''Moebius'' [Rubelangel]

Capitulo 32

''tartamudo''

Rubén tenía razón en todo. Él me odiaba, y lo podía comprender. De verdad quería ayudarlo, ser su amigo, pero no iba a ser posible. Tenía miedo de lo que podría hacer, tal vez iba a intentar algo...No podía permitir que se me escapara de nuevo. Tenía que pedirle disculpas, no podía estar enojado con él, me hacía muy mal verlo triste.

Lo seguí, no me quedaba otra. No podía dejarlo de nuevo.

No sabía a donde se dirigía. Ya era de noche y hacía mucho frío. 

Cuando lo veo entrar a la escuela. No quedaba lejos de su casa, así que me resultó más fácil.

''No es buena idea que entres ahí.''

-No me importa...Yo lo quiero.-Dije en susurro.

Me quedé detrás de un árbol. Abrió la puerta y se fue directo hacia la oficina del director. 

Era tarde así que el director no iba a estar. 

Me acerqué más para verlo, me puse detrás de una ventana y vi que se sentó en el suelo y comenzó a escribir.

Las luces titilaban, tenía frío y había mucho viento.

Cuando de repente se levantó y agarró un arma que tenía a su lado.

''No es cierto...''

-No...Por favor.-Dije alterado.

Se dirigió hacia el baño, entré lo más rápido que pude.

Comenzó a correr, el baño quedaba arriba, creo que se dio cuenta que lo estaba persiguiendo.

-¡Rubén, no lo hagas!-Grité, y me agarré de la baranda para no caerme de las escaleras.

-Ya es tarde Miguel...-Se detuvo y me miro.

-No, nunca digas que es tarde. Siempre hay nuevas oportunidades para volver a levantarte, por favor. Confía en mi Rubén...Nunca te dejaré sólo, te ayudaré, por favor, yo estoy aquí para ti...Tu me importas mucho...-Me estaba dando cuenta que no tartamudeaba.

-Lo...Siento.-Siguió corriendo escaleras arriba.

Llegó al baño y cerró la puerta en mi cara.

-¡Ábreme por favor, te lo suplico!-Golpeaba la puerta, tenía mucho miedo.

La voz me temblaba, las piernas se me aflojaron y me tiré al suelo a llorar.

-Rub...Rubén por...por favor. Sal-Saldremos de es-esto jun-juntos...-Tenía un nudo en la garganta.

Se quedó en silencio. Y de repente se escucha un disparo.

No podía creerlo.

-¿Rub-Rubén?-Me apoyé en la puerta.

No hubo ninguna señal.