¡Prometo Nunca Enamorarme! ©

8.¿zorras? [Editado]

—Si tienes razón, tengo miedo de ser una de tu lista porque si estoy allí significa que me he convertido en una zorra como todas las demás—
Maddie tomo una bocanada de aire intentando controlarse.

—¿zorras?—
pregunté exasperante.
—nombra a una de ellas y te creeré—
conteste con cierto grado de arrogancia.

—Que me dices de Kendall, o acaso me lo vas a negar—
se cruzó de brazos ante su respuesta pero me dejó algo confundido ya que Maddie es nueva en la preparatoria Weston.

—¿Conoces a Kendall?—
pase saliva mientras mi cabeza reproducía millones de respuestas.

—Agh responde si estuviste con Kendall, una pregunta nunca se soluciona con otra pregunta—
frunció el ceño.

—Si estuve con ella, ahora responde a mi pregunta—
lleve mi brazo por detrás de mí cabeza apoyando mi peso en el marco de la puerta.

—Kendall fu..—
Maddie fue interrumpida por su teléfono, y caminó alejándose un poco para así evitar intrusos como yo en su llamada, al parecer no quiere que le arrebate el teléfono como lo hice esta mañana.

—Si, espera un segundo mamá. Ian mi madre quiere hablar contigo—
llevo su brazo a lo alto para que lo tomara. Hice de inmediato un movimento veloz y tomé el teléfono.

—Hola
¿Maddie como se llama tu madre? —
Retire el teléfono susurrando para así disimular.

—Anne—
Maddie rió al verme.

—Hola señora Anne.

—Hola cariño, Maddie me ha dicho que has pasado la tarde trabajando junto a ella y que has quedado en traerla en tu auto, aquí los espero...

—Pero Anne—
.....beep.... Colgó antes de que pudiera negarme, que astuta, "igual a la hija".
Rodé mis ojos.

—¿Y bien?—
pregunto victoriosa.

—Ahh mejor entra al auto— lleve mi mano a mi jean agarrando las llaves de mi auto....

Durante la mitad del recorrido ninguno de los dos se inmutó a decir ni una palabra así que encendí la radio para entrar en ambiente, pasé las canciones una y otra vez sin encontrar algo que me gustara, presioné una vez más el botón y Maddie detuvo mi mano con agilidad.

—No la cambies amo esa canción—
Dijo al ritmo de la música.

—¿Quien es el cantante?—
Pregunte.
Maddie abrió sus ojos como platos.

—¿Acaso en que época estas? es una canción muy popular y obviamente la canta Justin Bieber—
Respondió con tono de seguridad pero yo se como deshacer ese tonito glorioso.
Por razones muy obvias conocía ese tipo de música no porque me gustara ese tal Bieber (Hey hablo de su música para aclarar no mal piensen las palabras).

—¿Y quien hace la mezcla?—
cuestione fingiendo no saber nada.

—Jmm no recuerdo, creo que es Bruno Mars—
"¡Maddie no tiene ni idea de lo que dice!" ojalá esa inteligencia no la hereden sus hijos" . Si ella pudiera escuchar mis pensamientos puedo asegurar que no estaría vivo.

—¿Que dices?—
Levante el tono de mi voz mientras golpeé mi frente en desacuerdo.
—Que te sucede, ¡estas loca! .
Por favor Bruno Mars canta, no hace mezclas ni es un Dj.—
Rodee mis ojos con arrogancia.

—Al parecer el anciano resultó más informado de lo habitual—
Rio entre muelas.

—La música es mi vida al igual que el deporte, sin ellos no sería nada.
Quizás luego pueda enseñarte algunas cosas, pero claro sólo si te comportas como quiero—
Sonreí de medio lado con malicia.
Cuando me propongo algo nunca me falla, ya verán.

—¡Detente!
Ya hemos llegado—
Advirtio Maddie.

Su casa era grande similar a la mía, en la lejanía podía observar una lujosa casa blanca cubierta de vidrios y césped bien podado que corría por los amplios muros blancos.

"Aún no comprendo porque está chica tomó el bus de la escuela".

—Linda casa—
Observe con detalle y en la lejanía pude captar la imagen de su madre moviendo su mano de un lado al otro saludando.

—Gracias—
Dijo Maddie intentando abrir la puerta del auto pero sus intentos fueron en vano ya que yo decidía si salía o no.

—¿Te vas sin despedirme?—
Refresque mis labios con picardía.

—¡Okey! Adiós—
intento de nuevo salir del auto.

—Soy yo quien decide si te vas o te quedas—
Exclamé con autoridad.
—¿Así despides a tus amigos pequeña?—
Iniciaba el juego de miradas pero esta vez quien ganó fuí yo.

—¡Esta bien!—
Maddie acercó sus labios a mi mejilla pero hice un movimiento veloz mientras gire mi cabeza plantando mis labios en los suyos.