El deseo puede más

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Me ganó el sueño completamente, hasta que sentí unas manos a través de mi espalda.

-mmmm-fue lo único que pude decir

-¿Te gusta nena?-pude distinguir la voz de Zayn

Pensé en reincorporarme pero rápidamente recordé que mi bikini estaba aun desatado a lo que lo tomé con mis manos con la intención de atarlo de nuevo.

-Permiteme- me dijo Zayn ayudandome a amarrar mis cintas

Me reincorporé y pude notar a todas las chicas dormidas, el sol había bajado y ya no había peligro de que nos quemarnos de más, voltee de nuevo a ver a Zayn y él me sonrió de manera amistosa.

-Ese bikini te queda bien

-Zayn callate... Te pueden escuchar-dije yo bajando la voz

-¿Qué? Solo estoy diciendo la verdad-se rió un poco

-Ven acompañame-me tendió su mano y yo la tomé sin pensarlo.

Tomé mis pantalones y mi playera y me deje guiar por él, no me dio tiempo de ponermelos y solo pude enrollar la toalla a mi cuerpo para no pasearme por el hotel en bikini.

Zayn llamó al ascensor y me tenía tomado de la mano.

Pensé un poco en lo que las chicas me habían dicho, todo entre él y yo era muy obvio, traté de soltar su mano y él volteo a verme.

Me vio con ojos de desaprovación total e hizo su agarre más fuerte en mi mano.

El ascensor llegó y ninguno mencionaba ni una palabra, cuando llegamos al piso solo me dijo

-Ven, vamos-no dijo nada más y yo me deje llevar tratando de no soltar mi toalla mal amarrada, rápidamente llegamos a la puerta de su habitación, me dejó entrar primero.

-Zayn ¿Qué...- antes de dejarme terminar la oración en un movimiento más que fugaz, cerró la puerta, y me pego a su cuerpo besandome y desaciendose de mi toalla

Sin pensarlo le devolví el beso poniendo mis manos alrededor de su cuello y jalando de su cabello ante su inesperado y apasionado beso.

Sin dudarlo Zayn me cargo poniendo sus manos en mi trasero y mis piernas rodeando su cadera.

Sus manos comenzaron a apretar mi trasero removiendo un poco mi bikini a lo que yo soltaba gemidos dentro de su boca.

Amaba su espontaneidad, me pegó contra a la puerta y siguió con su beso desesperado, metiendo su lengua en mi boca y yo jugaba con su lengua haciendo que él gimiera.

Podía sentir su erección por sobre sus pantalones a lo que yo succione un poco su labio inferior y lo mordisquee, la respiración de Zayn era muy rápida.

Me acomodó un poco y camino conmigo abrazada hasta estar en su cama, el se sentó en la orilla de esta y me dejó a mi sentaba en su regazo.

Este hombre va a volverme loca con sus besos, y sus caricias algún día.

La amanteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora