Prologo

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PROLOGO



— ¿Qué es el ser humano?

Esa pregunta resonó en los metálicos salones de aquel lugar desconocido, en quien sabe dónde.
Sus zapatos caros brillaban, su traje rayado azul marino era tan caro como el auto de un trabajador común y corriente; los gemelos que sostenían sus puños eran de plata y oro. Su caminar, era característico.

Miró con deseo lo que tenía enfrente de él, su creación, sus frutos de años en algo que podía tocar y sentir. Dos capsulas de vidrio de dos metros, y un líquido espeso dentro que parecía verde pero eso era solo efectos de las luces que lo iluminaban por dentro. Los cuerpos que allí flotaban tenían una mascarilla con oxígeno que los mantenía con vida.

Colocó sus manos detrás de la espalda como costumbre y caminó con elegancia, posando sus ojos sobre cada detalle, cada manguera y cada parte del cuerpo de aquellas dos personas que flotaban como parte de un experimento más que enfermo y sacado de un comic.

—Para mí son solo cadáveres. —replicó una voz masculina a sus espaldas, tomando por completo su atención.

—Sabía que no lo comprenderías. —respondió con fino acento y tomó la fina copa de vino que una sirvienta le hacía llegar puntualmente. —Solo debes pensar en el ser humano como un error de la naturaleza. Somos errores pero, está en nosotros ser perfectos y lograr el verdadero equilibrio.

Dirigió su vista de nuevo a su fiel acompañante que ahora tomaba asiento y se cruzaba de piernas; él siempre lo acompañaba y lo escuchaba en todas sus ideas.

— ¿Quiénes eran? —se burló aburrido, mirando la cara inerte de ambos cuerpos.

—Unos amables chicos que decían ser profetas del orden y equilibrio mundial. —dejó la copa de nuevo con la mujer que no se había movido de allí y sintió como el burlón posaba sus ojos al escuchar de su boca, esas últimas palabras. —Lastimosamente, me vi obligado a comunicarles de mi desacuerdo con su forma de ver el equilibrio en el mundo y los invite amablemente a ver mi proyecto.

Posesivamente, extendió la mano para tocar el vidrio blindado que separaba su mano abierta con la cara de ese muchacho que había conocido en su último viaje y recordó como estos se presentaron ante él bajo el término de "Agentes". Sonrió feliz, pues a su mente vinieron las imágenes de su pequeño debate y luego, la destreza con la que logró inyectarles un sedante.
Eran hermosos, unos ejemplares dignos de ser personalizados a la perfección.


LOTTO: "The Chronicles of the Hunter" [Segunda Temporada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora