Te esperaré aunque sea lo ultimo que haga.(TERMINADA)

CAPITULO 108: Las personas no cambian

Carla: Después ese perro encuentra otros dueños que le ama y le cuida de mejor forma, le hace el perro más feliz del mundo hasta que un día esos dueños le golpea con fuerzas y comienza a decepcionarse, a sentirse mal, a perder la confianza en este mundo....¿Que es lo que queda de ese perro?

- Ese pobre perro era yo...

Grei: ¿Te he decepcionado?

Carla: Si, yo tenía la esperanza de que tu me apoyaras siempre, pero llegó Daniela y tu cambiaste por completo.

Grei: Por que te amo Carla y saber que estás con Dan a pesar de que ella solo te ve pocas veces en años, me fastidia, me fastidia ver que no te cuida.

Carla: Sabes...yo quiero cambiar de libro, quiero sentirme completa, quiero olvidar a Daniela...

Grei: Solo lo harás si de verdad quieres olvidarla.

Carla: Es lo único que quiero, olvidarla para poder sentirme bien.

*DANIELA:

Coronel: Este será tu nuevo uniforme.- Dice colocando un traje militar del proyecto encima de la mesa.- Trabajaras en el sótano, con las maquinarias de la electricidad del campamento.

Daniela: Yo no tengo ni idea de electricidad

Coronel: Tranquila...- Toma asiento en su silla.- Abra un joven que te ayudará, estaréis solo, obviamente con unos guardias rondando, espero que entiendas  que esto no es un juego y que debes pasar cada día a por tu medicación a la enfermería, te queremos más fuerte que nunca.

Daniela: Nadie de aquí ha salido bien...¿verdad?.- El rie

Coronel: Cierto, pero míralo por la parte buena, tu has revivido.- De nada me sirve si estoy aquí.

Daniela: ¿Cuando podré volver a tierra?

Coronel: Uh...- Dice con una sonrisa.- Pues este año ya acabaste tus vacaciones.- Le miro enfadada, agarro la ropa y me levanto.- No olvides pasar a por tu medicación y recuerda que mañana comienzas tu turno a primera hora.

- Salgo de su despacho y ya me encuentro con un estúpido soldado con máscara, el me acompaña hasta enfermería, ahora me tocaba ver a Irene.

- Toqué dos veces y ella me dio paso, el soldado esperó afuera.

- Irene me esperaba en pie, seria.

Daniela: Hola.

Irene: Hola...- Se acercó a mi y señaló la camilla.- Sientate por favor.- La obedecí, ella remangó mi camiseta, la parte de mi brazo izquierdo.- Debo hacerte unas pruebas para ver como has venido de tierra.- Ella da la vuelta y prepara unas agujas.

Daniela: ¿Pues como voy a venir?, si salí de aquí enferma.

Irene: Que egoista, deberías agradecer que estás viva.- Dice dandome la espalda.

Daniela: Ojalá nunca me hubiera salvado.

- Ella da la vuelta y se acerca a mi.

Irene: ¿Como dices eso?, tienes una hija.- Coloca un elastico en mi brazo, agarra la vena y pincha, eso me molesta y aparto mi cara para coger aire, termina el pinchazo y respiro.

Daniela: Es lo único que tengo ahora.

- Ella lleva mi sangre hacía un pequeño bote alargado.

Irene: ¿No te va bien con Carla?.- Pues no, ya no van.

Daniela: ¿Que más da?, si estoy aquí.

- Ella vuelve a mi en silencio, coloca un poco de gasa en mi herida del pinchazo.