♡♥ Mi mejor amigo ♡♥

♥Él estuvo para mí, cuando tú no estuviste♥

Capítulo treinta y tres...

Melinda...

Antes dije que no estaba feliz al escuchar la repentina propuesta de Alex.
Pues no solo estaba algo triste por eso, sino que me estaba comenzando a enojar su cinismo.

Sí, creo que él junto con el destino se burlaba de mí.
Después de tantos años... Después de tantas cosas que pasaron.
¿Cómo se atreve? Cree que puede volver a mi vida así como si nada.

¡Pues no!
No puede y se lo voy a demostrar.

-Aceptas Melinda... ¿Quieres ser mi novia? -Preguntó con dulzura.

Reí irónicamente. La verdad todo parecía tan irreal.

-No -Dije fríamente.

Su expresión feliz desapareció.

Fruncio el ceño. -¿Qué? -Él pensó que había escuchado mal.

-¡Que no! -Dije y me solté bruscamente de él.

-¿Por qué? No entiendo... Sí tú misma lo acabas de decir. Sientes lo mismo por mi. T-Tú me amas... ¿Verdad? Aún me amas -Preguntó con cara de preocupación.

Yo me sentí súper enojada, no podía creer que Alex me estuviese haciendo esto. Era como si estuviese entre la espada y la pared.

-¡Como puedes hacerme esto Alex! -Dije en un tono molesto.

-¿Cómo puedo hacerte qué? -Preguntó sin entender.

-¿Cómo puedes pedirme ser tu novia sabiendo lo que siento por Jack? Además... ¡Tú me rompiste el corazón y te fuiste para siempre de mi vida!

Sus ojos de abrieron como platos. -Melinda... Perdón, sé que no debí marcharme sin despedirme, pero-

-¡Pero lo hiciste! -Le recordé- No tienes ningún derecho de volver aquí con tú carita de ángel y complicarme la vida. ¡No lo tienes!

Okey... Tal vez no debí decir que tiene la carita de ángel.

Él estuvo anonadado por unos segundos, luego volvió en si.

-Tal vez, me merezco todo lo que me esta pasando. Tal vez tengas razón...

"Es un hecho" -Pensé pero no se lo dije.

-Alex... -Mi tono esta vez fue suave, quizás estaba siendo muy dura con él.
Pero vamos... Ustedes saben que solo estoy siendo realista. Alex no puede pretender que nada paso. Él una vez me rompió el corazón y por mucho que lo amo, eso no se me olvida.

-Para mi también fue difícil olvidarte, -Lo miré directo a los ojos. Los hermosos ojos marrones de Alex ahora me miraban con tristeza- pero ¿sabes que fue lo único bueno que obtuve de eso?

Él negó con la cabeza mientras me miraba tristemente.

-A mí Jack. -Dije sintiéndome orgullosa-Él estuvo para mí cuando tú no estuviste.

-Melinda... Yo-

-No, espera es que tú no sabes nada de lo que sufrí por ti- Lo interrumpi, él tenía que saberlo- Yo caí en depresión por ti. Supongo que eso no lo sabias... -Reí irónicamente, Alex quedó anonadado- Pero no importa, porque él me devolvió las fuerzas para seguir luchando. Cuando te fuiste yo sufrí mucho, pensé que nunca más volvería a enamorarme de nadie.

-Melinda... -Él intento abrazarme pero yo me aleje de su contacto e hice un gesto con ambas manos estando exasperada- Tú... -Mis ojos comenzaron aguarse.