MIA

el sueño de la diosa

Recuerdo bastante bien el momento de mi caída, cuando todo mí alrededor se alejaba vertiginosamente para no volver hasta tres mil años después.

Mi dolor por ver a Loki alejándose de mí... era como extirparme el corazón aún viva. Mi alma quebrada en cientos de pedazos, sola y abandonada en medio de la nada. Cayendo al vacío. Apenas tengo recuerdo de haberme envuelto en tanto poder protector que casi no sentí el golpe al caer.

Podían exprimir mi alma cientos de veces y nada se compararía a la agonía de ser absorbida por la Gema Ego.

Lo siguiente que recuerdo eran voces a mi alrededor... extrañamente recuerdo oír a mi hermano Frey llorando, incluso pude sentir sus lágrimas en mi mano, pude oír gritos de Odín y de Loki... incluso Sif... era extraño. Como si todo una escena se desenvolviera a mi alrededor, era espectadora pero al mismo tiempo no podía ver nada ¿habría sido un sueño? Quizás, después de tantos años había olvidado lo que significaba llegar al Walhalla, mi verdadero hogar...

Mis valkirias cantarían canciones sobre mí y mis victorias... ¿podrían cantar sobre el amor que nunca confesé? ¿Cantarían sobre el dolor de perder algo preciado en el momento en que apenas has logrado acariciarlo? ¿Cantarían sobre mi amor por el embustero y encantador Loki? ¿Lloraría él por mí? Quiero verlo, quiero decirle la verdad, quiero confesar.

- No te vayas, aún tienes mucho que hacer a mi lado... no puedes dejarme otra vez...

¿Es su voz?

- Destruí mundos para encontrarte... vendí mi alma para hallarte... te juro que lo volvería hacer... si me dejas... si me dejas iré por ti... si tengo que bajar a Hel lo haré... por ti.

Idiota... idiota... idiota...

- Idiota... si bajas a Hel nunca te lo perdonaré.

- ¿Mía?

- Loki... Loki...

- ¿Sí? Dime... Mía... dime...

- Por... por qué...

- Qué cosa.

- ¿Por qué... estás azul?

- Tonta, arriesgada y vanidosa Vanir. Deja de hacerme esto.

- ¿Cómo voy a dejarte en paz? Tantos siglos sin mí... tengo mucho que recuperar. Tantas bromas, tantos chistes a costa tuya... los trucos para enfadarte...

- ¿Los besos que no me diste?

- Esos también.

- Creo que ni siquiera Odín puede entender lo que me pasaría si murieras de verdad. Durante tanto tiempo estuve hundido en mi tragedia que no logro contemplar paz, aun cuando estás tan cerca de mí.

- Es que pasaste tanto tiempo tratando de ser el malo de la historia... - le dije tomando su rostro - que olvidaste que tu corazón es el más tierno y amable de los nueve reinos.

- Oh Mía.

- He venido a unir las piezas que conforman tu corazón... y no me importa el tiempo que me tome. Limpiaré tu alma de la tristeza, mi amado estafador.

Decir que estaba feliz de verlo no alcanza a describir la forma en que mi corazón palpitó al oír su voz junto a mí, al ver sus manos tomando las mías, ni sus lágrimas caer de sus hermosos ojos verdes. Todo lo que quería era besar sus labios y hacerlo mío por siempre. Lo arrastré a mí y sacié mis ganas sobre su boca. No quería separarme de él... nunca lo haría, nunca más.