Connections «Matt Murdock»

27

Foggy entró emocionado a la oficina de Matt mientras éste apenas había llegado a sentarse.

Llevaba su celular en alto, con ansias. Tenía una sonrisa enorme en sus labios mientras se acercaba los pocos pasos que lo separaba de su amigo.

—tengo una foto de ella, de Haylee.

—¿qué clase de foto?— preguntó levantando las cejas.

—una de mi cumpleaños— dijo mirando la pantalla de su celular —, ni si quiera recuerdo que ella hubiera estado ahí, no la reconozco.

Matt presionó levemente sus labios con duda. Si Foggy tenía una foto junto a ella, lo más probable era que la conociera, pero parecía que nadie podía saber por qué.

Su amigo dejó de ver la pantalla para centrarse en él, sus cejas levemente levantadas y un extraño sentimiento en sus ojos. Matt permanecía con su cabeza hacia el frente, intentando recordar algo, algún pequeño detalle. Una caricia, un beso, una voz.

Su mente buscaba desesperadamente aquella respuesta a una luz pero todo parecía ser pura oscuridad. Una desesperación se apoderaba de su cuerpo y parecía sumergirlo en agua helada, porque esa era la realidad, el frío de estar solo y no comprenderlo.

Suspiró mientras Foggy se sentaba delante de él, podía sentir también su molestia acompañado de cansancio. Quiso hacer algún comentario, o si quiera poder sonreír, pero todo fue en vano ante su amigo.

—vamos a poder encontrarla, Matt. Es cuestión de tiempo.

—no es eso— dijo negando con la cabeza —. Ella no quiere que la encontremos, sino ya hubiera aparecido.

—quizá se alejó por la razón justa, y va a volver por aquello mismo.— bloqueó su celular y se recostó sobre la silla, estirando sus piernas.

—si fue una razón justa por la que se fue —quiso reírse, porque sabía que lo que decía podía ser verdad —, creo que era lo suficientemente buena como para no volver.

Foggy iba a responder a su amigo cuando Karen Page ingresó a la habitación haciendo sonar sus altos tacos contra el suelo. Tenía una sonrisa pintada en un rojo llamativo y sus ojos azules parecían brillar más de lo común.

—tenemos un caso.— habló con alegría.

Matt intentó dejar de pensar en Haylee para centrarse en su trabajo. Había sido una semana dura, y sabía que si continuaba así:-no podría hacer nada más que pensar en ella.

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Un mes después.

La muchacha salió del baño con su cabello recién peinado y todavía húmedo. Miró a su hermano que se encontraba sentado enfrente de la puerta y levantó las cejas.

—quería entrar al baño.— comentó mientras se levantaba del suelo y corría dentro de la habitación que ella había dejado tan solo segundos atrás.

Bajó las escaleras y descubrió a su familia sentada alrededor del televisor, todos atentos a los detalles de la noticia. Desde hace unos días atrás, había empezado una ola de asesinatos en Hell's Kitchen que dejó a todos totalmente asustados.

Ya había pasado más de un mes de que Haylee se alejó de todo, y hasta el momento no habían demasiadas noticias del allí, a excepción de algunas noticias de Daredevil. Se sentó sobre el apoyabrazos del sillón y miró con atención la noticia, donde también comentaban que este asesino había aparecido por última vez junto al diablo de Hell's Kitchen y habían acabado con un par de hombres altamente entrenados.