Connections «Matt Murdock»

4

Foggy sirvió la bebida en el pequeño vaso de vidrio que tenía ella entre sus manos. Dio una trago mientras él se servía a sí mismo con una media sonrisa.

—Haylee Hudson.— susurró su nombre, para que ambos estuvieran a mano. Foggy asintió.

—¿Entonces?— preguntó, moviendo levemente su vaso sobre la mesa en forma circular.

Haylee dejó su vaso sobre la mesa, observando sus ojos, que la miraban con atención, esperando que hablara, y esperando poder comprender sus palabras. Tenía un aspecto levemente molesto, algo había ocurrido más temprano, haciéndolo molestar, no estaba segura de lo que pudo haber sido y se sentía incómoda para indagar al respecto, pero podía notarlo bastante bien.

—Siempre, desde que era chiquita, podía ver más allá que los demás— tomó un trago más, esperando poder así quitar el nudo que se formaba en su garganta —. Podía notar detalles, resaltar acciones y reacciones. Podía captar todo, saber cuando alguien mentía, cuando alguien decía la verdad. Podía ver quienes habían pasado por los pasillos de mi casa y que era lo que hicieron.— guardó silencio unos segundos.

—¿Esa son las conexiones?— preguntó él interesado en la charla.

—Si— asintió la muchacha —. Viendo pequeños detalles de alguien, puedo sacar muchas conexiones, mucha información— Foggy asintió —. A los diecisiete años tuve un novio. Nada especial, pero yo lo sentía así. Él no comprendía algunas de mis reacciones, y empezó a dudar de lo que realmente podía ver. Un día, un grupo de personas nos agarró en la calle, sabían que yo tenía un don, pero no sabían qué era. Me obligaron a decirles, o si no iban a matar a Jason, podía ver en sus ojos la seguridad que tenían, la decisión de hacerlo— suspiró —. Tuve que decirles la verdad, que hacia conexiones.

—¿Y qué pasó?— él dio otro trago.

—Me llevaron lejos de ahí, lejos de él— carraspeó —. Querían que los ayudara con sus tráficos de armas y drogas, y durante varios meses me vi obligada a hacerlo.

—Eso es horrible.— Haylee levantó los hombros.

—Pude escapar gracias a las conexiones, me llevó bastante, pero al menos logré huir— se rascó la nuca, un poco incómoda —. Al llegar a mi casa, me dijeron que habían dado por muerto a Jason, que no había aparecido el cuerpo, pero que aún seguían buscándome. No para saber si seguía viva, sino porque todo el pueblo quería que hiciera conexiones para ellos.

—Entoces, ¿huiste?— él preguntó, pero sonó como una afirmación.

—Si, tuve que irme de la ciudad. Desde entonces, sólo estoy huyendo. Hay personas que algunas veces logran atraparme, pero siempre logro huir.

—¿Y Jason?— guardó silencio unos segundos —¿Qué fue exactamente lo que pasó con él?— Foggy apoyó los codos sobre la mesa, prestándole total y completa atención.

—Decían que se lo llevaron y lo mataron, pero jamás se supo donde dejaron el cuerpo, ni nada— ladeó la cabeza centrando su vista en el vaso —. Nunca pude saberlo con exactitud porque todo ocurrió demasiado lejos, y realmente las conexiones me decían que ya no estaba más, pero para mi que no hubieran encontrado el cuerpo significaba que había alguna esperanza.

—¿Y si sigue vivo?— inquirió.

—No lo sé. Lo intenté varias veces, que la gente crea que esté muerto confunde las conexiones— volvió a centrar su vista en él —. Ellos lo creen de una manera que se siente real, y mi mente piensa que lo es. Por eso no puedo ver mucho más allá, pero hasta dónde sé, él está muerto.

—¿Y ahora quién quiere atraparte?— Haylee sonrió de lado antes de tomar un trago más.

—No tengo idea. Sólo se que es alguien que sabe sobre mi don, y sabe ocultarse de todo lo que puedo hacer.— movió levemente sus dedos por la mesa, moviendo las pequeñas gotas que la bebida fría había dejado sobre la madera.