Gracias

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La vida le había enseñado ser frío con todos, sin embargo, era justo. Era el emperador más temido de los tiempos, participaba en las guerras con sed de sangre. Isabel, su hermana, intentaba siempre hacerlo sonreír, pero era inútil. Desde que su padre había sido asesinado frente a sus ojos cuando tan solo tenía cinco años todo cambio. A pesar de ser heredero al trono, fue traicionado por sus nobles, pero sobrevivió, por lo que no confiaba en nadie.

-Levi...¿por qué no vamos a tomar aire ?
-Isabel tengo muchas cosas que hacer -El azabache se encontraba arreglándose la camisa.- no tengo tiempo
-¿Ir donde tus prostitutas es más importante? -La pelirroja lo observaba algo molesta, hace tiempo que Levi había comenzado a acostarse con mujeres esclavas del palacio.-
-Me quita el estrés - Fue lo ultimo que dijo antes de ir a su habitación adornado de pinturas hermosas y muchos libros, habían muchas mujeres que estaban a merced del azabache, pero por alguna razón las ganas que tenía de tener sexo se habían ido con tan solo entrar al lugar. Les pidió a todas las mujeres que se retiraran y regresó a su trono, puso una mano en su frente para poder tranquilizar la ansiedad que sentía, pero unos guardias llegaron con una mujer peli naranja amarrada.
-Señor! Esta estupida ha matado a uno de los nuestros!

El azabache miro con curiosidad a la muchacha que tenía en frente quien lo observaba con sus ojos llenos de ira. Por alguna razón un escalofrío recorrió su espalda e hizo que se la llevaran a su cuarto amarrada.
-Si piensas que voy a dejar que pongas las manos encima de mí estas equivocado! Tú no eres mi rey -La muchacha hablaba molesta e intentaba quitarse las cuerdas.- Eres tan cobarde que no eres capaz de soltarme
-¿De verdad crees que soy un cobarde? -Levi se acercó a ella sin su camisa para luego desatarla y tomarla del cuello fuertemente para luego mirarla a los ojos.- No tienes idea de lo que puedo hacer contigo
-No te atreverás ! -la muchacha en un rápido movimiento sacó el cuchillo del bolsillo de Levi y se lo puso cerca del cuello.- suéltame y quizás piense en dejarte con vida...
-Al parecer no tengo opción....-Sin importar si el cuchillo lo dañaba la beso desesperadamente. La muchacha se sorprendió, le hizo una pequeña herida en el pecho pero eso no lo detuvo, al parecer lo excitaba más y la pelo naranja se sentía un poco excitada ante esto. Lo atrajo más a ella rasguñando su espalda sacando unos gemidos al rey. Levi rápidamente rompió su ropa para luego morder suavemente uno de sus pechos, aunque Petra ponía algo de resistencia lo disfrutaba. Una vez que estaban desnudos en un solo movimiento el rey penetro a la chica haciendo que su cuerpo se encorvara un poco al recibirlo dentro. Comenzó a moverse rápidamente mordiendo el cuello de la mujer, Petra no se quedaba atrás gimiendo y tirando de la cabellera de Levi. Esto era nuevo para ella, nunca antes había tenido sexo tan salvaje con alguien e incluso estaba manchada por la sangre que le había hecho al azabache con el cuchillo y eso hacía que todo fuera más exquisito.
Cuando todo acabó Petra había quedado sobre el rey observándolo con la respiración agitada y tomando nuevamente en sus manos el cuchillo.
-Termina con esto mujer...
-¿Por que quieres que te mate? -la peli naranja lo observo curiosa.-
-No quiero que me mates, pero dudo que algo te haga cambiar de opinión ¿o si?

La muchacha lo quedo mirando para luego sentarse a su lado y dejar el cuchillo en la mesa de noche. Miro por la ventana y la luna se veía hermosa, recordaba cómo su padre la cuidaba, desde que había muerto toda su vida se había ido a la mierda e intentaba gastar su energía robando, matando, etc. Pero en este momento sentía que era el lugar donde debía estar.
-¿Crees que la vida mejore para nosotros?-preguntó la chica dirigiendo su mirada al azabache, quien se encontraba mirando el techo.-
-Mucha gente me ha preguntado lo mismo, pero no todo tiene respuesta...
-Quiero irme lejos....
-Yo también mocosa...
Por primera vez en años ambos sonreían mientras se miraban. Iluminados por la luz de la luna, Petra observó la herida de Levi y comenzó a curarlo. El azabache quedo sorprendido y pasó su mano lentamente por uno de los mechones de la chica.
-Gracias....
-Gracias a ti

Rivetra ( tú y yo )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora