Lección 12: Ultra test

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El viernes llegó y con ello el famosísimo examen de aptitud. Lo único bueno de la situación era que al ser viernes me podía olvidar de la escuela por dos días completos. Después del ultra test no solían dejar tareas o trabajos

—Soul el desayuno está listo— me gritó Maka, desde afuera. Me levanté de la cama y como era costumbre salí de mi cuarto sin camisa, solo unos pantalones bordos para dormir —Buenas— saludé entre un bostezo

—Buenos días Soul

—¿Qué hay para desayunar?

—Pasta

—¿Pasta?— casi babeo. Me fascinaba la pasta

—Si pasta— respondió más animada al ver mi entusiasmo

—Me encanta la pasta— respondí poniendo café en el filtro de la cafetera, todas las mañanas esa era mi tarea

Ella rió —Me alegro, es mi receta especial así que espero que te guste

Olía exquisita, de seguro sabía genial, Maka se fué a su cuarto supongo que a cambiarse para la escuela. Dí el primer bocado y la pasta me supo a gloria, nunca había probado una pasta tan sabrosa —Esto es delicioso— admití aunque no me oyera. Luego de quince minutos salió de su cuarto

—Ya me voy Soul nos vemos en la escuela— me avisó pasando por el living

—Espera— me levanté limpiandome la boca con una servilleta —Yo te llevo— le ofrecí mientras sonreía de manera torcida, era lo menos que podía hacer por ella

—¿En... motocicleta?

—Por supuesto

—No gracias, prefiero caminar— se notaba que estaba asustada, aún no superaba su miedo aunque tuviera al conductor más cool del mundo

—Anda ya has viajado conmigo y ves que no pasa nada

—No, en serio

—Para agradecer el desayuno— insistí —Estuvo delicioso y es lo menos que puedo hacer por tí

Al final se resignó por mi insistencia —Vale, termina de desayunar en lo que termino algunas cosas ¿Bien?

—Es un hecho— Volví a la cocina, acabé rápido mi último bocado y me fuí a la alcoba para cambiarme. En unos diez minutos ya estaba listo para irnos —Vamos— tomé ni mochila y las llaves

Salimos del departamento y nos encontramos con unos cargadores que metían cosas en el departamento de a lado

—¿Nuevo inquilino?— pregunté

—No sé— Maka se encogió de hombros —Vamos se nos hace tarde

Bajamos hasta el primer piso y fuimos rumbo el estacionamiento del edificio. Montamos a mi bebé; Maka se agarró muy fuerte de mi, casi sacandome el aire

—No pasará nada Maka, déjame respirar un poco— Le pedí, luego ella aflojó su abrazo

—Perdón— se sonrojo levemente alejándose un poco. Sonreí no quería que me dejara de abrazar del todo.

—Está bien

Encendí el motor para luego acelerar, este día empezó bien para ser la fecha más tediosa del curso

Justo en la cuadra donde giro para llegar al Shibusen Maka empezó a reír como loca ¿Y ahora que le pasa? Inevitablemente también me empecé a reír, para cuando llegamos ella se bajó de un salto de la moto

—Eso fue genial— Dijo —Justo en la esquina pensé que moriría— Sonrió señalando en dicha dirección —Eres genial conduciendo, creo que no moriré si vuelvo a ir contigo

El Asiento De Adelante [Monochrome 1]Where stories live. Discover now