La Renegada Del Amor♡

¿Lo intentamos?

Se acerca a mi jadeando y yo miro algo extrañada.

-Te estaba-tomo aire-buscando.

-¿Por?

-Quiero hablar contigo.

-Está bien...supongo.

-No me recuerdas¿Cierto?

-¿Recordarte? Pero si apenas nos conocemos hace unos cuantos minutos.

-No, tu y yo nos conocemos hace rato, solo que perdimos contacto.

-No recuerdo pero si tu lo dices creo que...

Miro hacia el frente e inmediatamente hago una mueca de desagrado, David mira hacia el mismo lugar que yo pero puedo deducir claramente que no sabe que estoy mirando precisamente.

Nos adelantamos unos cuantos pasos más y llegamos a donde están Geraldo y sus amigos, se que voy a ser chismosa pero quiero escuchar ese chico nunca me dio buena espina y más aún presto atención cuando escucho el nombre de Yami en la conversación.

Uno de ellos le pregunta:

-¿Si es verdad que estás saliendo con la pequeña de decimo? La nueva ella.

-La gente dice que los han visto juntos-habla otro-

-Chicos, chicos porfavor ¿Ustedes en realidad creen que nuestro querido Geral saldría con alguien como ELLA? Dañaría su reputación.

-¿O no Geral?

Se quedo callado.

-¿Geraldo?-repitio uno de ellos-

-No, no la conozco.

Autch.

-Solo mirenme¿Como podría yo, salir con alguien como...

-¿Yo?

Yami estaba parada enfrente de todos ellos mirandolo con los ojos llorosos, por un momento vi algo de culpabilidad en su rostro que luego se transformo en decepción.

Ella se fue corriendo.

Yo no aguante más y salí de aquel pequeño lugar de donde estabamos escuchando, David me hablo pero le ignore.

-¿Cuál es tu problema?

Todos me miraron.

-Esa chica te quiere muchisimo y lo unico que hiciste fue lastimarla, eres un gran pedazo de...de...bueno no se me ocurre nada pero fuiste muy malo.

Giro mi cabeza buscandola con la nirada y no la veo por ningun lado.

-David, quedate porfa voy por yami.

El asíente y yo voy en su encuentro, cuando paso por los baños de mujeres escucho unos sollozos y me acerco esperando que sea ella.

Y...si es ella. Esta tirada en el piso de un baño con su maleto entre sus piernas sosteniendo su cara entre sus manos mientras llora desconsoladamente.

-Yami...

-¡Dejame!

Ignoro su comentario y me agacho abrazandola.

-Tranquila, toma aire.

Se voltea y me mira con su pequeña nariz roja y sus ojos aún peor.

-No-o, no sé porque me negó.

-Por pendejo.

Suelta una pequeña rísa y llora de nuevo.

-Mira aunque sea no le diste lo que quería puedes estar orgullosa de ello.