- Lo que me haya hecho a mí no va en contra de que sea una buena madre con Cameron... - Dijo cortando a la psicóloga.

- ¿Hasta cuándo la vas a defender, joder, Lauren? – Elevó el tono Ally.

Abrió la boca sorprendida por la actitud de su amiga. Podía ver la preocupación sincera de la psicóloga, pero se sintió confundida frente a lo le estaba proponiendo hacer... Si un informe sobre el estado anímico y una evaluación psicológica sobre Camila salía durante el juicio éso podía usarse a favor de la soldado... ¿Sería capaz de hacer algo así?

- Sólo piénsatelo, ¿Vale? – Dijo nuevamente Ally mirando la hora en su móvil. – Debo irme, cualquier cosa que necesites sabes que puedes llamarme... Que tengas un excelente día guapa.

La psicóloga se despidió con un par de besos en las mejillas dejando vacía la pequeña taza donde había estado el café... Lauren apretó sus puños mirando nuevamente por el ventanal para ésta vez no reconocer a ninguna de las personas anteriores, sólo un par de minutos, las personas iban y venían...

...

Cuando el agua caliente dejó de caer sobre su cuerpo adolorido sus pies temblorosos salieron de la ducha aquella mañana en que había despertado con una horrible gripe, había tenido que llamar al trabajo para avisar que no podría ir, pero que seguiría trabajando en sus diseños desde su piso.

Aún podía recordar la cara de reprobación que el Sr. Powell le había dirigido una vez que el almuerzo del viernes había terminado, ella sin excusas le explicó a su jefe que no tenía ningún avance sobre el nuevo proyecto del edificio comercial que debía construirse en la zona norte de la ciudad. Habían discutidos durante unos interminables minutos que finalmente se enmarcaron en una sutil advertencia por parte del hombre de cabellos blancos.

Ahora que se secaba el cabello desganadamente volvía a su mente cómo la noche anterior se había desvelado intentando buscar nuevas ideas y diseñar algo con el bolígrafo contra los papeles que hasta ésa misma hora seguían en blanco.

La pantalla pestañeando de su móvil le informó que tenía una llamada entrante, cuando detalló que quien llamaba era su hermana dejó la tarea con sus cabellos y contestó sin mucho ánimo.

- Ey, hola. – Saludó Sofía.

- Hola... ¿Ha pasado algo? – Dijo preocupada.

- ¿Tiene que pasar algo para que pueda llamarte? – Respondió algo sentida la menor.

- No... Perdona, es sólo que estoy con una gripe y he tenido que faltar al trabajo.

- Oh, ¿Estás bien?

- Lo soportable... Aunque voy aprovechar el tiempo y seguiré intentando hacer un nuevo proyecto que debo entregar pronto. – Dijo mientras se dirigía a la cocina para tomar una taza de café.

- Espero que lo logres... Por cierto, mamá ya me lo ha mencionado... - Sonó dudosa la voz al otro lado de la línea.

- ¿El qué?

- Ya sabes, lo del juicio, la custodia y todo éso. – Apuntó Sofía.

Se dejó apoyar en la encimera mientras intentaba re ordenar sus pensamientos internamente, era ilógico enfadarse con su madre y con su hermana, eran su familia, obviamente todos se enterarían en algún momento y ella misma necesitaba el apoyo de parte de ellos para superar lo que se venía.

- Si bueno... Lauren lo ha decidido... - Habló Camila.

- Me gustaría decirte algo, pero no sé qué realmente... Lo siento mucho Kaki, deseaba que las cosas entre ustedes mejoraran...

Amor inmarcesible. (CAMREN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora