LOU | Larry Stylinson

Capítulo 33

Harry sonrió tanto que sus hoyuelos se marcaron por completo.

—Louis no es un mal chico —dijo ella, y suspiró pesadamente—. De todas maneras tiene que tener cuidado contigo. Sólo ten cuidado con algunas cosas; a veces pueden llegar a lastimarnos.

—Nadie sabe cuánto nos lastimará la vida —dijo Des con un plato, y una cuchara; estaba comiendo flan—. La vida te golpea, te arroja al suelo y es ahí cuando tú tienes que levantarte por más pesada que sea la carga que hay en ti. Es así. ¿Bien?

Anne le sonrió a su esposo, y asintió.

Ojalá pudiera decirles que los ama con todo su ser. Ojalá pudiera hacerlo.

***

Estaban sentados como indio en el patio trasero de la casa de Harry. Uno frente al otro; el rizado se fregó los ojos un poco soñoliento mientras Louis lo miraba atento.

—Des me ha dicho que no paras de decir: "No".

—No —le dijo Harry, y rió ligeramente haciendo reír también al castaño.

—Es bueno que estés diciendo otras palabras que no sea "Lou" —dijo Louis.

—Lou —dijo Harry. Creo que siempre amará decir Lou.

Louis rió por la nariz, y asintió.

—Algún día dirás "amor" —dijo el ojiazul—. Como siempre quise que dijeras.

Harry levantó su mirada, y lo miró a los ojos. Sí... recuerda que Louis quería que dijera esa palabra ante todo.

Y el castaño estaba por decir algo pero su teléfono móvil sonó, y lo sacó para fijar quién era y Harry, desgraciadamente, alcanzó ver.

"Tiffany".

Sin embargo, el rizado no dijo ni hizo nada. Se quedó nuevamente sin expresión. Louis miró a Harry como si estuviera haciendo algo malo y éste intentó sonreírle.

—Disculpa —dijo, y se levantó para hablar a "solas".

Eso molestó de alguna manera a Harry. Así que entrelazó sus manos apoyándolas en su regazo y suspiró pesadamente.

—Sí... muchas gracias, Tiff —dijo Louis, y de reojo miró a Harry.

El rizado frunció los labios, y se levantó del césped. ¿Por qué le molestaba tanto que Louis hablase con esa chica? Ni siquiera había pasado algo "grave" como para que él se molestase tanto. Sin embargo, no. Le molestaba demasiado y no podía evitar sentirse celoso.

Porque estaba celoso.

Estaba demasiado celoso y jamás pensó celar a Louis por algo. Sólo... ahora cayó en la cuenta de que había mejores personas que él, y en este caso chicas. Había chicas y chicos mejores que él y más hermosos que él. Y que él podría quedar aún lado; completamente insuficiente en todos los casos.

Cuando Louis terminó de hablar con esa tal Tiffany, volvió hacia a Harry con una sonrisa tímida y diciendo:

—Me ha llam-

Pero el rizado levantó la palma de la mano indicándole que no debía explicarle nada.

—Quiero hacerlo porq-

—No —le dijo Harry y negó con la cabeza.

Louis abrió la boca para hablar pero al final la cerró, y se acercó al rizado queriendo tomar su mano pero éste la alejó.

Cabe decir que Harry era bastante lindo cuando estaba celoso.

—No te molestes —dijo Louis en un tono bajo mirando a Harry—. Pequeño, no te molestes.