El pelinegro le guiñó un ojo para luego sacarle una inesperada foto de cerca a Lauren la cual tomó el móvil de su amigo para evitar más fotos.

- Ey, ¡Que te casas sólo una vez en la vida, mejor tener fotos demás que de menos! – Reclamó.

- Me estás poniendo nerviosa. – Apuntó.

- Bueno... Pero repito, sólo te casas una vez... A menos que te divorcies y te vuelvas a casar, pero no creo éso posible... Vamos, tú y Camila jamás podrían divorciarse. – Dijo con seguridad.

Una amplia sonrisa se dibujó en el rostro de Lauren la cual afirmó en silencio recordando con emoción cómo en unos minutos más por fin realizaría uno de los sueños que tenía junto a Camila.

- Estoy muy orgulloso de ti... - Murmuró Cameron dejando un atisbo de seriedad en su expresión.

- ¿A qué te refieres? – Preguntó sonriendo levemente la ojiverde.

- Has sacado adelante tu relación con Camila frente a todo... No dejas que nadie te haga dudar sobre tu amor por ella, no dejas que nadie ni nada impida que ustedes se demuestren su amor, sé que no es fácil, pero... Me alegra saber que tendrás a alguien a tu lado para siempre.

Las palabras de su mejor amigo le hicieron emocionarse, tanto que pensó que lloraría allí mismo, pero sin dejar de sonreír le pasó una mano por la mejilla al pelinegro el cual ladeó la cabeza agradeciendo la caricia.

- Tú también estarás siempre a mi lado, no lo dudes Cameron. – Apuntó la soldado.

- Claro, no te librarás tan fácil... Por algo soy el mejor padrino de boda.

...

- ¡Papá pásame el ramo de rosas por favor! – Suplicó Camila nerviosamente al ver cómo su padre no dejaba de hacer pucheros llorando levemente.

Sinu negó con la cabeza al intentar consolar a su esposo el cual llevaba todo el día intentando contener las lágrimas de la emoción que sentía al ver a su hija mayor próxima a casarse.

- Mi pequeña... - Murmuró Alejandro abrazando torpemente a Camila.

- Papá... - Rodó los ojos.

La risa de Sofía hizo que la arquitecta le dirigiera una mirada de enfado a su adolescente hermana la cual se encogió de hombros frente a la irreal escena del momento.

- Venga papá, seguiré siendo tu pequeña. – Susurró la morena acariciando la espalda de su padre el cual no quería romper el abrazo.

- Ya bastante tengo con que te hayas ido a vivir con Lauren... Nunca pensé que te casarías tan joven. – Aclaró.

- Cuando mamá se casó contigo era incluso más joven que yo. – Argumentó.

- Ya... Pero... Es que estoy emocionado. – Dijo el hombre volviendo hacer un gran puchero.

Abrió los párpados de par en par sintiendo cómo el nerviosismo se apoderaba de ella. No podría caminar hasta donde estaba su futura esposa si su padre seguía llorando peor que niño pequeño perdido en la guardería.

- Mamá... - Pidió ayuda.

- Calma, tu padre sólo está emocionado, se le pasará en unos minutos...

Sofía se acercó hasta ella para entregarle una divertida mirada frente a la pequeña discusión que estaban teniendo sus padres. Una sincera sonrisa se dibujó en el rostro de Camila al ver a su pequeña hermana con aquel vestido color celeste.

Amor inmarcesible. (CAMREN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora