Capitulo 6: " Tres Veces"

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Era complejo de mencionar, mas ahora en la situación en la que me veía envuelto. Yo Emil Lawrrence, terapeuta desde hace ya un tiempo, estaba sentado en un cómodo sofá frente a dos hermosas mujeres, pero malas desde cierto punto de vista y que me interrogaban cual si fueran detectives. 

- Emil- dijo una de ellas pasándome una taza de té- se que lo ha pasado mal, pero tengo cierta curiosidad por preguntar como fue capaz de confundir las mesas- sonrió sentándose tras un escritorio. 

-Sabe, señorita...

-Mi nombre es Solange- respondió mientras Monik me observaba  de pie junto a Solange- cuando una tiene la certeza de que lo mataran, es algo completamente normal confundir las cosas...ya sabe sentir nerviosismo ¿no le parece?

- Por su tono sarcástico supongo que este lió no fue nada gracioso- dijo riendo- Cálmese Emil, las cosas se colocaran peor desde este punto, sobre todo ahora que asesinaron a una agente federal. 

- ¿Agente federal?- repetí asustado- ¿como que matamos a una agente federal? ¡¿Están locas!?-grite colocándome de pie- ¿Por que lo han hecho? ¿Que es todo esto? 

- Bájale al tono cabrón-  interrumpió enfada Monik- primero que nada tu eres el idiota que cometió el error y segundo, si fuera por nosotras  tu no estarías sentado ahí, sería nuestra amiga Eva, así que siéntate y escucha con atención lo que te diremos...Necesitamos que nos entregues el sobre.

- ¿El sobre?- reí irónico- ¿Ustedes quieren el sobre?...pues antes de que les de el maldito sobre me dirán que  ¡diablos es todo esto! ¡Estoy cansado de tanta mierda y todo por culpa de una scort!

Si, debo admitir que perdí el control, es mas temo que me exalte de tal manera que fue necesario lo que ocurrió en aquel instante. Solange se levanto repentinamente y sin dudarlo se aproximo  hasta mi, donde me  golpeo con tal fuerza que caí inconsciente al suelo.  No tengo noción de cuanto tiempo paso, no recuerdo exactamente si hubieron palabras mientras caía o si hubieran palabras después, lo único que se es que cuando desperté las escuche discutir por una llave, que al parecer había guardado celosamente entre mis pertenencias. Creo que presentía algo con respecto a lo que esa llave mantenía cerrado. 

- Sin la llave no tenemos nada- dijo al borde de las lagrimas Monik- si Eva nos jugo una mala pasada, entonces estamos en medio de la mierda ahora...

- Eva no se sería capaz de hacernos algo así, mucho menos ahora que todo lo que tenemos en juego se puede perder- suspiro Solange, mientras yo intentaba colocarme de pie- si es cierto que Eva pudo guardar la llave en otro lado, como podremos encontrarla si la única pista que teníamos era Emil. 

-¿Emil?-   Monik saco un cigarrillo negando con la cabeza- él es solo un pobre sujeto que no tiene idea de donde diablos esta parado...¿que quieres que te diga? Eva escogió mal a su mensajero... 

- Yo no soy un mensajero de nadie- dije interrumpiendo- y si quieren ver la llave nuevamente, tendrán que contarme que esta pasando aquí ¿me han entendido? 

Ambas se miraron sorprendidas, como intentado retomar el control de la situación, ya que una vez que mencione la llave Monik tomo asiento y solo se digno a observarme desde el sofá. 

- No se cuanto tiempo nos queda para charlar- dijo seriamente Solange- pero esto tomara tiempo, asi que te pido que se sientes y escuches sin interrumpir, porque lo que viene ahora sera el comienzo del fin para lo que conoces, Emil- Inspiro hondamente- Esta historia solo ha sido contada tres veces y solo tres veces ha sido replica en tres personas, donde  lamentablemente una de las protagonistas ya no se encuentra entre nosotras. 

-¿Estas listo para oír lo que tenemos que contar?-pregunto Monik sosteniendo el cigarrillo.

-Estoy listo para oír la verdad- dije seguro.

- Jamas estamos listos para oír la verdad, Emil- Solang tomo asiento- Porque la verdad duele.

El legado de EvaWhere stories live. Discover now