EL ASESINO Y YO

CAPITULO VI

El lunes llego, Stephan no volvió el domingo y ya es mediodía y no lo he visto me pregunto dónde estará?

STEPHAN

Te dije que me tienes que pagar una parte de lo que le debes al jefe.- dijo Paul quien es el subordinado de Oscar el jefe de la mafia de Inglaterra.

- YO NO LES DEBO NADA, MI ESTÚPIDO PADRE LES PIDIÓ EL PRÉSTAMO NO YO, MEJOR VAYAN A BUSCAR LO EN VEZ DE ESTARME JODIENDO A MI.

- Cállate, el jefe hizo un trato con tu padre y en el decía que si algo le pasaba a tu viejo tu tendrías que pagar así que comienza a trabajar.
Mi "trabajo" consiste en ir a cobrar otras deudas, en caso de que no quisieran pagar podía golpearlos pero sin matarlos, eso es un fastidio, aunque es mejor que el anterior trabajo que me habían dado, vender mi cuerpo, lo único bueno era que yo siempre fui el activo, hmp a veces me pregunto desde hace cuánto dejó de importarme estos trabajos?, cuando deje de sentirme solo? Bueno eso ya no importa lo único que es relevante en este momento es el hecho de que no pueda matar a David, es tan erótico cada vez que lo veo me éxito, su rostro lloroso es tan lindo, se ve súper tierno cuando está dormido, QUE? PORQUE MIERDA ESTOY PENSANDO EN ÉL? Es mejor que me concentre en el trabajo.

Toc- toc... se abre la puerta dejando ver a un hombre de 34 años más o menos, con un rostro con notorias arrugas.

- Vengo por el pago de este mes, más vale que tenga el dinero o te recuerdo lo que pasó el mes pasado?.- me miró con una cara deformada por el miedo.

- Por favor acepta esto.- me extendió un pequeño fajo de billetes- es todo lo que tengo comenzaron a salirle pequeñas lágrimas.

-Si claro y crees que me vaya tragar ese cuento otra vez anciano? sé que has estado comprando prostitutas así que o me pagas o ya sabes lo que va a pasar.- el maldito anciano entró rápidamente en su apartamento e intentó huir por una ventana, al oír el ruido de cristales rompiéndose entre por la fuerza no lo pude detener, al tratar de huir cruzo la calle sin fijarse y fue arrollado por un auto.

- pff, otro cliente muerto y la bronca es para mi.

Regrese resignado a las oficinas del jefe y efectivamente me regaño como si no existiera un mañana, como castigo tendría que trabajar mañana desde la mañana hasta pasado del mediodía es decir no iría a clases, menudo fastidio.