Capítulo 13

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Los incesantes pitos de los autos resonaban por las asfaltadas calles de Los Ángeles mientras caminaba hacia Porta's al encuentro de Kris. Habíamos quedado en encontrarnos en mi cafetería favorita en una hora pero había salido algo más temprano de casa para tener tiempo suficiente para hablar con May, hablaba frecuentemente con ella contándole todas mis aventuras pero de Hunter, no había mencionado ni una sola palabra.

Es raro ya que las mayorías de mis inolvidables vivencias en estas semanas se han debido a él, pero sorprendentemente había encontrado la forma de omitir todo a May en nuestras rutinarias conversaciones. Mi conciencia me estaba matado, debía hablar con ella lo antes posible pero parecía estar tan ocupada en los momentos donde yo estaba desocupada. Y a la vez, desocupada en los momentos en que Thea me hacía irritantes berrinches. Lográbamos hablar un poco durante la noche sobre nuestros días y ya le había ocultado bastante.

Como era costumbre, Porta's estaba vacío, sólo tres personas. Uno de ellos llevaba un libro en la mano pero parecía nuevo en la táctica de tomar café y leer, en la que me había vuelto experta hace unos años. Las otras dos personas estaban sumergidas en sus computadoras. Nadie volteó a mirar cuando entré en la cafetería lo cual agradecí mentalmente. Ser el centro de atención siempre me había puesto increíblemente nerviosa.

Me senté en la mesa habitual situada cerca de la ventana y saqué mi móvil para llamarle a May. Luego de unos segundos la alegre voz característica de May resonó por los parlantes.

—Y justamente estábamos hablando de ti — Contestó May al atender mi llamada.

—Razón, motivo, circunstancia y personajes —Pregunté interesada quién y qué hablaban de mí.

—Brad y yo veíamos el programa de cocina que tanto le gusta a tu mamá, luego recordé los fabulosos Brownies que cocinas y una cosa llevó a la otra, empezamos a hablar de ti y de cómo nos cocinarías Brownies al regresar —Escuché la voz de Brad al fondo mientras gritaba "te esperamos ansiosamente Laia"

—No se hagan ilusiones pero gracias, sabía que mi chocolate era el mejor. En realidad May, quería hablarte de algo muy importante, ya no lo puedo contener más. Sé que estás con Brad y tal vez esté interrumpiendo pero May, llegó la hora.

...

"Psicópata" a mi parecer, de ese modo había reaccionado May al contarle al pie de la letra cada detalle de Hunter, sin omitir nada.

Y aunque al principio fingía estar molesta conmigo por no haberle contado desde el día que lo vi por primea vez, aquél día en el sastre, pero me excusé en que hui de él y nos vimos unos 5 segundos solamente. También me excuse cuando lo vi en el avión, le dije a May que pensaba que no lo volvería a ver aunque no funcionó de la manera que quería porque al parecer ninguna de mis excusas eran válidas y no lo eran por lo que mi última opción fue rogarle que me perdonara. No fue tanto problema, la incertidumbre la estaba matando.

Hablamos una hora entera, la hora que había ahorrado específicamente para May en mi lugar favorito de L.A, aunque pude haber hablado con ella en mi habitación —Me gustaba tanto que me había acostumbrado a decirle de esa forma — preferí hacerlo en Porta's, donde nadie siquiera nota tu existencia. Solo quién te trae el café. Me pareció el lugar perfecto, May había reaccionado justamente de la forma que esperaba. Me había bombardeado de preguntas que había tenido que contestar una a una. Estaba sorprendida. Siempre le hice creer que el momento en que le comentara sobre alguna persona que me agradara emocionalmente sería nunca pero para su sorpresa, y la mía, había sido más pronto de lo esperado. Además, a exigencia y amenazas de muerte, le mandé aquella foto que nos habíamos tomado en su auto.

One Love. (Español)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora