.

¡Viviendo con 4 Mujeriegos!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora