Antes de que la joven detective pudiera realizar progreso alguno en el caso, fue llamada a la escena de otro asesinado. En esta ocasión, el cuerpo de una  mujer fue encontrado atado y amordazado en el asiento trasero de un Ford Mustang.

Otro oficial estaba conversando con un hombre sentado en una silla. Lauren rápidamente supo que aquel hombre era quien cuidaba el basurero, acababa de iniciar su turno cuando hizo su descubrimiento. Lauren tomó notas mentales y físicas de su apariencia: un metro con setenta y cinco centímetros, contextura muscular, voz profunda, fumador. Jerry era exactamente lo que esperarías en su línea de trabajo, lo cual intrigaba y aburría a la ojiverde.

"Vio usted algo fuera de lo normal cuando llegó aquí?" le preguntó.

"No, acababan de dejar unos cuantos carros y yo me estaba alistando para comenzar mi turno. No vi nada fuera lo común. Fui a contar los carros y cuando llegué a Mustang me di cuenta de su horrible olor. Me acerqué para obtener una mejor vista y bueno... ahí estaba ella."

"Que vio?"

"Vi la chica. Ella estaba acostada ahí, toda envuelta. Algo muy malo debió haber sucedido para que terminara así," sus ojos se abrieron. "Entonces corrí a la oficina y tomé el teléfono, llamé al 911. No necesito cuerpos sin vida apareciéndose en mis turnos."

Jerry estaba feliz de cooperar mientras Lauren tomaba muestras del interior de su boca y debajo de sus uñas, hablando continuamente de su familia y su abuela moribunda. La detective estaba tratando de ser paciente con aquel hombre, pero estaba alcanzando ya su límite.

"Gracias, aprecio mucho la colaboración" Finalizó su tarea y se levantó, cortando al hombre a mitad del relato, antes de alejarse hacia el área acordonada.

Habiendo examinado el carro y el cuerpo de la joven mujer, Lauren entendió por qué fue llamada a esta escena en particular. El cuerpo tenía un aire familiar- maquillaje parcialmente inmaculado cubriendo el maquillaje corrido que tenía debajo, ojos abiertos y fijos en la manija de la puerta. 

Era extraño tener dos asesinatos en dos semanas, y la cabeza de Lauren comenzó a nadar entre un mar de posibles preguntas y respuestas ambiguas.

Presente.

Lauren se acomodó en su asiento. De un lado a otro, de un lado a otro. Decidió doblar su pierna debajo de su cuerpo, inclinándose sobre la mesa. Observó su reflejo en el espejo manchado de la sala de interrogatorios. Su cabello estaba desordenado, su rostro tenía el maquillaje de la noche anterior y sus ojos estaban ensombrecidos por bolsas negras debajo de ellos. Disfrutaba parecer un poco mayor de lo que era, y supuso que la sabiduría provenía de llegar a casa a las tres de la mañana y sumergirse en café como forma de almuerzo.

Un esbelto y curvo cuerpo, que había estado escondido bajo una capa de grasa de bebé cuando era menor, estaba ahora floreciendo con cada año que pasaba. Vestía un traje negro, un cinturón de cuero del mismo color y una camisa blanca, uniforme clásico para los de su unidad, pero siempre acompañaba el suyo con tacones. Eso le recordaba que era oficialmente el miembro mas joven del equipo de Orange County, y una de las pocas mujeres del mismo.

"Jauregui," el oficial Thompson comenzó, asomando su cabeza en el marco de la puerta. "La detective Cuh-bell-oh me dijo que venía a verte?" finalizó, señalando con su pulgar a la mujer que se encontraba tras él mientras movía sus cejas sugestivamente en dirección a Lauren, haciendo gestos obscenos con su boca.

"Gracias oficial Thompson, eso es todo." respondió la ojiverde con severidad, sacudiendo su cabeza, agradecida de que la visitante no alcanzara a ver la interacción desde un punto de vista mas revelador. Se levantó para saludar a la detective acercándose a ella.

Til Death Do Us Part (Traducción)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora