Capitulo II

101 10 0
                                    

Domingo 16 de diciembre, eran las 6 am cuando me levanté, otro día lluvioso (susurré) era una mañana muy agradable, mi madre se encontraba en la cocina preparando el desayuno, ese día iría por primera vez a una iglesia, entonces entre al baño y me duché luego planche mi mejor camisa porque sabía que no iba para cualquier parte, era especial ese día entonces me vestí y baje a la cocina a desayunar, mi mamá había preparado sándwich con chocolate, mi desayuno preferido.
Mi mamá al verme muy elegante me dijo:


- Gastón para dónde vas tan tempano? Solo son las 7 am y porque vas tan guapo?


Reí y le respondí:


-Madre, iré a la iglesia, creo que es la solución a todas mis depresiones, necesito una nueva vida.


Mi madre se alegro, me dio un abrazo y se fue a arreglar mi habitación.
Luego yo subí y le dije.


- Maa! Porque no me acompañas?


Ella se negó, a veces pienso que endemoniada Jaja, cree en Dios pero es la típica mujer que dice vulgaridades cuando está enfadada, aun así la amo, aunque suela tratarme mal es el ser más maravilloso que conozco.

Estaba listo, entonces me acerque al garaje y saque mi moto, cuando la prendí al instante se apagó, que sorpresa, estaba sin gasolina y ya era un poco tarde así que le escribí a Thomas, un compañero de secundaria muy cercano a mi y le dije:


- Thomas donde estas? Necesito tu ayuda!


Me respondió:


-Gastón, que milagro que me escribes, estoy en mi casa, voy a salir para donde mi abuela, ¿En qué te puedo ayudar?

Sabía que podía contar con el entonces le dije:

- Amigo necesito que pases por mí, iré a la iglesia y mi moto no está bien.

5 minutos pasaron cuando llegó Thomas, lo saludé, me monte en su moto y nos fuimos, hablamos de nuestras vidas por el camino, el aún seguía cantando, era su sueño aunque no supiera cantar, se asombró al saber que iba a la iglesia, el pensaba que yo solía ser de esos jóvenes en la actualidad que desperdician su vida en drogas y cosas ilegales, pero no, yo no soy así, al parecer sudo hasta agua bendita!
Llegue a la iglesia fue muy bonita aquella mañana al saber que tengo un Dios que jamás me deja solo, salí de ese lugar con una sonrisa en mi rostro, pero poco a poco se fue apagando al ir recordando aquellas personas que hacían parte de mi vida y hoy en día no sabía de ellos.

Ya era hora de regresar a casa pero no tenia en que irme, no tenía dinero y mi celular lo había dejado olvidado en la mesa de noche, así que me tocó caminar.
Cuando iba por la mitad del camino ya estaba todo sudado y vi a Clark, aquella hermosa chica con la que había salido el día anterior ¡que sorpresa! estaba más divina que la primera vez, se encontraba haciendo ejercicios, al parecer yo no era el único que estaba sudado, ella al verme corrió a donde estaba yo y me abrazó, me sentí perfectamente completo cuando estaba a su lado, algo en mi ocurría, eran las sensaciones más extrañas y hermosas que había sentido, sus abrazos eran cálidos como el verano, sus ojos resplandecían como el sol en el atardecer, al parecer era la chica ideal para mi, solo llevaba un día de conocerla y me hacía sentir mejor que cualquier otra chica.
En medio de nosotros había un silencio, tal vez fue el momento más incomodo de mi vida, no sabía cómo dirigirme hacia ella, tenía miedo a decir algo que la molestara entonces ella rompió aquel silencio y me dijo:


- Gastón te pasa algo? Estás muy distante, o tal vez sea una chica que te tiene así.


No supe que contestarle, solo le Sonreí sin saber que me pasaba, ella me comprendió y me preguntó que hacia caminando por ese lugar, entonces le dije:

- Cariño, vengo de la iglesia y olvidé mi celular así que no puedo comunicarme con mi amigo que quedó en recogerme, además no tengo dinero.


Tal vez fue lo mejor que pude haberle dicho a una chica como ella, al enterarse de que asistía a una iglesia le gusté mucho más porque sabía que sería una persona incapaz de hacerle daño.
Poco a poco fui tomando confianza y me sentía muy bien al hablar con ella.

Ya casi llego a mi casa le dije. Clark me insistió en que me quería acompañar, quería conocer a mi mamá y fue así, la lleve donde mi madre, parecía que se conocieran desde hace mucho, hablaron de mi, me trataban como un niño y eso me gustaba, ya eran las 5pm y Clark decide irse a su casa, tome mi teléfono y llame un taxi, ella se despidió y se fue.
Era muy temprano y ya tenía sueño, así que subí a mi habitación y me quedé rendido en mi cama hasta el día siguiente.

Al despertarme encontré 3 mensajes de Clark, eran los mejores buenos días que me habían dado en mi vida, esa chica estaba enamorada de mi, me confesó que lo que veía en mi no lo podía ver en otro chico, mi autoestima subió de inmediato, m sentí seguro de mi mismo y comencé hablarle lindo a aquella chica.
Ese día hice absolutamente nada, me la pase acostado en mi cama chateando con Clark y comiendo nutella que me había traído mi padre el día anterior.
Ya era de noche y me quede dormido en el sofá de mi casa hablando con mi mamá sobre esa chica, al parecer la pensaba más de lo normal.

Llego el día siguiente, 18 de diciembre, un día muy especial para mí, ya verán lo que sucede...

MY LITTLE WORLDWhere stories live. Discover now