12-La Fiesta (Parte 2)

45 21 3
                                    

Eli me enseñó un poco a bailar, nos tuvimos que parar muchas veces ya que la pisaba con mucha frecuencia, pero después de todo yo se lo advertí. Al final pude bailar una pieza con ella y quedó complacida.

- ¿Ves? Tus pies izquierdos no fueron rivales para mí.

- Ya vi que no-respondí sonriéndole.

Nos echamos a reír y nuevamente Eli me agarró la mano y empezó a arrastrarme por el lugar.

- ¿A dónde vamos?- pregunté intrigado.

- -A salir de aquí- me respondió sin mirarme.

Atravesamos todo el salón, incluso pasamos por la mesa de comida en donde aproveché para agarrar unos cuantos bocadillos, no logré agarrar mucho ya que Eli me estaba jalando, tropezamos con un montón de gente que nos insultaban por haberlos chocado. Así fuimos hasta salir de la fiesta.

- Lo logramos-dijo triunfante echándose un mechón de su cabello castaño por detrás de la oreja.

- ¿Y para qué salimos?-pregunté.

- No lo sé-dijo haciendo que me cuestionara de seguirla-sólo quería salir.

Caminamos en silencio hasta llegar a la playa, siempre terminábamos allí, fuera la hora que fuera. Entramos con cuidado de que no nos viera nadie, nos quitamos los zapatos para sentir la arena en nuestros pies y caminamos hasta el final de la playa. Todo estaba tranquilo y el sonido del oleaje me relajaba, yo amaba ir a laplaya. Ya allí nos sentamos para contemplar la belleza de la noche.

- Alex,estar aquí es muy relajante-comentó Eli viendo el mar fijamente.

- Si

- Mira hay luna llena-dijo señalándola.

- Es verdad.

- ¿Has escuchado la leyenda de la luna?-preguntó mirándome expectante.

- ¿La leyenda de la luna?-pregunté de forma tonta la.

- Sí, la leyenda de la luna-repitió debido a mi tonta pregunta.

- Pues no-respondí finalmente.

- Bueno Cuenta la leyenda que hace mucho tiempo, mucho antes que los humanos existieran en la tierra, existían dos espíritus, ella se llamaba Luna y el Kuatsumi. Ambos vagaban por el universo admirando su hermosura, siempre juntos y siempre felices. Existía otro espíritu, el cual siempre envidiaba a Kuatsumi por siempre tener a Luna a su lado, esto lo llevo a engañar a Kuatsumi para que bajara a la tierra y nunca pudiera regresar, el aprovechó un día en el cual Luna estaba admirando sola la belleza de las flores de la tierra. Cuando Kuatsumi le pregunto al otro espíritu donde se encontraba Luna, él le dijo que se encontraba mirando las flores desde lo alto del espacio, y le aconsejo que el bajara a la tierra y recogiera unas cuantas para Luna, lo que no sabía Kuatsumi es que al bajar a la tierra él nunca más podría regresar. Una vez que Kuatsumi bajó y no pudo regresar, Luna decidió quedarse y esperar a que algún día ambos pudieran volver a estar juntos.

- Es una bonita historia, aunque un poco triste, no tuvo un buen final- comenté, sabía que no todas las historias tenían un final feliz, pero prefería las que lo tenían.

- No todo tiene un buen final Alex, son pocas las cosas que culminan bien.

- Eso es deprimente pero estoy seguro de que muchas de las cosas que hacemos pueden terminar bien si ponemos todo nuestro esfuerzo-debatí, no todo tenía por qué tener un mal final.

- Hay cosas que no están dentro de nuestro control-contestó con una mirada que pude describir como melancólica.

- Bueno en eso te doy la razón- respondí pensando en el accidente, hay ocasiones en las que no podemos hacer nada por más que queramos.

Verano y OlasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora