¿Cómo te lo digo?

Avanzar

A la mañana siguente me desperté demasiado tarde como para ir a mi sesión, tenía exámenes que realizar y aún continuaba estando sola, al menos él pudo habérselo pasado bien.

El timbre de mi departamento sonó repetidas veces luego de que tomé una ducha.

—¡Sam! ¡Samantha! ¡Sam! —El timbre sonó descontroladamente me cubrí con el paño y me acerqué a la puerta, miré a mi mejor amiga con los lentes puestos y el cabello despeinado.

—¡Wao, qué salvajes! ¿A qué jugaron al vaquero y la fiera?

—Tú novio, llegó borracho, tuvimos que bañarle y botó mis lentes de contacto.

—No es mi novio.

—Samanta, ¿Terminó contigo anoche? ¡Jodido gilipollas!

—No, es mi esposo, pero necesito un abogado.

—Dios mío, Sam, estabas tan molesta como para no invitarme.

—No. Karla, nos dejamos llevar, pero me echó en cara lo de Less, ¿Sabes cuantos años han pasado? ¿Sabes que me engaña?

—Sam...

—Dijo anoche: ""Estoy cansado"".

—Samantha, está literalmente cansado, te hace sopas que refrigera, marca y selecciona para el día de la semana. Te lleva a citas y Colton te acompaña. ¿Sabes cuántas veces le llama mientras recibes tu quimio? Él te ama, él tiene una enfermera dentro de casa, él está cansado de tus niñerías, porque sabe que sin importar cuántas sopas etiquetas y prohibiciones haga en su vida para que pases más días con él, puede que no sirva de nada. Santiago quiere días buenos Sami, él está cansado, es estúpido y quiere lo mejor para ti, pero, tú no se lo pones fácil porque le frunces el ceño, no comes lo que prepara y quieres dejar tu tratamiento. Sam, pide lo que quieras y te lo daré, pero es solo un deseo.

—Nadie me puede dar lo que quiero, quiero el control de mi vida, Karla mi novio me limpia el culo y le he bañado en vómito más de las veces que desearía poder decir Quiero no vomitar durante una semana y no perder un día de mi vida durmiendo, quiero que mi novio admire mi peluca y desee llevarme a la cama como lo hubiese hecho antes, quiero agradarle en lugar de ser su tarea, quiero que me llame a mí en lugar de Colton.

Querer.

Quería tantas cosas, mi vida se había basado en querer, pero había dejado de anhelar, de hacer y de vivir, me dedicaba a esclavizar y me sentía esclava.

—Sam perdón.

—Ve a tomar un baño.

—Nena, Santiago, ve a tomar un baño, me iré y volveré después de la terapia.

—Yo le llevaré, no creo que debas conducir.

Fui a vestirme y salí de mi casa con dirección al hospital, saqué sangre y el doctor me dijo que no recibiría la medicación durante el resto de la semana, esperarían por una evolución y luego realizarían más exámenes.

Colton nos acompañó hasta el auto y le vi textear, tomé s teléfono y llamé a Santiago.

—¿Anda algo mal? Debía haber ido hoy, voy para allá.

—Me estoy muriendo.

—¿Qué?

—Harán más exámenes, un descaso.