Girls Like U (Camila Cabello y Tú)

Once; Something's gotta give.

Tres semanas.

No me he drogado, ya ni siquiera lo veo necesario o una vía de escape. Porque cuando regresé a casa lo hice y terminé llorando en el regazo de una extraña.

A mi yo del pasado le parecería tan patético, que estoy segura que buscaría una manera de romper el espacio tiempo solo para llegar hasta a mí y darme un buen bofetón.

Aunque claro, mi yo del pasado no había conocido aún a Camila y no se daría cuenta de que tan grave era ese asunto.

Puedo llevar bien un amor no correspondido, claro que puedo. Es más, puedo hacer hasta como que realmente no me importa, lo que no puedo soportar es que siempre me la tengan que recordar.

Una semana parece interminable, pero tres son un martirio. Su álbum es tan exitoso que tengo que encerrarme en mi habitación para no tener que escuchar a mi vecino poner alguna canción de la cubana.

Otra noticia que olvidaba, es que me mudé. Aún vivo en Los Ángeles, pero sola. Luego de llegar casi sin vida al departamento tuve una fuerte pelea con Ruby y Mike.

No era mi culpa, quiero decir, Camila prácticamente me había secuestrado y luego llegar a casa con el corazón o lo que sea que tengo en el pecho hecho polvo, no es muy agradable que te empiecen a gritar por haber desaparecido casi una semana sin dejar rastro.

Estaban tan enojados, que prácticamente llegué al departamento solo para sacar mi ropa y sin decir una sola palabra. Escuchaba que trataban de hablar o tener por lo menos una explicación, pero solo decidí irme sin decir más que un los quiero y que se cuidaran.

Estaba (estoy) con tan poca energía que quería evitar a toda costa cualquier problema, de no ser por esa situación probablemente tuviera a mi mejor amigo y a mi mejor amiga tratando de animarme.

Estoy en un edificio un poco alejado de mi antiguo departamento, tengo un vecino fan de Camila y otro con el afán de poner canciones de Ariana a todo volumen.

Ariana es la única persona que sabe de la condición en la que estoy, así que pasa casi todos los días en mi departamento, por no decir todos los días.

No me molesta, porque la verdad es que prefiero estar con ella a que estar sola, pero no puedo evitar sentir que solo la estoy ocupando y me hace sentir más mierda de lo que soy.

Sin embargo, no puedo dejar de pensar en Camila. Tampoco puedo dejar de pensar en lo feliz que se ve, con su álbum y otras cosas que le han estado sucediendo a través de estos pocos días.

Ariana sabe que no me gusta hablar sobre ella en voz alta pero una que otra vez, suelta algún comentario como «es bueno que haya dejado su relación tóxica con Lauren» «estoy feliz por ella» «está muy feliz por grabar su nuevo vídeo» «parece realmente feliz»

No me incomoda que hable de eso, en realidad me mantiene menos preocupada que pensar si está llorando y no tiene quien la abrace.

Ariana y yo seguimos fingiendo nuestro amorío, aunque estoy más segura que soy la única que se mantiene fingiendo. Me da la impresión que a ella no le hace falta fingir.

Puedo decir que he empezado a odiar la música, porque el intentar escribir algo bueno me obliga siempre a pensar en Camila. Estoy intentando olvidarlo pero se me hace casi imposible cuando mi corazón se empeña en no hacerlo.