La Quinta Merodeadora

Buen fenix

Brian me firmó en el brazo "B.B. ❤". Cuando Sirius lo vio se puso súper celoso. Fire no se separaba de mi estaba en mi hombro. Iba andando por los pasillos con Fire en mi hombro cuando Brian se acercó.

- Hola Snape que tal va todo.- Dijo acercándose para abrazarme cuando estaba un poco cerca y Fire empezó a ponerse agresivo con el.

- Fire no seas malo. De verdad lo siento, no suele hacer esas cosas.- Dije yo calmando a Fire.

- Ya y quien te regaló a ese fénix?- Dijo algo raro.

- Sirius por mi cumpleaños.- Le respondí yo.

- A ya lo entiendo le habrá enseñado ha hacer eso.-

- No lo creo.- Seguí caminando y me encontré a Sirius.- Canuto tu no le habrás enseñando ningún truco a Fire verdad?- Dije yo.

- No por?- Dijo sin enterarse de nada.

- Porque cuando Brian iba a abrazarme se ha puesto muy agresivo.- Dije molesta.

- Jajaja en serio buen fénix eres el mejor, jajajaja.- Dijo entre risas

- A mi no me hace ninguna gracia. Eres muy infantil lo sabias.- Le dije y salí de allí. Me fui a los jardines bastante alejada de todos estaba enfadada y necesitaba despejarme y como hoy era sábado. Estábamos Fire y yo estábamos a la sombra de un árbol cuando oí un quejido. Vimos a un fénix que parecía perdido.- Hola chiquitín te has perdido.- Cuando me acerque se hecho para atrás.- Tranquilo no te haré nada.- Fire bajo de mi hombro y se acerco al otro fénix. Este se tranquilizo, los subieron a mi hombro pesaban bastante.- Chicos tenemos un problema alguno se acuerda de volver.- Fire se levanto y empezó a indicarme el camino. Tardamos poco en llegar.- Bien ahora llevaremos a nuestro amigo al despacho de Dumbeldore el sabrá que hacer.- Llegamos y como no sabia la contraseña recordé a Sirius.- Caramelos de limón.- La escalera se movió guay funcionó, por fin servía para algo todas las veces que lo han enviado al despacho del director. Subí las escaleras y al llegar vi Dumbeldore algo preocupado. El fénix que había encontrado voló desde mi hombro hasta su lado.

- Fawkes estaba preocupado.- Dijo acariciando el lomo del fénix.- Gracias por traerlo. Donde estaba? Y como has sabido la contraseña?- Preguntó.

- Verá me peleé con Sirius y comencé a caminar por los jardines y me encontré a su fénix perdido y un poco desorientado lo calme y lo llevé hasta el castillo con la ayuda de Fire porque me había perdido. Y sobre la contraseña recordé que Sirius la había mencionado de cuando lo mandaban aquí.- Dije yo.

- Vaya se te deben de dar muy bien los animales porque Fawkes puede ser muy travieso aveces.- Dijo algo vertido.

- No crea Fire me a ayudado bastante es un muy buen fénix.- Dije acariciándolo.

- Los fénix son criaturas muy leales. Se nota que le tienes mucho aprecio.- Dijo.

- Si el mismo que a la persona que me lo regaló.- Dije yo.

- Bueno le estoy muy agradecido.- Dijo levantándose.

- No hay de que me voy, adiós.- Dije dirigiendo me a la salida. Me fui a buscar a alguien llevaba dos horas o por ahí fuera.

- Nevada hola.- Oí a alguien gritar a lo lejos me giré a ver y era Sirius. Fire bajo de mi hombro y fue volando hasta Sirius. Yo me acerque a donde estaba.- Perdona por lo de antes, me tenias muy preocupado. Donde has estado?- Dijo, se notaba preocupado.

- Luego te lo cuento vamos a ver a los demás.- Dije yo.