El sol quemaba mi piel mientras en el océano las olas sonaban una tras otra sin parar, la gente entraba y salía del agua, otros tomaban sol o simplemente bebían un jugo tropical, esto era todo lo que necesitaba desde hace mucho. Saque mi celular para tomarme fotos y subirlas a instagram. Revise el inicio y salió una foto que hizo que latiera mi corazón tan fuerte que podía explotar enseguida, su cuerpo hacia que me diera tres infartos vaginales y ese sexy traje de baño le quedaba tan bien, noté que tenía la ubicación en su foto y vaya que no me lo esperé, ¿Que hacía ella aquí? O ¿Yo que hacía en el mismo lugar que ella? Maldecí, no podía estar en el mismo lugar que ella. Subí la cabeza buscándola, era tan estúpido hacer eso habiendo tantas personas en este lugar, noté que Justin escribía con cara de asco, susto y odio a la vez ¿Cómo alguien podía reflejar tantos sentimientos?; Mire al océano y la vi, no había una palabra para describir lo hermosa y perfecta que se veía. Necesitaba verla sin razón alguna, necesitaba tocarla, besarla y hacerla mía una vez más, necesitaba tenerla en mis brazos, necesitaba su sonrisa, necesitaba escucharla, la necesitaba a ella, a Camila Cabello. No había mujer alguna que me hacía sentir tan bien como ella lo hacía. No, no, Lauren ¿Que estás pensando? Tienes novia no pienses en eso. Mire a Justin concentrado en su celular le dije que volvería, que iría por unas bebidas, Lo cual no era cierto, simplemente no podía dejar todo así estando tan seca de mí.
Caminé a donde ella se encontraba con pasos lentos para que no notara que la "espiaba" pero todo mi esfuerzo fue en vano cuando me caí sobre un chico, llame la atención de todos, sobre todo la de ella, y vi su cara, efectivamente estaba sorprendida, no podía apartar mi mirada de sus ojos color café o simplemente no quería, esos ojos eran como mi droga, como si fumara la mejor marihuana.
— ¿Estas ciega, idiota? —. Vi como el chico estaba tirado en la arena por mi culpa.
— ¿Qué? Lo...Lo siento no te vi.
— Claro, lo note. — Me fulminó con la mirada, y se levantó de aquella arena húmeda.
Sentí vergüenza por ser tan torpe, subí mi cabeza para mirar a Camila pero ella ya no estaba, se perdió una vez más; Sentí unas manos ya reconocidas, me hicieron sentir con menos vergüenza. Justin me hizo recordar a Lucy. Y sobre eso, Lucy y yo antes éramos buenas amigas, desde la muerte de mi madre todo cambió.
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—Lauren quiero que seas feliz...- Dijo secando mis lágrimas.
— ¿Pero cómo lo seré sabiendo que la chica que amo no me quiere ver ni en pintura?
—Lucy es una buena chica.
—Lucy es mi mejor amiga.
—Prométeme algo hija.- Mi madre me miro con mucha tristeza, sabía que lo que venía sería difícil de prometer.- Prométeme que serás feliz sin Camila.-Y lo fue ¿Cómo quería que fuera feliz sin ella sabiendo que mi felicidad era ella? ¿Cómo pretendía que mi vida sería mejor olvidándola? Esa chica me hace sentir como nadie lo hace ni lo han hecho.
—Mamá, no me hagas prometerte eso, por favor.
—Es por tu bien Lauren...Esa chica ya no te quiere, debes hacer lo mismo.
—No se puede olvidar a una persona tan fácilmente, mamá.- Aun tenía la esperanza de volver con Camila.
— ¿Cómo estás segura que ella alguna vez te quiso?
—No estoy segura, simplemente lo sé.
—A veces las personas demuestran sentimientos "reales". Eso siempre funciona.
— Mamá se que ella no te agradó nunca.
—Hija, sólo...Por favor.- Vi a mi madre en aquella cama enferma, sabía que no le quedaba mucho tiempo, cada día la veía peor, más enferma, más rota, con más tristeza que el día anterior, no me quedaba de otra que hacerlo, quería cumplirle todo sus deseos, aunque yo no fuera feliz, es sólo un amor cualquiera comparado con la felicidad de mi madre antes de partir, el amor de parejas pasa con el tiempo y una persona reemplaza a la otra ¿No? No es primera vez que lo hago, he superado a todas mis exs, supongo que con Camila será igual; El celular sonó, inmediatamente supe de quién era la notificación. Encendí la pantalla y apareció su mensaje, "¿A qué juegas Jauregui?" — Camila.
—Te lo prometo...-Vi a mi madre, y una sonrisa de orgullo apareció en su rostro. << Lauren hiciste lo correcto. >>
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Fuimos al hospital para hacerle una vez más la quimioterapia a mi madre debido al cáncer, ese día fue algo pesado, mi estómago tenía en nudo sin razón alguna, y tenía un mal presentimiento. Mi padre no nos acompañó por razones del trabajo ¿Cómo le importaba más el trabajo que la vida de su esposa? eso era algo absurdo; Habían pasado horas y mi madre no salía por aquella puerta, comencé a preocuparme, le pregunté a Chris y Taylor si no tenían información de mamá lo cual negaron, en ese momento escuche al doctor decir <<Lo siento>>
— ¿Que?
— La perdimos.
El nudo de mi estómago subió a la garganta. El doctor se retiró de la sala de espera con la cabeza agachada, escuché el llanto de Taylor e inmediatamente supe que Chris la abrazaba, mis lágrimas salieron sin parar.
Las personas nacen para morir, y de un momento a otro cuando más las necesitas se van sin razón, dejando a un lado sus sueños, sus promesas, y sus cuerpos. Lo único que queda es el recuerdo ya sea el más feliz o el más triste, los detalles, las pequeñas cosas que no parecían impartes, son las que más te joden, sin poder regresar el tiempo para revivirlos una vez, y otra, y otra vez más; Mi madre se fue, nos dejó solos ¿Cómo será ahora en adelante? ¿Qué pasara con nosotros? ¿La volveremos a ver? Tantas preguntas y pocas respuestas. En un segundo pasaron cada recuerdo con ella, en un segundo pasaron tantas lágrimas por mi rostro, en un segundo Taylor y Chris negaban demasiadas veces sin parar la marcha de mi madre, en un segundo más de veinte personas nos miraron con lastima, en un segundo ella,mi madre se fue, en un segundo murió.
