(Hola a todas, les dejo nuevo capitulo de EGO, espero les guste! aca veremos como es que puede entrar Bill a la vida de Tom)
Al día siguiente, el médico autorizo el alta a Tom, con la condición de que descansaría en casa y tendría el cuidado de tomar los medicamentos que le receto.
También se le recomendó tranquilidad y no hacer movimientos extremos, ya que estaría tomando un tratamiento que podría ayudar a acelerar su curación.
Los padres de Tom acordaron tomar la responsabilidad del caso y esa misma tarde lo llevaron a su antigua casa.
La Mansión Kaulitz era una enorme propiedad que pertenecía a la familia ya por varias generaciones, tenia amplios jardines y frente a la casa principal había una pequeña cabaña independiente.
Después de la petición de Tom de no volver a su antigua habitación, la madre había ordenado que acondicionaran la cabaña para Tom y que quitaran todos los adornos y objetos que fueran innecesarios, que solo dejaran lo básico, de esa forma seria más fácil para su hijo.
El médico les recomendó antes de salir que buscaran los servicios de alguna enfermera, o persona capacitada para rehabilitación, de preferencia con algo de experiencia en cuidado de personas discapacitadas.
Simone no lo creyó necesario, pero tomo el dato por si se llegara a presentar la necesidad en algún momento.
El camino a la casa Kaulitz fue muy silencioso, Tom no hablaba ni parecía querer hacerlo, en cuanto llegaron, los padres le ayudaron a instalarlo en la cabaña, le explicaron cómo estaban distribuidas las cosas, pero Tom no hizo mayor caso, solo se acostó en su cama dándoles la espalda, como si quisiera dormir y no levantarse más.
El padre supo que Tom quería descansar, o simplemente estar solo, así que salió del lugar, no sin antes prometerle a su hijo que seguiría investigando y buscando opciones para acelerar su curación.
Tom no respondió nada y solo se cubrió con la sabana hasta el cuello.
Simone se quedo un rato mas con el, sabía que para su hijo no era fácil comunicarse con su padre, ellos tenían una relación más bien fría desde hace un tiempo, más precisamente desde que Jorg le pidió a Tom que él se hiciera cargo de los negocios familiares, cosa que Tom rechazo ampliamente.
-"Tu padre ya salió Tom. ¿Cómo te sientes hijo?" pregunto ella sentándose en la cama.
-"¿Cómo crees que me siento...?" contesto Tom lacónico.
-"Hijo, sé que esto debe ser difícil para ti, pero estamos haciendo lo que podemos. Tú debes poner de tu parte para tu recuperación."
-"Tengo sueño mama, déjame solo." Fue todo lo que respondió.
-"Esta bien hijo, vendré a verte en un rato, debes tomar tus medicamentos cada 6 horas como dijo el médico. Descansa que lo necesitas mucho." Dijo ella y se acerco a darle un beso en la frente.
Tom no dijo nada, solo cerró los ojos queriendo que la cama se lo tragara y le permitiera desaparecer.
Cuando escucho la puerta cerrarse, se volteo y trato de levantarse para ir al baño, pero se dio cuenta de que no se acordaba en lo más mínimo como era esa cabaña, así que intento llegar por sí mismo, solo que le fue más difícil de lo pensado.
Sin querer tropezó con un mueble y se golpeo el dedo del pie maldiciendo en voz alta, aquello era peor de lo que se había imaginado, ¿Cómo se suponía que viviría en ese estado?
Solo esperando que por un milagro su cerebro se arreglara, o que algún médico se dignara en ayudarlo...
Después de una odisea solo para ir al baño, lentamente y dándose un par de golpes más, volvió a la cama.
Se sentía tan inútil que hasta para ir al baño sentía que necesitaba ayuda, aunque la idea no le gustaba para nada, tarde o temprano tendría que aceptarlo.
Finalmente después de un rato se logro dormir, y solo despertó cuando su madre volvió para darle la dosis de medicina, sin embargo no quiso comer, no se sentía de ánimo, prefería dormir, de esa manera era como estar en el limbo, donde no había pasado nada y seguía siendo una persona normal.
La señora Kaulitz no quiso insistir en obligarlo a comer, al menos no ese día, ya mañana hablaría con él.
Sin embargo mas allá de sus cuidados típicos de madre, sabía que Tom necesitaba otro tipo de ayuda, por un momento contemplo llamar a la agencia que le recomendó el médico, pero pensó que mejor esperaría a ver como evolucionada su hijo.
Después de revisar que todo estuviera en orden, salió dejándolo solo y sumergido en sus sueños, se pregunto si serian sueños tranquilos, o más bien pesadillas.
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Al día siguiente muy temprano, la Simone fue a ver a Tom, debía darle su medicamento, pero se encontró con que todavía dormía profundamente. Trato de despertarlo.
-"Tom, hijo, debes tomar tu medicina!" le dijo suavemente.
Después de varios intentos, al menos Tom se movió indicando que estaba medio despierto.
-"¿Qué hora es Mama?" pregunto.
-"Son las 8,30 de la mañana. Sé que odias madrugar hijo, pero debes tomar las dosis a las horas correctas."
Tom asintió sin ganas y apenas se incorporo para tomar la pastilla y dar un par de tragos al agua. Luego sin decir nada se volvió a acomodar para dormir.
-"¿Hoy si vas a desayunar Tommi, que quieres que te prepare?" pregunto.
-"No tengo hambre mama... talvez después."
-"Tom, debes comer algo y luego vuelves a dormir."
-"No quiero comer, estoy cansado..." y se acomodo para dormir de nuevo.
La madre hizo un gesto de preocupación, pero no insistió mas, salió dejándolo solo. Pero sabía que si no hacían algo pronto, aquello podría convertirse en un serio problema.
Volvió a la casa principal donde el Jorg estaba a punto de salir para la empresa.
-"¿Cómo está Thomas?" pregunto él.
-"No lo sé Jorg, no quiere comer, desde ayer dice que no tiene hambre."
-"Mmm, no lo presiones demasiado, pero si para la tarde no ha comido debes obligarlo, bien escuchaste al médico, debe cuidarse y ser estrictos en su recuperación."
-"Así será amor, prometo obligarlo a comer si es que es necesario. ¿Tu iras a verlo cuando vuelvas?"
-"Si, iré un rato, aunque no creo que el este muy complacido de mi presencia, ya sabes como
es."
-"Tenle paciencia, pronto entenderá tu postura y podrán mejorar su relación."
-"Eso espero... ahora debo irme, voy atrasado. A las 10 am tengo que contactar a ese hospital en Nueva York, escuche que tienen los mejores especialistas en estos temas." Dijo el Señor Kaulitz.
-"Esta bien, espero que tenga suerte." Y se fue.
A mediodía la Señora Kaulitz recibió la llamada de Georg, este quería saber si podía ir a visitar a Tom, y a la madre le pareció perfecta la idea, talvez la presencia de su amigo le animaba un poco y aceptaba comer.
Mas tarde puntualmente Georg estaba tocando la puerta de la casa, una de las empleadas le abrió y entro a la sala donde estaba la madre de Tom.
-"Buenas tardes Señora Kaulitz!" dijo.
-"Hola Georg, que bueno que viniste, estoy un poco preocupada por Tom."
-"¿Preocupada, acaso se puso mal?"
-"No, bueno no creo que sea algo físico, pero desde ayer no quiere comer, solo duerme y se despierta para tomar su medicamento, y bueno, talvez tu visita le anime un poco."
-"Esta Bien Sra. Kaulitz, ¿Dónde está ahora, en su antigua habitación?"
-"No, de hecho no quiso quedarse aquí dentro de la casa, así que le preparamos la cabaña de al frente, pensamos que estaría mas cómodo ahí."
-"Me parece buena idea. ¿Usted cree estará despierto?"
-"No lo sé, hace un par de horas que no voy a verlo, pero vamos juntos y así te llevo."
Georg accedió y ambos salieron de la casa en dirección a la cabaña. Al entrar vieron a Tom recostado en la cama, no hacía nada en particular, solo parecía pensar ido en alguna especie de idea.
-"Hijo, que bueno estas despierto. Georg vino a visitarte!" le dijo la madre.
-"Hola Tom, ¿Cómo estás?" dijo Georg tratando de sonar alegre.
Tom apenas reacciono, solo se incorporo un poco más en la cama y Georg se sentó en un sofá cercano. La madre supo que debía dejarlos solos.
-"Hijo, te dejo con Georg, mas tarde les traigo algo para comer." Dijo al salir.
-"¿Y Tom, como estas, como te sientes?" pregunto sin saber bien que decir.
-"¿Cómo puedo sentirme Georg? Como una mierda..."
-"Hey, no seas negativo, bien sabes que pudo ser peor. Además te vas a recuperar tarde o temprano." Quiso animarlo Georg.
-"¿Negativo me dices? Sabes lo que es que de la noche a la mañana tu vida se vaya al carajo, créeme que no es divertido depender de alguien, y menos volver a la casa de mis padres."
-"Se que debe ser complicado Tom, pero poniéndote deprimido no vas a solucionar nada. Mejor dime si has sabido algo de la compañía disquera."
-"De hecho si, al parecer se dieron cuenta de mi accidente y han decidido cancelar el contrato."
-"¿Qué? Que idiotas, no debieron cancelarlo, a lo mucho posponerlo o algo así."
-"Ya ves, no les agrado la idea de un músico ciego entre sus filas."
-"Bueno, ellos se lo pierden, estoy seguro de que algo mas va a salir, tú tienes mucho talento Tom."
-"No quiero hablar de eso ahora Georg, quiero olvidarme de la música por un tiempo."
-"Esta bien, como digas... sabes, sé que no debes agitarte y eso, pero pensé que talvez podríamos salir a dar una vuelta con Gustav y otros amigos, así te distraes. Podemos ir a un bar tranquilo a ver si conocemos alguna chica."
-"¿Estas loco Hagen, como crees que voy a ir a ligar en este estado? Lastima les voy a dar... no, es patético, yo no voy." Negó Tom.
-"Nada que ver Tom, al contrario, las chicas son muy sensibles con estas cosas, si te animas hasta podrías usarlo a tu favor!"
-"No, no iré, sería extraño y humillante."
-"Mmm, yo me comprometo a estar contigo todo el tiempo, no la pasarías mal." Insistió Georg.
-"No lo sé... talvez después, ahora no quiero hacer nada."
-"Esta bien, pero la oferta sigue en pie, estoy seguro que una linda chica te levantara el ánimo."
-"Claro... una hermosa chica. ¿Y de que me sirve una linda chica si no puedo verle las tetas Hagen?"
-"Pues talvez no se las veras, pero las puedes tocar, ¿acaso perdiste las manos también?"
-"No seas idiota. No iré Georg, no quiero que nadie me vea así. Imagina si llega alguna conocida, ver al Gran Tom Kaulitz hecho un despojo, no gracias."
-"Tom, no eres ningún despojo, deja de victimizarte, insisto que deberías agradecer estar vivo."
-"Ponte en mi lugar y luego me dices que sientes."
-"Esta bien, no vine a discutir contigo... cambiemos de tema, tu madre me dijo que no has comido desde ayer."
-"No tengo hambre."
-"Pero aunque no tengas hambre debes comer, si no te vas a poner flaco y feo."
-"No me importa ponerme flaco y feo, ni que me estuviera viendo al espejo..."
-"Tom hablo en serio, tu madre está preocupada por ti, no la angusties más de la cuenta."
-"No pretendo amargarles la vida, pero no tengo ganas de nada, solo quiero desaparecer del mapa."
-"¿Y pensando así crees que no se preocupan? Talvez no te des cuenta pero tus padres te aman y están muy afectados con esta situación. Hasta tu Padre que no es nada expresivo anda de arriba abajo buscando ayuda para ti."
-"Lo sé, lo sé. Pero es que esto es muy frustrante, imagina que hasta para ir al baño tuve una odisea, me golpee varias veces y por poco me caigo al piso, me siento un maldito inútil!!"
-"Es cosa de adaptarse Tom, podrías buscar ayuda, o no sé, alguna asistente o algo así. Una hermosa chica que te haga compañía."
-"Ya te dije que no me interesa ninguna linda chica Georg."
-"Bueno, entonces no una chica, contrata una viejita si quieres."
-"Mmm, no sé, ya pensare que hacer."
Min iba a replicar, pero en eso la Simone volvió a entrar a la habitación, venia acompañada de una sirvienta que traía una bandeja con comida.
-"Hijo, te traje algo de comer, y no me digas que no tienes hambre, no acepto una negativa!!"
-"No se preocupe Sra. Kaulitz, yo me encargo de que se coma todo." Dijo Georg guiñándole un ojo.
-"No soy un niño, nadie va a obligarme a comer."
-"No eres un niño, pero te estás portando como tal." Dijo la madre.
-"Deja la comida aquí, la comeré después que se hayan ido."
-"Esta bien, pero vendré a revisar que realmente la comiste, y no me vayas a engañar Tom."
-"No me sigas tratando como un niño mama, ya te dije, comeré cuando tenga hambre."
-"Bueno, pero ahora toma tus pastillas, eso si debo asegurarme que lo hagas."
Y Simone le entrego dos píldoras con un vaso de agua. Tom las tomo sin decir nada y se quedo callado.
El silencio se volvió algo incomodo para todos, así que Georg aprovecho para anunciar que debía irse.
-"Me voy Tom, si no quieres salir, volveré con Gustav otro día. Cuídate amigo, y no le des problemas a tus padres!" le dijo al salir.
Tom solo le hizo una seña de desdén y se volvió a acostar en la cama.
Georg y la Señora Kaulitz salieron de la cabaña y ya afuera Georg decidió hablarle.
-"Señora Kaulitz, no sé si sea una buena idea, pero se me ocurrió de todas formas. Gustav me comento que su estaba siendo acompañada por un chico que es artista o algo así. El caso es que la señora ha dado un gran cambio para bien, al parecer ese chico es muy bueno con las personas. Si usted quiere, le pido a Gustav que le pase el dato. Talvez podría servirle a Tom."
-"Si, puede ser una buena idea...de hecho en el hospital me dieron el dato de una agencia que tiene personal especializado en estos casos, pero no creo que eso le guste mucho a Tom... talvez ese chico que dices sea mejor opción."
-"Perfecto, en cuanto hable con Gustav le paso el dato."
-"Gracias Georg, eres un gran chico."
-"No me agradezca Sra., Tom es mi amigo y no me gusta verlo tan decaído. Voy a volver pronto y traeré a Gustav, a ver si logramos hacerlo salir al menos a dar una vuelta."
-"Si, me parece buena idea."
-"Hasta luego Sra. Kaulitz, tenga paciencia con el cabezotas de Tom."
-"No te preocupes, la tendré."
Y así Georg subió a su auto y salió de la mansión. Simone volvió a entrar a la casa y se quedo pensando en la oferta de Georg.
Talvez la compañía de ese chico le haría bien a Tom, en cuanto tuviera su dato lo llamaría para hacerle una entrevista.
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