Una confesión ...

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Desperté un poco tarde. Fui a la cocina, tomé cereal y desayuné. Anna estaba limpiando su habitación. El lugar se sentía extraño sin Henry en él, yo me sentía extraña sin Henry a mi lado, ya había vuelto a casa. Terminé de desayunar y me di un baño. 

Cuando iba a cambiarme me di cuenta de que mucha de mi ropa faltaba, de pronto recordé que no la había sacado de la secadora el día anterior. Me cambié con lo primero que encontré y salí por mi ropa. Regresé con el bulto de ropa en mis brazos y me puse a doblar y acomodar todo. 

Terminé, me cambié de nuevo y fui a sentarme a la sala, prendí la televisión y busqué algo que ver. Termine viendo un episodio de los padrinos mágicos. 

- Caroline, dejaste algo en la secadora, ¿lo pongo en tu cuarto? - 

- Si, por favor - 

- Calló un poco abajo del escritorio - 

- Yo lo levanto, gracias - dije tomando mi celular - ¿Diga? - 

- Princesa, ¿cómo estás? - 

- Te extraño mucho. ¿Cómo van las cosas en el trabajo? - 

- Yo también te extraño. Todo va bien, todo normal, soy famoso - 

- ¿Ah si? - 

- Si, todos quieren saber como fue mi accidente, me siento como un personaje - 

-  Sorprendente ... por cierto ¿cómo está Steve? - 

- Estable, fuera de peligro, una congestión alcohólica - 

- Lo siento - 

- Gracias, pero ya está mejor y él se lo buscó, no me escuchó cuando le dije que tenía que calmarse, en lugar de eso, dejó de hablarme, por eso no nos hablamos - 

- Espero que después de esto comprenda un poco mejor las cosas- 

- Espero. Nena te dejo, tengo que volver al trabajo, estoy en un evento - 

- Esta bien, suerte - colgué

- ¿Vamos a cortarnos el cabello Julieta? - 

- ¿Julieta? - 

- Romeo y Julieta y su amor prohibido - rió Anna

- Que graciosa, vamos, es buena idea - dije tocando mi cabello. 


Fuimos al centro de la ciudad, nos cortaron el cabello, fuimos a un centro comercial, comimos en un Domino's Pizza y caminamos por algunas tiendas. 

- Mira - dijo Anna señalando a una tienda de lencería

- ¿Que? - fingí demencia

- No te hagas, la lencería, apuesto a que a Henry le encantaría verte con uno de esos - 

- Anna - 

- Caroline, que duermas con él ya no es un secreto - 

- Pareces muy, de acuerdo conmigo - 

- Soy tu mejor amiga, no tu madre, además si eso quieres hacer y el tipo te trata bien, no le veo el problema - 

- Gracias - dije sonriendo

- ¿Vamos a la tienda? -

- No - dije seria

Seguimos caminando por el centro comercial, compramos algo de maquillaje nuevo y después de un rato volvimos al auto. Anna tenía varias llamadas perdidas de Ernesto. Fuimos al departamento y vimos la mini van de David estacionada. 

Siempre Serás TúDove le storie prendono vita. Scoprilo ora