19- Un Anthony protector.

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Jamás había visto a Anthony con un aspecto tan cansado y descuidado, siempre había pensado que era un tipo con aspecto inalterable.

— ¿Estas bien?

— ¿Tan mal me veo?

— Un poco.

— Auch, eso duele, —hizo ademan de lastimado y sonrió, le hice un lugar a mi lado, él se acostó.

— ¿Y bien?

— Además de que Argrem entro en crisis... un escuadrón de Meikel ataco la superficie, fue un ataque que no esperábamos, nuestros guerreros estaban durmiendo... muchas bajas...

— Lo lamento...

Guardamos silencio un rato, ahora me parecía ligeramente incomodo estar con él.

— ¿Sabes por qué Argrem pretendía casarte conmigo? —Asentí.

— Taily me lo explico.

— Bien. Es bastante confuso.

— Ya lo creo.

— Axel... nos dijo algo...

— ¿Qué?

— Meikel... borro los recuerdos de Ahiry.... Sobre ti, sobre Zem, su abuela, Kaurus...

— ¿Qué? ¿Por qué?

— Creo que de esa forma pretende manipularla o enamorarla... ella sigue renuente.

— ¿Enamorarla?

— Podría ser su último recurso, un hechizo o una poción poderosa para enamorarla. Suena lógico para tener un heredero.

— Posiblemente... ella no este destinada a Meikel...

— Es una posibilidad.

— ¿Pedo ser yo? La que termine destinada a él...

— Si.

— Me niego, no podría estar con alguien así. ¡Es un monstro!

— Zem y yo no lo permitiríamos.

— ¿Cómo?

— Lo tendríamos que matar.

— Esto me está superando, no estoy acostumbrada a escuchar el término "muerte" como si se tratara de respirar. Es algo cruel y confuso, creo que era más fácil mi vida antes, odio despertar con miedo y confusión, estoy desesperada de pasar tanto tiempo en esta habitación... —Comenzaba a llorar, impotencia, miedo, desesperación. Quiero ir a casa.

— ¿Qué es lo que quieres?

— Solamente quiero ser una chica normal. Odiar levantarme temprano para llegar a clase pero disfrutar de una buena charla con mis amigas, quiero ser una chica que odia la inmadurez de los chicos y por eso descarta ir al baile de invierno a pesar de realmente desear llegar con un vestido largo y brillante. Quiero ser la típica chica lectora que ama el olor de los libros viejos y disfruta sagas juveniles tanto como un gran clásico literario. Quiero que los seres mitológicos no sean más que sueños causados por largas horas leyendo o viendo películas.

— Ese es el problema Sussan. Tú estás lejos de ser una chica normal. Eres hija del Sol y prometida de uno de los Anwar.

— ¡Es tan injusto!

— ¿No es justo eso lo que decías antes de saber la verdad?

— Ya se esa cantaleta de "cuidado con lo que deseas".

— No. Es el precio de saber la verdad. Es el precio del destino.

— Pues el destino se puede ir por la cañería.

— ¿Prefieres tu antigua vida a esta?

— No. Si. Bueno. ¡No sé!

— No es el "tipo de vida", es el "como" vives. Eso cambia las cosas.

— Lo dice el tipo convertido en una especie de maquina asesina.

— ¿Baile de invierno? —Lo hacía de nuevo, evadía las preguntas que tratan exclusivamente sobre él.

— Es algo importante. Algo que jamás pude hacer porque no tenía permiso o con quien ir.

— Si de algo sirve. Zem y yo estaríamos gustosos de acompañarte.

— Gracias. Yo estaría encantada de ir con ustedes.

— Descansa, en cuanto te duermas me iré.

Acariciaba mi cabello, asentí y me acomode, cerré los ojos; me imagine a mi llegando al baile de invierno con un hermoso vestido, con Zem y Anthony a mi lado, las miradas sorprendidas de todos. 

3-La historia que no fue contadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora