La Renegada Del Amor♡

Peleas

-Calmate yami.

-Es un idiota-liz-

-No te merece-eli-

-Las empanadas nunca te abandonaran.

Todas miramos a cami.

-Que te pasa, ¿no ves que esta mal?

-Por eso las empanadas siempre estarán con ella.

-No le hagas caso, cami tiene hambre.

Rio un poco.

Después de que yami nos llamara a todas, nos encontrabamos en la casa de aleja comiendo golosinas, mientras escuchabamos musica triste de fondo pues yami no paraba de llorar. Y lo peor era que no sabiamos el porque. Solo nos llamo diciendo que era un idiota y pues a todas se nos parte el corazón el verla así.

Se seco las lagrimas con el interior de su sueter y nos miro con sus grandes ojos café claro, que ahora estaban enrojecidos.

-Es un idiota.

-Es un idiota-dijimos todas-

-Pero ¿que paso?

-Tomo aire-estabamos en su casa, y yo le dije que quería ir al cine o salir-sollozo un poco- pero se enojo conmigo cuando le dije que no quería... ya saben-nos miro a todas.

Entendimos inmediatamente o bueno...

-Ya sabemos que?-dijo eli-

Todas rodamos los ojos.

Liz se acerco a eli y le susurro lo que necesitaba entender.

Debieron ver su cara.

-¿Te sientes mal por no acerlo con el?-dijo liz-

-No me siento preparada, aveces me siento hasta un poco incomoda.

-Yami-me miro-escuchame bien, cuando un chico quiere que hagas algo que tu no quieres o con lo que tu te sientes incomoda, ese chico en realidad no te aprecia, solo se quiere a si mismo y a su deseo egoísta. No te quiere a ti.

Se paro rápidamente.

-Para ti es muy fácil decirlo¿No?

Todas me miraron.

-¿De que hablas?

-Por favor Abigail, tienes un novio perfecto, y están viviendo su amor perfecto. O... crees que no nos damos cuenta? A todas nos lo restriegas en la cara y lo mismo pasa con camila.

-Espera un momento yo no hago eso, incluso son pocas las ocasiones en las que hablamos de Elliot.

-Y, ustedes casi nunca ven a camilo¿Entonces de que se quejan?-dijo cami-

-Calmense-intervino eli-

-Deja que hablen luego se calmaran-hablo liz-

-Si te dije eso-tome aire-no fue para que te ofendieras sino para que lo tomaras como un consejo-trate de tocarle el hombro pero se alejo-

-Tu lo dices muy fácilmente porque no tienes problemas con él.

Iba a hablar pero la voz de cami hizo que me detuviera.

-¿Sabes? Deberías agradecer tener una amiga como abi, pues te da consejos estando bien, y incluso si estuviera mal aún asi trataria de darte consejo.

-No pues, ahora soy la recogida que tiene que agraderles, porque le dan un poquito de amor.

Todas hicimos una O con nuestras bocas y nos miramos.