Blossoms in the Dark || Min Yoongi ||

6.

Por fin me había desprendido de la rutina Parisina... ya no era simplemente despertar, trabajar para comer y respirar. Japón me brindaba esos pequeños detalles que me hacían querer saber más y más... ir por más. Luego estaba Yoongi...
Después del día que comimos juntos no lo volví a ver; incluso a Tae, lo llegué a ver unas cuantas veces más antes de que terminara el especial de él en la revista, del cuál solo me encargué de las fotos.

-Entonces... ¿Regresarás a Corea?- Pregunté sin meditar, aunque era obvia la respuesta... ¿Quién no regresaría a su país si ahí está su vida?

-No aún...

-¿Qué? Pero... ¿Por qué?- El chico me confundió con su respuesta -Llevas más de 1 mes aq...

-¿Tan pronto quieres que me vaya?- Interrumpió.

-No, no...

-¡Entonces quieres que me quede!- Interrumpió de nuevo.

-No. Osh- Resoplé, lo tomé por los hombros y le tape la boca -No es eso. Sólo... creí que te estarían esperando

-A excepción de mis padres, no hay muchas personas que me esperen... no como a Yoongi- Se encogió de hombros y me miro sonriente.

Escuchar su nombre de alguien que no fuera yo me seguía causando problemas emocionales, en ese momento aún creía que lo que había pasado en la comida era un sueño.

-Eres... ¿Eres Elizabeth Simon?- Sentí como si cientos de hormigas subieran desde mis pies hasta mi cabeza, como si pequeños choques eléctricos atacaran todo mi cuerpo... como si se activara un medio de autodefensa.
En realidad sólo era mi sangre y mis nervios lo que me traicionaban. A los pocos segundos Taehyun soltó una carcajada audible en todo el lugar.

-Pero Eli... te haz puesto toda colorada- Se burló.

-¡Si lo eres! De otra forma no estarías así- Dijo Yoongi, con un rostro inexpresivo, pero con una voz tan cortante como lo serían 100 navajas recién afiladas.

-Si, lo soy- Dije al fin... -Y...-Mi yo idiota tenía que hacer una entrada espectacular y arruinar lo poco que había logrado-...¿Cómo lo sabes?- Ding, ding, ding. Si tenía la oportunidad de hablar con el con la verdad, lo había arruinado. Elegí hacerme la desentendida y fingir no saber quien era.

-¿De verdad no sabes quién soy?

-No...- "No sé que eres mi mejor amigo de la infancia, ni mi primer amor, ni el motivo por el que me tienes sentada en esta mesa" pensé.

-Entiendo- Me miró a los ojos y soltó una ligera carcajada, apenas audible -Bueno, suena lógico... me olvidaste desde hace tanto tiempo. No tendría sentido que recordaras siquiera mi nombre- Dejó de lado sus lentes y se levantó de su asiento para dirigirse a mi lado; para mayor sorpresa, se agachó a mi altura y giro la silla para quedar de frente mio.
No le importó si los demás en el restaurante veían, no le importó su amigo. Lo único que a el le importaba en ese momento era dejarme bien claro quien era, y lo estaba logrando.

-Eres...- Estuve a punto de decirle "Eres mi amigo de la infancia... 'Yoongi oppa' 'Yoonie' 'Mr. Min', te extrañé", pero no pude hacerlo. Al mirar sus ojos, y lo vacíos que esos eran en ese momento se me fue toda palabra, todo discurso mental que había preparado se fue a la basura. Esos ojos no eran los del Yoongi que recordaba.

-Min...- Jaló la silla hacia él -...Yoon...- Se inclinó hacia mi y me tomó de la barbilla -...Gi- Su rostro se acercó al mio hasta quedar a un par de centímetros de distancia. Podía sentir su cálido aliento en mis labios, y los ojos oscuros que había mirado hace unos segundos, se encontraban más cerca que nunca -Min Yoongi... recuerdalo.

Tan pronto dijo eso, dio un par de pasos hacia atrás, tomó sus cosas y salió del lugar. Sin mirar atrás y sin siquiera despedirse.

No lo volví a ver desde ese día, ni le pregunté por el a Taehyung. Él no era alguien a quien molestar por mis problemas del pasado, así que Yoongi nunca había sido mencionado en la conversación, hasta ese día.

-Oh... a él... ¿alguien lo espera?- Él pudo sentir la incomodidad en mi pregunta, sin saber bien el tema, sabía que había tocado una fibra sensible.

-Oh... bueno... si. Tenía mucho trabajo pendiente... um... ¡El reportaje! ¿Cuando sale la revista?

"Bien jugado Taehyung, bien jugado".

-En el siguiente número. Asegurate de dejarme tu dirección para enviarte unas copias.

-En Corea es fácil conseguirlas.

-No son de regalo... te enviaré algunas para que las firmes y me las envías de regreso- Bromee. Y de nuevo volví a ver esa enorme y bella sonrisa, la cual, si no fuera porque un tal Yoongi inundaba mis pensamientos, ya me traería muerta.

-Entonces, ¿Qué harás ahora?- Pregunté, intentando retomar el tema de su regreso a Corea y poder escuchar si quiera "su" nombre de nuevo.

-Voy a China por unos días. Después regresaré a casa.

-Oh, entiendo. Suerte entonces.

-Espero que esta no sea una despedida...

-No lo es, en absoluto. Pronto nos encontramos...

-¿Lo prometes?

-Lo prometo.

Me sentí extraña, esas palabras ya las había oído antes, y no vino nada bueno después de decirlas.
Le di un fuerte abrazo antes de decirle adiós en la entrada del edificio. Dio media vuelta y comenzó su caminata hacía un nuevo rumbo; avanzó unos cuantos metros y se giró para gritar "hasta luego" y agitar su mano de un lado al otro, con la enorme sonrisa en el rostro que lo caracterizaba.
En pocos encuentros, Tae se había vuelto una persona importante y cálida en mi vida, se había convertido en un amigo. Alguien a quien no tenía que olvidar, a quien no podría olvidar.