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07°

Abrió la tapa del retrete y dejó caer sus fluidos en el. El semen salió disparado y echó la cabeza hacía atrás, casi a punto de gritar.

Secó las gotas de sudor que resbalaron por su frente con una toalla. Subió sus pantalones y corrió hacia el espejo. Acomodó su cabello y lavó sus manos. Estaba nervioso, pero absolutamente seguro de que nadie le había escuchado.

O al menos eso esperaba.

Salió del baño, no sin antes asegurarse de no parecer tan agobiado.

Sun Hee observó preocupada a YoonGi cuando escuchó la perilla de la puerta moviéndose. Tuvo el mal presentimiento de que una pelea se desataría.

La mirada fulminante de YoonGi penetró a Jimin cuando entró, pero el pelinegro estaba tan absorto y malditamente nervioso por lo que había hecho, que ni siquiera lo notó.

A la castaña se le heló la piel cuando YoonGi caminó a pasos marcados hacia Jimin, pero.no pudo intervenir, simplemente cerró los ojos.

YoonGi tomó el cuello de la remera blanca del pelinegro y lo acercó bruscamente. Su puño se elevó y quedo cerca del rostro de Jimin, él sólo cerró los ojos, esperando el golpe del cual aún desconocía el motivo.

Pensó que quizá le habían escuchado y el platinado, conociendo su carácter, se había molestado por haberlo hecho en aquel momento.

Pero se equivocó.

YoonGi estuvo a punto de impactar su puño en la mandíbula de Park, pero justo antes de que lo hiciera, algo en el lo detuvo.

Sintió un vuelco cuando le miró. Y repentinamente pensó en qué tan importante sería defender su ego de hombre. Su dignidad desapareció cuando admitió que el beso le había gustado incluso más que el primero. No había motivo por el cual culpar a Park, si él sólo había hecho una práctica y en ese práctica, si bien no le había dicho todo el proceso, había recibido el mejor beso de su vida.

Se detuvo de inmediato. Alejó a Jimin de su agarre y se arrepintió por lo que estuvo a punto de hacer. Además, su mente estaba pasando por un desgaste extremo en aquel momento por intentar digerir la noticia, que realmente no estaba racionalizando coherentemente.

—¿Por qué no me dijiste que el primer perfume era una fragancia femenina? Ahora veo porque la he detestado.

YoonGi observó de soslayo el rostro sorprendido de SunHee cuando le vió mintiéndole a Jimin. Ella estaba tan aliviada de que el peliplata no haya terminado con su mejor amigo, que casi tuvo la idea de besarle de nuevo.

Jimin se encogió de hombros, aliviado porque ninguno de los dos haya notado lo que hizo.