El primer amor de Pansy Parkinson

Cenizas

Malfoy quedó con la boca abierta al sentir el golpe sobre su rostro, Pansy por su parte estaba deseando que la tierra se la tragara, ese beso le había removido un sin fin de cosas en su interior, no cabía duda de aquel dicho que dice "Donde hubo fuego, cenizas quedan".

—Yo no quería... soy un idiota. 

—En eso concordamos, se supone que te vas a casar, no vuelvas a hacer nada así. 

—En eso tienes razón, me voy a casar. — desvió su vista hacia el piso pensando en su prometidapor un momento. 

—Creo que uno de los dos se tiene que ir, y esta vez seré yo... — Pansy se fue caminando a su habitación para tomar sus cosas decidida a volver a su casa.

—¡Hey! no tienes porque irte, yo soy el que acaba de llegar 

— Disfruta entonces del apartamento, ya lo limpié y deje comida en la alacena.

Draco tomó a Pansy por la mano evitando que siguiera empacando sus cosas, los ojos grises y los verdes se contemplaron unos a otros, por un momento todo se sentía como si el tiempo no transcurriera y por inercia ambos se acercaron cada vez más hasta que terminaron en un profundo beso, que ninguno de los dos deseaba que terminara. 

—No, Draco no...

—Tus labios dicen una cosa, pero hacen otra...

—Estás comprometido

—Eso ahora no importa... 

Draco unió de nuevo sus labios a los de Pansy recostándola sobre la cama que muchas noches habían compartido, su cuerpo se encontraba sobre el de ella y sin pensarlo mucho levantó la blusa de la castaña arrojándola por algún lugar de la habitación, su mirada se centro en los senos de Pansy y su sostén negro de encaje.

—Sabes que amo este color en tu piel, pero es mejor cuando no hay nada...— le susurró desabrochando este de un  tirón. 

Los cuerpos de Pansy y Draco parecían conectar a la perfección, en ese momento cualquier palabra podía salir sobrando, ambos se entendían por medio de besos y caricias, y en cuestión de segundos se encontraban desnudos enredados entre las sabanas.

Pansy estaba consiente que lo que estaban haciendo estaba completamente mal y era irracional, pero el odio- amor que sentía por Draco era tan grande que estaba pasando por alto todos sus principios entregándose de nuevo al hombre que había amado desde siempre.  

—Te odio...—susurró Pansy sobre los labios de Malfoy  recargándose posteriormente en su pecho. 

—Lo se... —suspiró él volteando su vista a la ventana.

Lunes - Oficina De La Ley Mágica Internacional. 

—Buenos días Pansy... ¿Qué tal tu escapada a París? 

—Danielle, ¿Porque le dijiste a Blaise donde estaba?

—Tranquila, ¿Pasaron un buen rato no?

—Estoy segura que el se lo dijo a Draco.

—¿Porque lo dices?

—Porque... Draco y Yo estuvimos juntos en el apartamento el sábado. 

—¿QUÉ?— se escuchó el grito de Danielle por todo el piso del ministerio. —Lo siento!— gritó y cerró la puerta con seguro.  —Cuéntame eso...

—Peleamos, lo golpeé, tuvimos sexo, tomé mis cosas y volví a casa. 

—¡TUVIERON S.... ¿sexo?,  Pansy el se va a casar.