Rough sex

C.

Atracción y amor.

Dos palabras con significados completamente diferentes pero con ciertas similitudes. La atracción puede ser aquello que siente una persona respecto a otra cuando tiene un interés romántico o sexual. Un hombre a quien le resulta atractiva una mujer por su cuerpo, por citar una posibilidad, siente atracción por ella, en cambio, el amor es un sentimiento de afecto universal que se tiene hacia una persona, animal o cosa. Amor también hace referencia a un sentimiento de atracción emocional y sexual que se tiene hacia una persona con la que se desea tener una convivencia bajo el mismo techo o relación.  Así mismo, amor es el esmero y agrado con el que se realiza una cosa.

Como por ejemplo lo que Justin estaba haciendo por Colleen. Se había esmerado en hacer todo perfecto para impresionarla y que ella se diera cuenta que no sólo se trataba de pasar un buen rato en la cama, sino también de entablar una buena relación, ya sea como amigos o novios, pero siempre mantener ese vínculo que ambos tenían. La atracción que ambos sentían era indudable. Cualquier persona se daría cuenta de ello con tan sólo mirarlos. Tal vez si se hubiesen conocido antes, todo sería diferente.

Tal vez estarían juntos como pareja o tal vez se hubiesen empeñado en conocerse bien antes de pasar al otro nivel. Tal vez todo sería muy distinto a lo que es ahora.

Pero el destino era el destino y simplemente no se podíamos cambiar.

—Ay chicos, ¿por qué tanto suspenso?

—¿Por qué no te callas y sigues caminando?

Hannah usó un tono divertido y Colleen frunció el entrecejo.

—No tienes que responder groseramente —puso mala cara.

—Era broma, tontita —rió burlesca.

—Tu sexy amiga sólo está ayudándote, Colleen —dijo Ethan a su izquierda.

—¡Pero no me han dicho de qué se trata! —exclamó haciendo un puchero.

—Lo verás cuando lleguemos —medio sonrió.

Ella tenía los ojos vendados así que no podía ver nada, solamente podía confiar en su mejor amiga y en el mejor amigo de su... ¿amigo? La verdad no sabía cómo llamarlo. No podían llamarse amigos porque vamos, los amigos normales no tenían sexo y mucho menos sentían una atracción el uno por el otro.

—Al menos denme una pista, por favorcito —insistió poniendo una voz de niña.

—Ya te dijimos que es una sorpresa que preparó tu príncipe azul —se burló Ethan.

—Eso sonó muy cursi —soltó una pequeña carcajada. Aunque no lo daba a demostrar, estaba muy nerviosa y ansiosa—, pero me quedaré callada y tranquila sólo porque sé que no podré sacarles ninguna información. Sólo espero que no sea una mala broma eh.

—Créeme que no será ninguna broma pesada —le susurró Hannah—, lo único que puedo decirte es que será la mejor despedida de toda tu vida. Algo inolvidable. Y lo mejor es que sólo estarán tú y tu chico.

La morena no pudo evitar sonreír tontamente. Esa idea le gustaba y mucho.

—Estoy nerviosa...