El Imbécil de mi Vecino

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Realmente he pensado mucho en lo que me dijo Amara ayer por la noche, es cierto que Tobías me hace molestar mucho casi por todo, pero no se, hahahahah esto me mata, por una parte me siento mal, porque siento que le estoy dando alas a Max pero no se si me gusta, y por otra siento que tobías me debe dajar mi espacio un tiempo, tener otro amor, pero es difícil, pues vamos a tener un hijo, no se que hacer, ¿cuando acabara todo esto? ¿cuando seré feliz?.

-Buenos días princesa-dice y me besa-¡como dormiste?.

-Buenos días-le respondo, y creo que jamás va a dejar de decirme princesa por más que se lo implore-muy bien¿y tu?.

-Bien amor-Tobías y su cursilería-¿desayunamos?.

-si...-alargo-pero queria hablar contigo sobre algo.

-Ehh...¿si?-Tobías se pone más cerca y mi pulso se descontrola-¿y de que?-me besa-.

-Tobías se serio-pido yo y me alejo-es importante.

Nos quedamos en silencio unos minutos y yo continuo:

-Quiero que no estes mas conmigo-digo y él parece confundido- osea tu y yo no tenemos nada, pero no quiero tener nada que ver contigo, que no sea nuestro hijo claro.

-Es por él verdad-dice y se que habla de Max-Melysa no puedo y no quiero perderte, te amo.

-Tienes que darme tiempo Tobías-digo y me pongo de pie-no es por él ni por otra persona mas que yo, quiero tiempo, por favor.

-Está bien-dice con molestia-Te amo.

Luego de decir esto sale y se va. Tenía que hacerlo, tengo que poner mis pensamiento claros, y asi podre tomar una decisión.

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-¿Melysa estás bien?-me pregunta él y me saca de mis pensamientos-te noto destante.

-Estoy bien-digo y Max me besa-.

Nuestro beso se intensifica y terminó arriba de Max, siento que la situacion se va a salir de control pero aun asi no me detengo, MALDITA SEA, deja de besarlo.

-Vamos a calmarnos-digo y me alejo-.

Me vuelve a besar y esta vez no puedo parar, y terminamos haiendo cositas malas, pero satisfactoria.

Soy una cualquiera, bueno no, o bueno si, coño no se, es que hahahahhaah mi puta cabeza está indecisa.

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 He pensado mucho que hacer, pero termino haciendo lo contrario, tengo que alejarme de ambos, pero por un lado Max es la parte tierna y sensible que le falta a Tobías, y por otra Tobías es la parte traviesa y excitante que le falta a Max, mi mente parece una licuadora.

-¿Y qué harás?-pregunta Amara-¿que decidiste?.

-Pues creo que me alejare de ambos por un tiempo a ver que sucede-digo yo y tomo un sorbo de mi taza de café-quiero pensar bien.

-No es porque Tobías sea mi primo hermano-Amara toma lo que queda de café en su taza, y se levanta de la silla y se dispone a fregar la taza- pero tienes más tiempo conociéndolo a él, y él te ha dicho la verdad.

-¿y como sabes que me dijo la verdad?-pregunto con intriga mientras me levanto y repito el acto de amara de fregar la taza-¿que sabes?.

-Pues Sam a llamado varias veces ya a Tobías pidiéndole que regrese, que no la ignore-en el momento que Amara pronuncia esas palabras yo siento algo de culpa-pero él es fuerte con ella, le contesta brusco y feo, o simplemente no contesta sus llamadas.

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Lo que me dijo Amara me tiene mal, si antes sentía que mi cabeza era una licuadora ahora estoy peor, he juzgado mal a Tobías y lo reconozco, pero eso no me hace cambiar mi decisión, suena mi celular y contesto sin ver quien es:

Yo: ¿si?

Tobías: Hola Melysa

Yo: Hola Tobías

Tobías: Solo quería darte las buenas noches, y decirte Te Amo

Yo: Buenas noches Tobías Harrison

Tobías: Buenas noches Melysa Braw

Fin de la llamada.