[Cachorro Perdido]°[Lemon]°[UF!Papyrus x Lectora]

Un Cachorro Insolente

- Eso es... - Dijo el joven pelirrojo atravez de la puerta, su voz sonaba sorprendida, incrédula - Se encuentra bien? - baje la mirada ante su pregunta.

- Pues, lo estuve... cuando El amo me acogió pero... - Mi voz se quebró, me había mantenido tranquila mientras contaba la historia pero, recordar a Papyrus me quebró, mis ojos se llenaron de lagrimas de inmediato, Richard pareció notarlo.

- Hey... calma si? Se que el señor te hablara pronto.. - Escuche la tela rozándose con violencia, como si se levantara rápidamente - Debo irme, el Señor a vuelto... Lo lamento - Escuche como caminaba rápidamente alejándose, Dijo que Papyrus volvió? Me levante de inmediato, abriendo un poco la puerta para ver a escondidas. Desde mi habitación tenia vista a la entrada de la mansión, en donde pude ver al mencionado esqueleto entrar, llevaba puesto un traje gris, una camisa blanca y una corbata roja, la cual estaba aflojando mientras resoplaba cansado, mi corazón dolió por un momento, de verdad no me volverá a hablar?. Papyrus levanto la vista a mi habitación, sus ojos rojos brillaban. Cerre la puerta rápidamente, me vio? 

Me aleje unos pasos, aun podía escuchar sus pasos firmes acercándose cada vez mas me senté junto a la cama, asustada, tenia la puerta cerrada, el no entrara.. cierto? 

Escuche como ponía su mano firme en el pomo de la puerta intentando abrirla sin éxito

- ___, abre en este instante - Dijo, su voz sonó peligrosamente amenazadora, pero aun así, seductora. Mi mente reacciono, estaba protegida, el no puede entrar

- A...Ahora te dignas a hablarme? Q..Que quieres!? Solo violarme e irte!? - Dije, temblorosa pero firme

No hubo respuesta por un momento, la tensión se podía cortar con una tijera, hasta que finalmente dijo con voz grave - Abre ahora mismo -

- N..No! Vete con ese robot! - Palidecí en cuanto, al terminar de decir la frase, escuche como golpeo la débil madera de la puerta, junto al sonido del golpe un ligero sonido de crujido se escucho, enserio iba a derribar la puerta? 

- Abre en este mismo instante! o me veré en la obligación de matarte.. - Dijo nuevamente de forma agresiva - Derribare la puerta si es necesario -

- Me mataras aun si abro la puerta! - Le grite, el miedo teñía cada palabra, que había hecho ahora?

Pero todo paso en cámara lenta, la puerta fue destrozada con unos huesos que la atravesaron de principio a fin, cada pedazo de madera caía al suelo revelando al esqueleto que se paraba allí, hecho una furia, sus ojos brillaban intensamente de rojo; se podía palpar la ira.

Se acerco a  mi, paso a paso podía sentir sus intensiones de matarme, me aleje lo mas que pude pero la pared impidió mi escape, me encogí contra mi obstáculo, tratando de atravesarlo. Cuando el esqueleto tomo firmemente mi collar levantándome de este la presión de su mano en el poco espacio entre el collar y mi cuello me asfixiaba un poco, me levanto a su altura, no podía suplicar, no serviría de nada, así que simplemente cerré mis ojos, a la espera de una muerte rápida.

Pero de lo contrario, sentí  la presión de sus dientes contra mis labios en un beso agresivo, forzó su lengua dentro de mi boca obligando a la mía a luchar con ella. Entre la confusión correspondí su beso. Sentí como llevaba su mano dentro de mi vestido, acariciando mi muslo de forma agresiva, clavando sus dedos en mi piel, para luego separar el beso al lanzarme a la cama de forma violenta.

- Valla que eres insolente no..? Deberé lavarte la boca - Dijo mientras abría su pantalón dejando salir su miembro, ya erecto y palpitante en un fuerte color rojo, no me dio tiempo de ver, ni de responder, ni de pensar, ya que tomo mi cabeza con fuerza y, acostándose sobre mi, sosteniendo mis hombros con sus rodillas mientras yo permanecía  acostada, penetro mi boca con su miembro, llegando a mi garganta rápidamente.

Mi rostro se tiño de un fuerte rojo mientras mi zona intima reaccionaba humedeciéndose con rapidez. El esqueleto penetro mi boca repetidas veces, cada vez con mas fuerza y violencia, ya estaba acostumbrada, así que, aunque en poca cantidad, podía respirar, de forma que podía disfrutar del sabor y de la sensación, el esqueleto jadeaba levemente, apretando mi cabello en sus manos, hasta que, pasado un momento, lleno mi boca de su semen, obligándome a tragarlo hasta la ultima gota. 

Retiro su miembro de mi boca para luego tomar mis mejillas con violencia levantándome hasta dejarme de rodillas en la cama - Quizás no es suficiente.. - Dicho esto desgarro mi vestido junto con mi ropa interior, estaba confundida, no debería estar sangrante y un poco muerta en el suelo? 

El esqueleto tomo un retazo de mi vestido fallecido el cual utilizo para atar mis manos, luego tomo otro mas largo atando mis tobillos detrás de mi dejándome de rodillas, procedió a tomar el retazo que ataba mis manos y, jalándolos hacia atrás, los ato con los que ataban mis tobillos, de forma que mis brazos estaban del todo estirados hacia atrás sobre mi cabeza. Avergonzada por mi posición actual mire a mi amo frente a mi, el me devolvía la mirada sonriente mientras desataba su corbata, con la cual me amordazo con fuerza, evitando que emitiera algún sonido, confundida Levante una ceja en su dirección cuando el esqueleto deslizo su mano por mi abdomen suavemente, causándome leves escalofríos - Estas castigada, ya verás como - su mano llegó a mi intimidad, la cual invadió acariciando mi pequeño botón Rosa de forma suave, las sensaciones explotaron de inmediato, los gemidos no tardaron en llegar ahogándose con la tela de la corbata, la mirada penetrante del esqueleto estaba teñida de enojo, pero a la vez deseo y lujuria, eso me calentaba aún más.

Poco a poco la velocidad de sus caricias aumentaba, llevándome más y más al borde del abismo; poco después el esqueleto metió dos de sus dedos dentro de mi, penetrandome con los mismos lentamente, llegando directo a mi punto más sensible. Y aquí llegaba, el dulce orgasmo, sus caricias junto con sus penetraciones y su mirada me llevaban rápidamente al climax. Y cuando estaba al borde de llegar a este, Papyrus se detuvo del todo, sacando sus dedos de mi.

La sensación de vacío me invadió, el orgasmo no había llegado, la incomodidad en mi interior y necesidad por más era doloroso. Quejándome lo mire, su rostro era decorado por una sonrisa cruel - Crees que te dejaré disfrutar después de lo que dijiste? - Dijo suave pero cruel y de inmediato supe, jugaríamos a la negación del orgasmo, comencé a temblar, apenas podía soportar la necesidad y no sabía cuánto planeaba jugar el esqueleto.

- Debes aprender a callar tu boca - su voz suave acompañó al regreso de sus dedos en mi intimidad, al estar aún la necesidad, las sensaciones se multiplicaron, cada penetracion dentro de mi era exquisita y no tarde demasiado en llegar al borde del orgasmo el cual fue interrumpido, mis quejidos eran ahogados por la fina tela, mientras la necesidad se convertia poco a poco en una sensación de vacío dolorosa- Debería matarte pero no lo haré, porque eres sumamente exquisita - Esta vez, el esqueleto llevo su boca a mi entrepierna, jugando con su lengua con mi clitoris, se sentía como el agua fría sobre una quemadura, era tan placentero, incluso más que sus dedos, pero cuando el orgasmo estaba por llegar, de nuevo se detuvo. Mis ojos se llenaron de lágrimas, era horrible, doloroso e incómodo.

Papyrus repito el proceso varias veces, cada vez era peor y peor, hasta que termine acostada sobre mi costado, temblando, mirándole con suplica en mis ojos, a lo que el respondió sólo con una negación de cabeza mientras acomodaba su pantalón - Estas castigada - fue lo último que dijo antes de soltar mis ataduras e irse. Pero se detuvo en la puerta y dijo como una clara amenaza - Si te atreves a masturbarte... Serás lo último que hagas- Dicho esto se fue, dejándome llorando debido a todo lo ocurrido

---------------------------------

No me siento nada bien