Tom sonrió y lentamente abrió los ojos para ser recibido por mucha luz y un brillo intenso que le daba a su madre un aura casi angelical.

-"Hola Mama... te vez más hermosa que antes." Le dijo.

Simone se emociono hasta las lágrimas y le beso la frente con cuidado, evitando causarle algún daño. Luego de esto el Sr. Kaulitz se acerco también.

-"Todo salió bien hijo. Lo logramos!"

-"Así es Papa, Gracias por todo y tu también te vez bien." Contesto Tom emocionado.

Era como un sueño... había despertado y rápidamente una cortina de luz inundo sus ojos. Supo que había funcionado, había recuperado la vista y se sentía sumamente agradecido.

-"¿Y Bill no está con ustedes?" pregunto entre bostezos.

-"No hijo, estuvo aquí toda la mañana y se fue después que nos dieron el resultado de la operación. Pero tenía algo que hacer, dijo volvería mas tarde."

-"Ya veo... quiero verlo, quiero saber como es." Contesto Tom casi volviendo a dormirse.

-"Descansa Hijo, debes recuperarte pronto, ya habrá tiempo de todo."

Y con eso la madre nuevamente le beso dejándolo tomar el merecido descanso después de tan larga travesía.

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En la tarde mientras seguía todavía en la vieja relojería de su abuelo, Bill se comía las uñas de los nervios, sabía que tenía que volver al hospital y visitar a Tom, pero no lograba encontrar el valor para hacerlo.

Surgían demasiadas dudas, demasiadas preguntas sobre que podría pasar, en el mejor de los casos Tom seguiría siendo cercano a él y hasta con un poco de buena suerte descubriera que sentía algo por el... pero no, Bill no tenía tanta imaginación.

Tom no era gay y nunca se había interesado en un chico... de repente Bill se sintió inseguro de todo, de su vida, de su relación "amistosa" con Tom y se sintió algo inseguro incluso de su apariencia.

¿Qué tal si Tom pensaba que no era atractivo? ¿Qué talvez lucia demasiado exótico o andrógino...?

O peor aún, si ahora que lo vería pensaba que era ridículo sentir algo por un hombre...

Es verdad que se habían besado, que habían dormido juntos y que Tom lo quería cerca, pero eso era mientras el necesitaba de su ayuda y apoyo.

Ahora que estaba bien, ¿Por qué querría mantenerlo cerca?

Luego estaba el tema de que Bill si se había enamorado. Extrañamente pensó que nunca lograría reemplazar a Jared, pero cuando conoció a Tom todo su mundo se dio vueltas, hasta su trabajo artístico perdió importancia, nada lo inspiraba a pintar, excepto Tom.

Y se confeso a sí mismo de haber pintado retratos de Tom por las noches, cuando volvía a su departamento. Había tapizado las paredes de su casa con retratos de Thomas Kaulitz.

Algunos abstractos, otros al carbón, otros al pastel o al acrílico. Pero Tom era su muso.

Si Tom viera esos retratos ¿Qué pensaría? Probablemente que estaba loco...

Bill no sabía si estaba listo para enfrentar a Tom ese mismo día.

"No, mejor voy mañana y así lo dejo descansar..." pensó.

Y así lo hizo, decidió ir al día siguiente y enfrentar sus miedos e inseguridades en la noche.

Talves llegada la mañana, lograba juntar el valor de ir a verlo.

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Al día siguiente, efectivamente Tom fue visitado por varias personas, desde sus familiares hasta sus amigos.

Georg y Gustav estaban desde temprano en el hospital listos para felicitarlo por el éxito de la operación.

Tom se sentía sumamente alegre de ver a sus amigos, especialmente después de meses de no verlos o convivir tanto con ellos.

Los últimos meses se los paso más al lado de Bill, y es precisamente en el en quien estaba pensando.

Habría jurado que Bill iba a ir a verlo esa misma noche, pero no llego, así que asumió que talvez iría ese día. Tenía curiosidad de ver cómo era Bill fisicamente, no sabía cómo iba a reaccionar al verlo, al conocer el rostro de la persona que tanto bien le hizo durante su accidente.

Sin embargo tampoco tenía idea de cómo debía tratarlo... ¿Cómo amigo? O algo más.

Era claro que Bill sentía algo por él, y tampoco nunca negó su homosexualidad, pero la verdadera pregunta era ¿Qué sentía el por Bill Trumper?

No tenía idea clara, y pensó que lo mejor era verlo, conocerlo y dejar que su corazón decidiera que era lo correcto.

Era cerca de mediodía y Georg todavía seguía en la habitación de Tom.

Gustav se había tenido que ir por un compromiso de trabajo y Georg decidió acompañarlo otro rato más.

-"¿Y entonces Tom, que se siente volver a la normalidad?" pregunto.

-"Se siente bien Hagen, por fin vuelvo a ser yo mismo."

-"Me alegra amigo, ya te extrañábamos para salir. No sabes cuantas nenas te están esperando. Se que conmigo es suficiente, pero algunas chicas siempre nos preguntaban por ti."

-"Ya veo, pues pronto volveré al ataque. ¿Y tu como vas de amores?"

-"Ya sabes cómo soy Tom, no me comprometo con nadie. El Sexy carisma de Georg Listing es demasiado para dejarlo en monogamia."

Tom sonrió, se la estaba pasando genial con su amigo, y no tenía idea de lo que pasaba fuera de su habitación...

Bill recién llegaba al hospital, después de una larga noche sin mucho descanso, por fin se obligo a sí mismo a enfrentar su temores, tenía el estomago hecho un nudo de los nervios, no sabía cómo iba a reaccionar Tom al verlo, pero era algo que tenía que hacer si o si.

Sin embargo antes de entrar decidió ir al baño del hospital para revisar su atuendo. Ese día había decidido vestir de la mejor forma y cuidar cada detalle de su aspecto, aunque dadas las circunstancias no sabía ni lo que iba a pasar.

Se había puesto un atuendo no tan llamativo como solia usarlos, y peino su cabello de la mejor manera posible, también maquillo sus ojos, tratando de que sus sombras estuvieran perfectas. 

No quería espantar a Tom desde el comienzo sino que talvez y con algo de suerte se sintiera atraido a el.

Se coloco frente al espejo a ensayar la forma mas adecuada de autopresentarse.

-"Hola Tom, soy Bill..." se dijo a si mismo frente al espejo pero no le gusto.

-"Hey Tommi!! Soy Billy!!" volvió a intentar.

-"Hola Thomas, este que ves acá soy yo..."

Repetía las frases una a otra intentando no sonar nervioso o como un bobo. Como ninguna le convenció decidió intentar ser el mismo y actuar naturalmente.

Respiro profundo y agarro con fuerza la caja de chocolates que llevaba en la mano.

Se acerco a la puerta de la habitación de Tom y abrió la puerta levemente.

Cuando asomo la cabeza inmediatamente Tom y Georg lo voltearon a ver con curiosidad.

-"¿Hola?" dijo Tom sin saber quién era.

-"Hola... veo que estas ocupado. Mejor vuelvo más tarde" dijo Bill queriendo escapar.

-"No, no te vayas. Si es por mí no te preocupes que ya me iba." Contesto Georg.

Bill solo sonrió algo incomodo, sentía los ojos de Tom encima de todo su cuerpo, pero también Tom tenía cara de Póker y no sabía cómo interpretarlo.

Tom por su parte reconoció inmediatamente la voz de Bill y le quedo mirando. Finalmente le dijo.

-"Así que tu eres Bill..."

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E.G.OWhere stories live. Discover now