Capitulo 8

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Que lindo es soñar son una relación que dure años, imaginar el hogar que formaras con aquella persona, los hijos que tendrán en algún futuro, el miedo de las discusiones que se aproximen y la felicidad que generan los hermosos recuerdos juntos, si eso se siente al enamorarse no me puedo ni imaginar los sentimientos que surgen de una pareja a punto de ir al altar, claro eso para mí se termino; el motor rugía en señal de protesta, no parecía percatarme de lo que sucedía a mi alrededor, lo único en lo que podía pensar en ese momento era en aquella adrenalina y enojo que recorría mi cuerpo entero.
Aparque el lujoso Ferrari en el hotel donde nos encontrábamos, para después con paso forzado subir las escaleras de la entrada y así dirigirme a la recepción, podía sentir un agudo dolor de cabeza y mis mejillas arder, al entrar al lobby todos los presentes voltearon a verme, empecé a escuchar los flash provenientes de las cámaras e incluso gritos de sorpresa y alago pidiéndome que firmará uno que otro autógrafo, pero por primera vez en mi vida eso no me importó, mi única meta en ese momento era llegar a la recepción, así que comencé a esquivar a la poca gente que me rodeaba.

-¿Qué desea señor?-preguntó aquella recepcionista que nos atendió a la llegada, mientras mantenía su mirada completamente atenta en su computadora

-Quiero cancelar una reservación a nombre de McQueen-al instante ella volteo su mirada hacia mí, pareció notar algo en mi mirada que hizo que se apresurara-Listo señor, su cuenta está pagada necesito que firme aquí y podrá retirarse
Firme, tome el papel y después me dirigí a la salida con la cabeza completamente en alto y la vena de mi cráneo cada vez más y más hinchada, mientras bajaba los escalones le hice una seña al valet parking que estaba parado enfrente de mi auto para que se retirara, y este inmediatamente se retiro, rodee el auto y subí a este, la cabeza me dolía horrores, pise el acelerador saliendo de aquel grandioso hotel Francés, donde de seguro Sally llegaría a media noche tal vez con otro...
Pise aún más el acelerador a un rumbo indefinido, de verdad que agradecí el hecho de que no hubiera una patrulla cerca o muchos autos circulando, el reloj había marcado las doce y yo seguía dándole vueltas a Francia solo que ahora procure ir más despacio, hasta que el sueño empezó a vencerme , el dolor de cabeza se había ido y el enrojecimiento también, a lo lejos pude notar las letras de un hotel, el paisaje comenzó a cambiar, las casas parecían aún más lujosas y autos de ultimo modelo, al parecer donde me encontraba era la zona más rica Francesa.
A pesar de que parecía estar hospedado en uno de los mejores hoteles de París no era nada comparado con el que estaba viendo justo ahora, era realmente lujoso y elegante, no lo pensé dos veces, dirigí el auto hacia el aparcamiento y baje de el, un valet parking se acercó inmediatamente a mi y fue a quien le entregue las llaves, para después comenzar a subir las escaleras a un paso veloz.
Detrás de esas enormes puertas giratorias podía ver el enorme lobby blanco y sus sillones negros como conjunto, con un piano al fondo y sus luces bajas, parecía un lugar realmente confortable, entre al lobby para después dirigirme a la recepción, en esos instantes supe porque París era llamado la ciudad de la moda.

-Bonsoir Monsieur, ce qui est offert?-dijo en perfecto Francés la recepcionista, pero al ver mi rostro confuso lo repitió ahora en inglés-buenas noches caballero, ¿Qué se le ofrece?

-¿Quiero una habitación?

-Claro en seguida-mencionó para después comenzar a teclear en su computadora la única que tenemos disponible es la suite Colosio, la cual tiene un precio de 900 dólares por noche

-Esta bien- la chica me entregó las llaves y pidió que me llevaran a ella.

La habitación definitivamente valia su precio era enorme, los sillones eran blancos y aterciopelados, la cama era un lujo, la televisión una pantalla de 80 pulgadas y la sala no tenia comparación, ordene tres botellas de la bebida más fuerte que tuvieran a la habitación, me senté al borde de la cama y encendí la televisión, cambiando los canales sin elegir uno en específico, mi suéter azul había caído a un lado de la cama, tome otro sorbo de la botella y un canal de chismes apareció, la programación estaba en inglés, así que podía entender perfectamente que sucedía.

-Bien Alessia tú en verdad siempre nos traes información interesante, siempre creí que su belleza era natural, me sorprendió demasiado viniendo de Craig, aunque solo hayan sido los labios, espero, ¿Qué más nos tienes Alessia?

-Bueno Barnabé, recuerdas a nuestro querido competidor Americano, McQueen

-Si, claro

-Bueno tenemos rumores de que su novia Sally lo engaña con el famoso empresario Dylan, dueño de seis grandes empresas américanas de deporte y automovilísticas, entre ellas las famosas empresas "Destiny"

-Nada tonta la muchacha no-empezaron a reír antes de anunciar lo siguiente-en un momento el nuevo ridiculo de Miley Cirus

Tome otro sorbo de la botella y le cambie a un extraño canal sobre piratas, no podía creer que todo el mundo supiera incluso el nombre del amante menos yo, todas aquellas promesas, besos y caricias, no había más de ello, todo se había acabado, pero ¿Porque no dolía como decían en las películas?, creo que esa era la razón por la que tomaba, lo único que podía sentir en ese momento era tradición, no aquel dolor punzante del que tanto hablaban al contrario, creí que algo andaba mal en mi debido a eso pero tal vez yo fui el primero en acabar con esto y así se quedará, Sally parece nunca haberme importado y no lo hará nunca más.

THE LOVE RACE Where stories live. Discover now