—Buenos días —dijo al tiempo en que apoyé mi trasero en el asiento de atrás de su camioneta. Me dio una rápida mirada por el espejo retrovisor antes de arrancar—. Te ves.. interesante —comentó divertido, pero yo no estaba para bromas.

—No le hables —mi hermano se acercó a él y susurró—. Creo que está en sus días— Puse los ojos en blanco y fijé mi vista en la ventana enojada. Me mantuve callada durante todo el recorrido, hasta que al fin se detuvo. Abrí la puerta de la Range Rover, y la cerré con fuerza caminando enojada hacia la Universidad. Entré llevándome todas las miradas pero no devolví ninguna. Tenía el ceño fruncido y mis tacos sonaban como una música fúnebre por los pasillos. Me frené en mi casillero y giré la rueda con la combinación. A la primera no abría, el segundo intento..

—¡Mierda! —maldije dándole un golpe con el puño al casillero. Pero cuando me alejé me di cuenta de que era el equivocado. El mio era el de al lado, no ese. Suspiré y abrí —ahora sí— mi casillero. Al parecer este día me había levantado con el pie izquierdo. Divisé a mis amigas en el casillero de Alexa como todas las mañanas. Cerré el mio y caminé con el rostro tenso hasta allá.

—Y aquí viene lo mismo de todos los años —susurró Lia, aunque _______ no pudo oírla 

—Odio el inverno —dije una vez que estaba a su lado—. Quiero decir, toda esta ropa una encima de la otra que debemos usar. ¡Agh! Me exaspera.

—¿Alguien no ha tenido un buen día hoy? —preguntó Chloe con un tono sarcástico en su hablar. Suspiré y puse los ojos en blanco.

—No dormí nada anoche —conté mientras me apoyaba cansada contra los casilleros—. Siento como si una manada de elefantes me hubieran pasado por encima.

—Y así luces —dijo Alexa algo divertida aunque yo la fulminé con la mirada.

—Relájate, es lunes. Debes empezar bien la semana sino el resto será un martirio —me animó Ruth.

—Será un martirio de todas formas. Una semana alejada de la Universidad fue genial, me costará mucho retomar el ritmo.

—Eh, ________, ¿había tarea de Biología? —preguntó Chloe algo, ¿tensa? Conocía a mis amigas, algo pasaba. Por una milésima de segundo su vista se desvió a mis espaldas pero luego se volvió a concentrar en mi. El núcleo de su nerviosismo —según mis suposiciones— estaba detrás mio. Así que voltee y mi cuerpo completo se tensó al ver a aquel chico caminando tan relajadamente, como si fuera un alumno normal, como si estuviera libre de pecado.

—Maldito —susurré con rabia aunque cuando fijó sus ojos marrones intimidantes en los mios sentí pánico y ganas de correr.

—Tranquila _______. Estamos aquí para ti, nada va a pasarte —me intentó calmar Ruth. Suspiré y mi cuerpo se relajó cuando aquel castaño sacó su mirada de la mia y caminó hacia la cafetería.

—¡Buenos días! —me sobresalté ante el saludo enérgico de Liam y al instante mi rostro volvió a ser el mismo de hoy cuando me levanté. Labios en una línea recta, ceño fruncido y los brazos cruzados sobre el pecho. 

—¿Todo en orden señoritas? —bufé y me alejé de ese grupo de felicidad-por-donde-mires. Caminé hacia el campus y dejé que el frío me golpeara el cuerpo con brusquedad. ¿Qué les pasaba a todos hoy? Estaban como si tuvieran cinco años, fuera navidad y hubiesen recibido el regalo que tanto querían. Me senté en una de las frías mesas de metal y me quedé mirando la nada durante unos largos segundos. Abrí mi libro de Biología y me dispuse a leer algo hasta que sonara el timbre y anunciara el comienzo de la tortura. Al abrir mi libro me encontré con un pequeño papel amarillo pegado en la tapa donde se leía con claridad 'TERMINAR EL TRABAJO DE LAS PÁGINAS 65-73 PARA EL LUNES'. Dejé caer mi frente sobre el libro y me pregunté, ¿por qué el mundo me odia el día de hoy? ¿Acaso debo pagar por haberme acostado con Harry Styles? Levanté la cabeza lentamente debido a mi contractura y me quedé mirando al frente. Un suspiro se me escapó al recordar la noche del sábado, al recordar sus labios ayer, al recordarlo a él esta mañana. 

Tengo un Secreto ¿Puedes Guardarlo? (Harry & Tu) ~TERMINADA~Where stories live. Discover now