C O M P R A D A

Mi "Bebé"

Intentaba seguir los pasos de Joseph sin tropezar o sin que le pasara absolutamente nada a mi impecable peinado, pero siendo sincera era bastante difícil ya que este tipo corría como enajenado. Cuando por fin llegamos a la habitación, (que realmente no fue muy lejos pero gracias a los obstáculos me pareció una eternidad) Joseph se llevó las manos a la boca y agrando los ojos de manera impresionante, creo que el estaba más emocionado que yo, y eso es obvio ya que yo no estaba emocionada, me sentía más bien asustada y nerviosa pero siendo sincera hasta ahorita este sitio me ha gustado, pero ese no es  el problema, si no lo que sigue...
Después de emocionarse como niña pequeña con una nueva muñeca abrió la puerta y ahora la de la gran expresión fui yo.
Entramos a una sala repleta de los vestidos de gala más exclusivos y preciosos que mis ojos han presenciado, ni siquiera en los cursos de moda y etiqueta en la CESI vi este tipo de prendas. Estaban elaboradas con el mayor de los cuidados y esfuerzos y para mí que fueron diseñados por los diseñadores más exclusivos del mundo entero.
Al parecer Joseph disfruto ver mi cara en cuanto puse los ojos en todos los miles de vestidos ya que aparentemente no podía mantener la boca cerrada.
-Lo se linda, yo he entrado millones de veces aquí y cada vez me sigo impresionando. Quieres oír un dato curioso? Este es el lugar donde existe la mayor cantidad de vestidos y de la mejor calidad en todo en planeta. Incluso la antigua Reina llegó a venir aquí por su traje de coronación hace muchos años. Existen al rededor de 57900 vestidos únicos e irrepetibles, y solo en caso de que ya se hayan llevado uno se puede fabricar uno igual si se desea.-
Quede absolutamente impactada
-Ósea que están a la venta?-
-No. O bueno, no para cualquier persona ya que no son PARA NADA baratos. Y no todo mundo sabe de Moddante, se podría decir que somos secretos y exclusivos. El gobierno nos contrató para que aquí se trajeran a todas las "Chicas Mercancía" para que fueran arregladas y que eligieran vestidos de aquí, todo el gasto ya fue cubierto por el gobierno. Pero bueno, démonos prisa antes de que alguien más venga, si quieres tú ve a ver mientras yo busco a Mi Bebe-
-Tu bebe?-
-Ya lo verás hermosa, ya lo verás-
Joseph desapareció entre miles de prendas y yo me quede admirando cada una y sintiendo las telas. Esto sin duda es el paraíso, quería verlos todos pero era imposible, eran miles! Estaban clasificados por color; mi color favorito siempre fue el blanco pero yo quería ver más bien los coloridos. También estaban clasificados por estilos, cuando fui a ver los de color rosa había largos y cortos, pero en su mayoría largos. Había de flores, bordados, con tul, con detalles dorados, con encaje, de seda, y de más. Tenía ganas de probarme todos en ese preciso instante pero de pronto...
-Lista para un infarto mi niña?-
Escuche a Jos y me giré, y efectivamente, casi me desmayo.
-Es... Es...- no logre encontrar las palabras para describirlo
-Lo se linda. Es perfecto.- dijo el hombre mientras lo cargaba delicadamente en una funda de plástico transparente que al parecer también era bastante fina -Siempre espere este momento para hacer que alguien lo luciera, yo soy hombre y solo he podido admirarlo, pero hoy es el día perfecto, y quien mejor que tú para usarlo-
Mi corazón se detuvo al imaginarme a mi usando eso, yo creo que esa sensación es lo más cercano al amor a primera vista que había vivido.
-Yo?-
-Claro que tu tonta! Ven corazón, te lo vas a probar para ver si le hacemos ajustes-
Me metí al inmenso probador y cuando se cerró la puerta no pude evitar sonreír y brincar súper emocionada hasta que me di cuenta que no estaba sola, ya que había una señora a lado mío mirándome sonriendo y yo me detuve solo para poder ponerme más roja que un tomate.
-Perdón, no sabía que había...-
-Ay! Tú no te preocupes lindura, soy Mariam, y mi labor aquí es que si lo deseas te ayudaré a ponerte el vestido y a acomodarlo ya que comúnmente este tipo de prendas no se pueden poner por sí solas- dijo riendo la señora con una gran sincera sonrisa. Por su apariencia tenía más de 50 pero menos de 60- Que te parece?
-Perfecto, si. Muchas gracias-
-Muy bien, pues entonces veamos...- Dijo mientras intentaba tomar el vestido pero ella se detuvo al verlo- Wow... Creeme que he visto miles de vestidos en los años que llevo aquí pero sin duda este es muy hermoso, eres muy afortunada. Pero bueno, vamos a ver cómo te queda-
Le quitó la bolsa de plástico a mi nuevo amor y lo extendió frente a ella mientras yo me desvestía, a decir verdad me dio pena al principio pero después me percaté que también era mujer y que había trabajado en esto casi toda su vida así que lo hice sin pudor y después Mariam me indicó que me subiera a una plataforma donde había un escalón más alto en el que ella se subió para poder meter el vestido.
Alcé los brazos y ella colocó los orificios del torso delicadamente y luego se bajó para acomodar la falda, y la parte superior. Se posó en frente mío y me admiro unos segundos, y enseguida sentí sus manos con mucho cuidado abrochar cada uno de los botones de la espalda y terminando de acomodar a la perfección cada centímetro del vestido.