De regreso

843 83 16
                                    


Sabía que ya era hora de levantarme, hace veinte minutos que había despertado pero me sentía muy cansado y adolorido, así que solo opte por abrir los ojos y sentarme con cuidado en la cama, pensando en lo que me había pasado horas atrás.

Mi autobús había salido por la tarde y no podía evitar los nervios que tenía, ya que no sabía cómo reaccionarían mis padres al verme, estarían molestos, tristes, felices o enojados, tampoco sabía que era lo que les iba decir, y de cierto modo me estaba arrepintiendo pero mis ganas de verlos aumento con el embarazo, a parte no podía detener el autobús.
El viaje había sido algo cansado ya que el tráfico hacia que nos demoráramos más de lo esperado, por lo cual tomaba pequeñas siestas despertando solamente cuando creía que ya habíamos llegado, pero la última vez que dormí había despertado por dolores que comenzaba a tener en mi vientre, eran soportables pero cada vez iban aumentando y me estaba asustando porque aún no llegábamos y no sabía cuánto faltaba, estaba más concentrado en tratar de tranquilizarme lo cual no sirvió mucho ya que comencé a sentirme mojadito, lo cual obviamente hizo que me preocupara, por suerte habíamos llegado y el chofer y algunos pasajeros me ayudaron hasta que llegue al hospital, después de ahí todo lo sentí demasiado rápido, el dolor, el llanto, y había visto a mi bebe por unos segundos, luego trate de no dormir pero mi cansancio era demasiado que caí rendido.

Y ahora me encontraba en una habitación del hospital, y al parecer no había dormido mucho porque aún se veía temprano y eso que a mi pequeño bebé se le ocurrió nacer en la madrugada, y ahora que tocaba mi estómago, ya no era grande y lo sentía todo aguadito cuando apenas hace unas horas aún estaba grande y durito, y era dulce pensar en ello.

- ¡PETER!

- ¿EH...?- no me había dado cuenta que alguien había entrado, hasta que escuche gritar mi nombre y aquellos brazos rodeándome, no sabía quién era, hasta que levante mi mirada y vi a papa en la entrada sonriéndome, y mis ojos inevitable comenzaron a llenarse de lágrimas y abrace con fuerza a aquella persona que parecía no soltarme, ambos llorábamos hasta que Papá se acercó a nosotros abrazándonos, los tres por un largo rato hasta que se separaron lentamente de mí.

- ¿Dónde estabas?, te estuvimos buscando por todos lados- y lo sabía, sabía que habían puesto mi anuncio de desaparecido mucho tiempo después de que me fuera, sabía que wade había tratado de esconderme los panfletos, desapareciendo todos parra que no llegaran a la zona que vivíamos ni zonas cercanas también sabía que cuando salía la alerta AMBER en la televisión el inmediatamente le cambiaba de canal, porque cuando salía esa alerta nunca sabes quién pude salir y él lo hacía por las dudas, pero para su desgracia cuando me toco estar solo en casa había visto esa alerta justamente con mi nombre, nunca le dije, porque aún no quería regresar, pero viendo ahora la cara de mis padres me hacía sentir mal por no avisarles por lo menos que me encontraba bien.

- Por ahí...

- ¡COMO QUE POR AHÍ PETER! ¡Estábamos preocupados, si lo sé no estábamos en nuestros mejores momentos, pero irte y no avisar, eso no se hace!- por lo menos ya no lloraba.

- Tony cálmate, no es momento ni el lugar para regañarlo, mejor dinos Peter que haces en un hospital

- Eh....no se lo dijeron....

- No, nos dio tiempo apenas hablamos con una enfermera que nos dijo que te reconoció aun con ese tinte en el cabello y que bueno ya no lo tienes todo.

Era cierto desde que había terminado la escuela no me había vuelto a pintar el cabello, el cual comenzó a crecer y ahora tenía la parte de arriba de mi color natural y se podría decir que tenía solo pintado las puntas, también había dejado de usar los pupilentes que wade me hacía usar.

ATRAPÁNDOME ~SPIDEYPOOL~Where stories live. Discover now